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martes, 31 de enero de 2023

Navarra. La socialista Chivite le quita el concierto en bachillerato a dos colegios vinculados al Opus Dei que imparten educación diferenciada

HISPANIDAD


El Departamento de Educación del Gobierno de Navarra —Ejecutivo que preside la socialista María Chivite-- ha remitido este lunes a los centros Irabia-Izaga y Miravalles-El Redín --ambos vinculados al Opus Dei, el primero como obra corporativa y el segundo por haberle encargado la orientación espiritual-- la notificación de la extinción de los conciertos educativos de la etapa de Bachillerato en ambos colegios por mantener separado al alumnado por su género, informa Navarra.com.

La decisión del Departamento de Educación de recortar la libertad de elección de los padres, a las que recurre el vicepresidente del Gobierno foral, Javier Remírez, se produce una vez recibidas y analizadas las alegaciones de los centros, que han sido rechazadas.

Y todo ello, se produce a pesar de que el TSJ de Navarra diera la razón a los colegios de educación diferenciada y suspendiera el castigo contra sus conciertos.

La motivación de la extinción de los conciertos radica, según el Gobierno de Navarra, en lo que consideran un "incumplimiento" de la disposición adicional 25ª de la LOMLOE, al mantener separado al alumnado de Bachillerato por su género.

Cabe recordar que el vicepresidente del Gobierno de Navarra, el socialista Javier Remírez, ha escogido la educación diferenciada (sólo chicas) para la enseñanza de su hija, pues la matriculó en el colegio Miravalles-El Redín hace ya unos años en Primaria y la ha mantenido en este centro académico, a pesar de que él mismo actúa desde el Ejecutivo contra estos colegios de educación diferenciada, donde se imparte la enseñanza obligatoria separada para chicos y chicas, publicó Navarra.com.

El socialista Remírez, que llegó a la vicepresidencia gracias a un acuerdo con los herederos de Batasuna de EH Bildu, ostenta la dirección de Igualdad del Ejecutivo foral, desde donde se persigue este tipo de enseñanza y se quiere impedir que cualquier otro ciudadano pueda escoger en libertad esta educación para sus hijos.

El colegio Miravalles-El Redín ha informado mediante carta a los padres que: "Es una resolución que no compartimos y que vamos a recurrir, ya que entendemos que, entre otras cuestiones, no respeta el principio de confianza legítima de las familias cuando eligieron para sus hijas e hijos el modelo educativo diferenciado".

"Contraatacando a la revolución cultural global"



Duración 1 hora y 10 minutos


A lo largo de esta conferencia el filósofo y periodista Alvino Mario Fantini , analizó en profundidad qué está pasando en Europa, por qué estamos relegando las raíces humanistas de nuestra civilización, y cómo están intentando imponer cambios profundos en nuestra cultura y filosofía.

lunes, 30 de enero de 2023

VOX SE DISPARA EN BALEARES, FEIJÓO NO PACTARÁ CON ABASCAL SÍ CON EL PSOE Y ÉXITO DE GARCÍA-GALLARDO



DURACIÓN 15:02 MINUTOS


Bienvenidos a RoberSR!!!

Nuevo vídeo en el canal comentando el último sondeo publicado a nivel autonómico para Baleares, que refleja un gran crecimiento de VOX.

La formación de Abascal sería tercera fuerza política, superaría el 13% de los votos y más que duplicaría su número de escaños. Unas elecciones, que ganaría el Partido Popular.

Además, veremos cómo Feijóo ha vuelto a descartar un pacto con VOX a la vez que reclama pactar con el PSOE y el nuevo éxito de García-Gallardo en Castilla y León.

Todo esto y mucho más en el vídeo de hoy!!!

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El que vote al PP está votando, en realidad, al PSOE. 

