BIENVENIDO A ESTE BLOG, QUIENQUIERA QUE SEAS



lunes, 16 de noviembre de 2020

Viganò llama a Francisco "garante espiritual del globalismo"

ES NEWS 


Estados Unidos está siendo testigo de la realización de un plan globalista que prepara una “dictadura mundial” que incluya a todas las naciones, dijo el 11 de noviembre el arzobispo Carlo Maria Viganò en el sitio web Katholisches.info.

Él advierte la colaboración de los medios de comunicación, de las organizaciones humanitarias, del mundo financiero e “incluso de la 'Iglesia' de Bergoglio”. Para Viganò, Trump es una voz disidente y un “fuerte obstáculo” y la elección de Joe Biden un fraude evidente.

Para Viganò se está desplegando un escenario “apocalíptico”, pero él duda de que éste sea “el conflicto final, en el que el anticristo parece prevalecer y en el que la Iglesia y la sociedad tradicional serán impiadosamente perseguidas”.

Según él, es “cierto” que “Bergoglio ha sido elegido a nivel mundial como el garante espiritual del globalismo”.

A Viganò le parece “que el trabajo llevado a cabo hasta ahora por el Papa argentino merece precisamente el aplauso de los demócratas y, más en general, de los que quieren establecer el Nuevo Orden Mundial”.

McCarrick, el lobby gay logra otro punto a favor



(Riccardo Cascioli, La Nuova Bussola Quotidiana – 11 de noviembre de 2020) Si se trata de una operación-verdad, como fue anunciada, o de «una operación surrealista de mistificación«, como la definió inmediatamente el Arzobispo Carlo Maria Viganò, no cabe duda de que el Informe McCarrick presentado ayer en el Vaticano está destinado a plantear más preguntas que las respuestas que ofrece.

A la espera de posteriores y específicas profundizaciones en las percepciones específicas sobre el caso del ex Cardenal Arzobispo de Washington Theodore McCarrick, hay dos cuestiones que saltan a la vista, ambos vinculadas a la homosexualidad: la primera es la tolerancia de la práctica homosexual, incluso en el Clero; la segunda, es el encubrimiento de la existencia de un lobby gay y de un sistema que favorece la «carrera» de los eclesiásticos con esa tendencia.

En lo que dice respecto al primer punto, a pesar de que del Informe emerge la figura de un McCarrick depredador en serie, la gran reacción se dispara solo cuando en el 2017 llega la primera denuncia de abuso de un menor. Y esto está bien destacado en varios puntos del informe, pero es también el dato en el que insiste el director de comunicaciones del Vaticano, Andrea Tornielli, en su editorial de presentación del informe, publicado en el portal Vatican News. Tras años de rumores, cartas anónimas y acusaciones «infundadas» pero referidas a «comportamientos inmorales con adultos» – explica Tornielli- «todo cambia con la aparición de la primera acusación de abuso de un menor de edad. La respuesta es inmediata. El procedimiento gravísimo y sin precedentes de la destitución del estado clerical llega al final de un rápido proceso canónico«… pero la trampa se dispara únicamente cuando entre los acusadores comparece un menor. Es un enfoque gravísimo porque ignora que el segundo delito – abuso de menores- es hijo del primero.

Concretamente se dice que los «comportamientos inmorales con adultos» ciertamente no son algo bueno, pero al final se toleran; la verdadera alarma, la que prevé sanciones incluso severas, se activa solo con la minoría de edad del abusado. Como si las decenas y decenas de futuros sacerdotes que compartieron la cama con McCarrick y, por tanto, en su mayor parte condenados a una vida sacerdotal como mínimo desequilibrada, no importaran gran cosa. Como si la devastación moral y de fe causada por un obispo depredador -vocaciones perdidas, sacerdotes que a su vez repetirán los abusos, nombramientos episcopales nulos por causa de relaciones morbosas- fuera un problema menor. Con certeza las voces insistentes desaconsejaban la promoción de McCarrick a sedes prestigiosas, pero la trampa se activa solo cuando aparece un menor entre los acusadores. Es un enfoque gravísimo que ignora además el hecho de que el segundo crimen, el abuso infantil, es hijo del primero.

Respecto al segundo aspecto, la reconstrucción del caso McCarrick acredita la idea de que se trata de una página negra para la Iglesia, sí, pero en cualquier caso un episodio que, gracias a todas las medidas tomadas especialmente por el Papa Francisco, difícilmente podrá volver a ocurrir. «Una triste historia de la que ha aprendido toda la Iglesia«, dice Tornielli.

Es dudoso, sobre todo porque se ha ignorado deliberadamente que lo que permitió el irresistible ascenso de McCarrick es un sistema de poder también llamado lobby gay, que favorece el nombramiento y la carrera de Obispos con determinadas características. De la lectura del Informe publicado ayer, se podría pensar que el caso McCarrick es el resultado de una desafortunada combinación de diferentes factores: la personalidad exuberante (para usar un eufemismo) del personaje, la falta de reglas claras, la vaguedad de las acusaciones, el error de buena fe de un Papa, la debilidad del gobierno de otro. Por supuesto, estos también son elementos que han tenido su peso, pero el verdadero problema es que sin la existencia de un entramado de relaciones y complicidades a distintos niveles, determinadas carreras serían casi imposibles.

Y esta red no funcionó únicamente para McCarrick, de hecho hay elementos que inducen a pensar que en los últimos años incluso se ha fortalecido. Recordamos el caso de Chile en 2018, cuando el Papa Francisco tuvo que rendirse a las pruebas no sin antes haber descalificado a las víctimas que acusaron a obispos y sacerdotes abusivos. Recordamos también el misterioso encubrimiento ofrecido en el Vaticano al Obispo argentino Zanchetta. Recordamos las denuncias que persiguieron al Cardenal hondureño Oscar Rodríguez Maradiaga, coordinador del grupo de trabajo de los Cardenales que trabajan junto al Papa Francisco para la reforma de la Curia («todas calumnias«, dijo el Papa el año pasado), y cuyo Obispo auxiliar Juan José Pineda tuvo que renunciar en julio de 2018 por acoso sexual en el seminario. Y recordamos también las «voces» que desde su nativa Puglia acompañan el rápido ascenso del recién nombrado Cardenal Marcello Semeraro quien, a su actual diócesis de Albano, la convirtió en la capital italiana de los cristianos LGBT. Y volviendo a McCarrick no olvidemos que hay varios obispos norteamericanos nombrados gracias al patrocinio del ex- Cardenal.

Y se podría continuar. No, verdaderamente no hay una señal de que la Iglesia haya aprendido del caso McCarrick, más bien existe la sensación de que a uno se le hace pagar para continuar tranquilamente con los otros. Y mientras tanto, se hace avanzar la idea de que tener tendencias homosexuales no es un problema para un sacerdote.

La naturaleza de la Iglesia

PADRE ALFONSO GÁLVEZ


DURACIÓN 33:36 minutos

https://www.alfonsogalvez.com/podcast/episode/4d561831/domingo-xxiv-despues-de-pentecostes

Homilía predicada el 14 de noviembre de 2010. 

Texto evangélico: Mt. 13: 31-35.