El PP se quiere asociar con el PSOE antes que con VOX. Así lo dice Feijoo

Crean la plataforma ‘Siempre Seremos Familia’ contra la ley de familias de Ione Belarra



Duración 6:51 minutos

domingo, 29 de enero de 2023

Graves consecuencias del miedo en la Iglesia



DURACIÓN 40:21 MINUTOS


1/02/2009 4º Domingo después de epifanía

No podemos tratar igual a dos religiones que dicen cosas tan distintas como éstas



Una respuesta a los que pretenden equiparar el Islam con el Cristianismo

Una vez más, el terrorismo islamista pone sobre la mesa un asunto incómodo para aquellos que, erróneamente, consideran que todas las religiones son iguales.

Los nuevos nazis: una multitud celebra el asesinato de judíos gritando 'Alá es grande'

Se da la coincidencia de que el primer crimen se llevó a cabo en el marco de varios ataques a iglesias católicas, mientras que el segundo se hizo en un ataque contra una sinagoga judía. Una vez más, y teniendo en cuenta los numerosos precedentes de atentados terroristas cometidos por islamistas, cabe preguntarse: ¿esos crímenes se llevan a cabo siguiendo los preceptos del Islam o contradiciéndolos?

A la hora de responder a esa pregunta, creo que hemos de partir de la base de que ser musulmán no convierte a nadie en mala persona. Estoy convencido de que la amplia mayoría de los musulmanes son personas que no tienen ni la más mínima intención de hacer daño a nadie. De hecho, muchos de los atentados del terrorismo islamista se dirigen contra los propios musulmanes en países de mayoría islámica. El extremismo islámico suele manifestar un odio atroz hacia otras ramas del propio Islam. No olvido tampoco que en España y en Israel hay musulmanes sirviendo a su Patria en las Fuerzas Armadas, y lo hacen desde el respeto a las personas que profesamos otras creencias.

No escribo estas líneas para juzgar a todos los musulmanes por igual, porque sería una grandísima injusticia. A las personas hay que valorarlas por sus actos, y si un musulmán lleva una vida decente y hace buenas obras, no merece ser señalado por las malas obras de otros.

Mi propósito no es juzgar a las buenas personas que profesan el Islam, de distintas formas, sino valorar el propio Islam y si merece la equiparación que algunos hacen entre ésa y otras religiones. Indudablemente, a lo largo de la historia muchos han cometido toda clase de atrocidades en nombre de Dios y también en nombre de la Libertad y en nombre del ateísmo, y eso no significa que ser creyente, amar la Libertad o ser ateo te conviertan en un criminal. La pregunta clave es: ¿tu religión o tu ideología te llevan a favorecer la convivencia con otras personas, o es al contrario? Ésta es la pregunta que algunos parecen olvidar a la hora de valorar las religiones y las ideologías.

Evidentemente, no es lo mismo una ideología que fomenta el odio y la violencia hacia otros y que acaba desencadenando matanzas -como ha ocurrido con el comunismo y el nacional-socialismo- que una ideología que defiende la libertad, la paz y la tolerancia. Y lo mismo podemos decir de las religiones.

En el Sagrado Corán, que es un libro escrito en tono imperativo, la Sura 9:29 dice lo siguiente en referencia a cristianos y judíos:
"¡Combatid contra quienes, habiendo recibido la Escritura, no creen en Alá ni en el último Día, ni prohíben lo que Alá y Su Enviado han prohibido, ni practican la religión verdadera, hasta que, humillados, paguen el tributo directamente!"
Por el contrario, en el Evangelio según San Mateo (5, 43-48) se leen las siguientes palabras de Jesucristo:

"Habéis oído que se dijo: “‘Amarás a tu prójimo’ y aborrecerás a tu enemigo”. Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y, si saludáis solo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto".

Así pues, hay una religión que llama a combatir a los que no creen en Alá, y hay otra religión que llama a amar a nuestros enemigos, incluso a los que nos persiguen. Cuando un musulmán se dedica a combatir a las personas de otras religiones puede encontrar una justificación en su libro sagrado. Un cristiano que odia a otra persona, aunque sea un enemigo, está incumpliendo un mandato del propio Cristo. Se pongan como se pongan algunos, no, no todas las religiones son iguales ni equiparables, y deberíamos ya abandonar la ficción de que lo son.

Por supuesto, todo creyente tiene derecho a ejercer su libertad religiosa, sean cuales sean sus creencias, pero esto no significa que todas las religiones sean iguales, de la misma forma que la libertad de expresión no significa que todas las opiniones sean iguales. Que exista esa libertad no me impide afirmar que ciertas ideologías están basadas en errores, y lo mismo cabe decir de determinadas religiones, entre ellas el Islam, a juzgar por lo que dice el Corán.

Lo más alarmante es que decir esto sobre el Cristianismo es algo habitual y que no conlleva ninguna clase de violencia, pero hoy en día, en Europa, el mero hecho de someter a crítica al Islam está convirtiéndose en una práctica de riesgo a causa de la intolerancia y de la violencia de muchos seguidores de esa religión.

Por otra parte, creo necesario recordar que hace sólo 11 días conocimos un informe que señala que los cristianos están sufriendo niveles altos o extremos de persecución en 36 países islámicos, entre ellos algunos supuestamente "moderados" como Marruecos, Túnez y Turquía.

En varios países europeos hay ya porcentajes importantes de inmigrantes procedentes de algunos de esos países islámicos, y con ellos se está trasladando a Europa la intolerancia que los cristianos sufren en dichos países. Aquí en Occidente, los musulmanes tienen plena libertad para practicar su religión, algo que no ocurre con los cristianos en países islámicos. Los musulmanes que residen en Europa deberían ser los primeros en exigir para cristianos y judíos en los países islámicos el respeto y la libertad que exigen para sí mismos en Europa.

En este sentido, ya va siendo hora de señalar que el problema que tiene Europa no es la "islamofobia", sino el extremismo islámico. La islamofobia no ha provocado masacres terroristas como la del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, la del 11 de marzo de 2004 en Madrid o la del 7 de julio de 2005 en Londres. Fueron islamistas. Si el Islam no se esfuerza por corregir sus errores y moderarse, ¿qué clase de respeto es el que nos pide?

ELENTIR

sábado, 28 de enero de 2023

Alemania desafía al Vaticano | Actualidad Comentada | 27-1-2023 | Pbro. Santiago Martín FM



Duración 11:16 minutos

NOTICIAS 28 de ENERO de 2023



CONTANDO ESTRELAS

El daño de la 'ley del sólo sí es sí': seguirá beneficiando a violadores aunque la corrijan

LA GACETA DE LA IBEROSFERA

VOX se personará como acusación popular en el caso del atentado islamista de Algeciras

SPECOLA

Gobernar con entrevistas y sin dar la cara, los alemanes rompen con el Papa Francisco, los ‘dubbia’ de los arco iris, ‘Jesús al revés’, Benedicto XVI nunca duerme.

RELIGIÓN EN LIBERTAD

Selección por José Martí

Benedicto XVI renunció al papado a causa del insomnio



Hora de desmontarnos de la película que nos habíamos armado en la cabeza, Benedicto XVI renunció al papado a causa del insomnio, punto. Nada de vatileaks, ni las amenazas de muerte un año antes de que se produjera la renuncia, ni amenazas de la masonería eclesiástica, ni el lobby homosexual, ni las presiones de aquel entonces al haber sido excluido el Vaticano del sistema internacional de código de identificación bancaria swift, ni siquiera la ingravescente aetate de que habla la declaración mediante la cual renunció (al menos no primordialmente), sencillamente Benedicto sufría de insomnio desde 2005 y ya no podía más con esa condición, ese es el verdadero motivo de su renuncia. Ya no podemos seguir interpretando aquellas condiciones climáticas en Roma del día de la renuncia como un tipo de señal celestial ni cosa parecida, habíamos armado una película sin haberla.


Este es un artículo de Aciprensa, Ene-27-2023.


Biógrafo de Benedicto XVI revela la razón exacta de su renuncia

Por Walter Sánchez Silva
27 de enero de 2023
Peter Seewald, periodista alemán y biógrafo del Papa Benedicto XVI, reveló la razón exacta que suscitó la renuncia al pontificado de Joseph Ratzinger.

La revista alemana Focus publica en su último número la carta que Benedicto XVI le escribió a Seewald el 28 de octubre de 2022, en la que le confía el “motivo principal” de su renuncia en febrero de 2013.

En la misiva, Ratzinger señala que la razón “fue el insomnio que me había acompañado ininterrumpidamente desde la Jornada Mundial de la Juventud de Colonia”, que se celebró del 16 al 21 de agosto en Alemania, la primera JMJ que presidió Benedicto XVI durante su pontificado.

Las “fuertes medicinas” recetadas por su médico funcionaron al principio y permitieron su “disponibilidad”, pero pronto estos “alcanzaron sus límites” y fueron “cada vez menos capaces de garantizar” su buen desenvolvimiento.

Un incidente durante el viaje a México y Cuba en 2012

El Papa Benedicto XVI visitó ambos países en marzo de 2012. La mañana que siguió a la primera noche en México, el Santo Padre tomó su pañuelo, como solía hacer, y vio que estaba “totalmente empapado de sangre”.

“Debo haberme tropezado con algo en el baño y me he caído”, agregó. Un cirujano logró “afortunadamente” tratar las lesiones de modo que no fueran visibles.

Tras lo ocurrido el médico personal de Benedicto XVI le pidió reducir los somníferos y le insistió que, en adelante y en otros viajes, solo estuviera disponible en las mañanas.

Benedicto XVI tenía claro que estas restricciones “solo podían aplicarse durante un breve periodo de tiempo”.

Joseph Ratzinger y su secretario personal, el Arzobispo alemán Georg Gänswein, explicaron por separado que la decisión de la renuncia maduró después de este viaje, y que Benedicto XVI anunció al mundo el 11 de febrero de 2013.

¿Por qué el biógrafo de Benedicto XVI hace esta revelación?

Peter Seewald confirmó a KNA (Agencia Católica Alemana de Noticias), la información de la revista Focus, y dijo que Benedicto XVI “no quiso hacer un escándalo en vida sobre las circunstancias más detalladas de su dimisión, justificada por su agotamiento”.

El biógrafo precisó que los rumores y las especulaciones sobre las razones de su renuncia, que incluirían “chantajes u otros tipos de presión” no han cesado luego de la muerte de Benedicto XVI, el 31 de diciembre de 2022.

Por eso, dijo, se sintió en la obligación de revelar “el detalle decisivo que se me confió de la historia clínica del Papa alemán”.

“Espero que esto acabe de una vez con las teorías conspirativas y las especulaciones erróneas”, subrayó.

Para concluir, Seewald dijo que la renuncia de Benedicto XVI fue por la falta de fuerzas y su salud, “exactamente como lo expresó en su declaración de dimisión”.

En 2010, en su libro-entrevista “Luz del Mundo”, el Papa Benedicto XVI le dijo “en términos inequívocos” a Seewald, “que haría uso de la opción de dimitir en cuanto sus fuerzas ya no le permitieran ejercer el oficio de Pedro”.

viernes, 27 de enero de 2023

‘Esto no es un hecho aislado, hay una gran cantidad de detenidos por yihadismo’ (Rubén Pulido)



Duración 8:27 minutos

Así fue el ataque terrorista de Algeciras



Duración 2:24 minutos

https://youtu.be/Tucp_2Qcvis

Algeciras, Vox y la cara dura de la izquierda sobre inmigración ilegal, okupas e islamismo



Izquierda política y mediática no rectifican ni ante el asesinato de un sacristán

En las últimas horas se han conocido varios detalles sobre el individuo que cometió el asesinato de un sacristán en Algeciras este miércoles.



El asesino es un inmigrante ilegal, islamista y okupa

Yassine Kanjaa, que es como se llama el autor del crimen, entró ilegalmente en España procedente de Marruecos, se había decretado su expulsión desde hace meses -pero seguía en España-, era un islamista radical y residía en una casa "okupa" de Algeciras. Para más inri, sus actos han demostrado que le movía el odio al Cristianismo, como ha quedado patente con su asesinato de un sacristán, las heridas graves que le provocó a un sacerdote y sus ataque a iglesias.

Un fruto más de las políticas irresponsables de la izquierda

A la vista de estas características, lo mejor que podría haber hecho la izquierda política y mediática es guardar un vergonzoso silencio en torno a este crimen, porque si por algo se caracteriza la izquierda es por su constante intento de alimentar el odio al Cristianismo, amparar a los okupas y ser tolerante con la inmigración ilegal y el Islam radical (recordemos, sin ir más lejos, los vínculos de Podemos con un régimen islamista como el de Irán). Son las políticas izquierdistas las que han creado el caldo de cultivo ideal para este crimen. Las mismas políticas izquierdistas que han sumido en la inseguridad a tantos barrios alejados de los chalets en los que residen los políticos progres que se muestran tan permisivos con la inmigración ilegal, los okupas y el islamismo.

En vez de pedir perdón, la izquierda se lanza a atacar a Vox

Ante lo ocurrido en Algeciras, la izquierda debería sentirse avergonzada y pedir perdón por lo que está haciendo. Pero si por algo se caracteriza la izquierda es por su absoluta falta de vergüenza, que le lleva a provocar problemas y después no asumir ninguna responsabilidad al respecto. Es más: para la izquierda, la culpa siempre es de otros. Y como de costumbre, la izquierda mediática se ha lanzado a atacar precisamente a Vox, el partido que lleva años alertado de los peligros de la inmigración ilegal, los okupas y el islamismo. Podemos ver aquí algunos ejemplos de la basura que han publicado algunos medios de izquierda y de extrema izquierda en las últimas horas:

En la misma línea, la ministra podemita Ione Belarra ha tachado de "miserable" a Vox por reiterar lo que viene denunciando desde hace años. Y por mucho que mientan y manipulen, Vox no ataca a los inmigrantes, sino que critica la inmigración ilegal. Que los propagandistas de la izquierda quieran confundir una cosa y la otra es algo normal, pero no deja de ser muy ruin.

Lo realmente miserable es lo que está haciendo la izquierda con sus políticas

Contestando la rabieta de la izquierda, pues no, miren: lo miserable es dar barra libre a la inmigración ilegal, a los okupas y al radicalismo islámico, que es lo que viene haciendo la izquierda desde hace años, simplemente porque tiene la esperanza de pescar votos entre esos colectivos. Lo miserable es la permisividad de la izquierda con toda clase de maleantes, que está provocando que muchos barrios sean inseguros, que haya muchos vecinos ya no se atreven a salir solos a la calle o que tienen miedo de dejar sus viviendas solas sus viviendas por si se mete un okupa en ellas. Lo miserable es que las políticas de la izquierda hayan traído a ese asesino islamista a España y le hayan dejado quedars, de la misma forma que han traído a violadores, maltratadores y otros delincuentes que se han aprovechado del coladero de este gobierno en materia de inmigración.

Aquí, en España, los auténticos racistas son los que piensan que los españoles tenemos que aguantar de todo a los inmigrantes ilegales porque nos consideran "blancos opresores" y a ellos los ven como "racializados oprimidos" a los que les debemos toda clase de disculpas y de reparaciones por el mero hecho de tener la piel más clara. Los demagogos son los políticos de izquierdas que les dicen a los españoles que ellos defienden a los más pobres, pero luego les llenan los barrios de delincuentes mientras esos políticos se van a vivir a chalets en barrios acomodados y seguros, a costa del sueldo que les pagan los españoles a los que han engañado.

Los que estigmatizan son los que te llaman "racista" y "xenófobo" por rechazar la inmigración ilegal y por denunciar el radicalismo islámico, dos posiciones absolutamente legítimas que para nada tienen que ver con el odio por motivos raciales o de nacionalidad. Es más: muchos inmigrantes legales, incluyendo muchos musulmanes, han llegado a España huyendo de esos fanáticos islamistas, y ahora se encuentran con la desgracia de tener que padecerlos también aquí por la irresponsabilidad de nuestros políticos de izquierdas y de sus corifeos mediáticos.

Para terminar, los que están rompiendo nuestra convivencia son los que quieren barra libre para okupas, inmigrantes ilegales e islamistas con la esperanza de conseguir entre ellos los votos que no obtienen entre los españoles y los inmigrantes legales que viven honradamente, que pagan sus impuestos y que no hacen mal a nadie

Es el mismo gobierno que ha beneficiado a cientos de violadores con la ley del "sólo sí es sí". No dejan de hacer favores a quienes se saltan la ley, a quienes quieren vivir a costa de los demás y a quienes quieren imponernos el Islam más extremista, y aún tienen la cara dura de llamar "miserable" al partido que se opone a todas sus fechorías.

Elentir

El libro testamento de Benedicto XVI: una confirmación (Roberto De Mattei)



La publicación de algunos libros aparecidos tras el fallecimiento de Benedicto XVI ha estado acompañada de gran resonancia mediática. Al libro-entrevista de monseñor Georg Gänswein (Nada más que la verdad: mi vida junto a Benedicto XVI) y el del cardenal Gerhard Müller (In buona fede. La religione nel XXI secolo) se ha sumado en los últimos días ¿Qué es el cristianismo?, editado por Elio Guerriero y Georg Gänswein, en el que se recogen textos, unos publicados y otros inéditos, redactados por Benedicto XVI a lo largo de sus diez años de pontificado.

Sin duda, estos libros resultan útiles para entender la personalidad de sus autores, todos ellos protagonistas directos de lo que sucede en la Iglesia, y en ese sentido son un aporte histórico útil, pero es dudoso que sirvan para orientar en la confusión actual. En particular, la figura de Benedicto está envuelta en un halo de ambigüedad, pues es presentado como punto de referencia de un frente conservador que se opondría a la deriva doctrinal de los obispos progresistas alemanes. A pesar de ello, es sabido que Benedicto procede de ese mismo ambiente. ¿Cómo y cuándo fue su conversión?

En una entrevista concedida en 1993, el entonces prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe Josef Ratzinger afirmó: «No veo que a lo largo de los años haya cambiado de perspectiva teológica» (Richard N. Ostling, John Moody y Nomi Morris, Keeper of the Straight and Narrow, en Time, 6 de diciembre de 1993). No hubo cambio de mentalidad entre el doctorando, acusado de peligroso modernismo por su profesor Michael Schmaus, y el audaz asesor teológico del cardenal Josef Frings durante el Concilio (1962-1965). Como tampoco lo hubo entre el cofundador de Communio (1972) y el catedrático de las universidades de Tubinga y Ratisbona (1966-1977). Ni entre el arzobispo de Múnich (1977-1981) y el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (1981-2005) Ni entre el papa nº 265 de la Iglesia Católica (2005-2013) y el papa emérito que siguió trabajando hasta su muerte en el monasterio de Santa Marta (2013-2022). Aunque su pensamiento teológico se enriquece y perfecciona, el hilo conductor mantiene la tentativa de encontrar una vía media entre las posturas de la teología tradicional, a las cuales nunca se adhirió, y el modernismo radical del que siempre se distanció. Lo que ha cambiado en la larga vida de Benedicto no son las ideas, sino su juicio sobre la situación de la Iglesia, sobre todo después del Concilio y de la revolución del 68.

A Josef Ratzinger lo afectó mucho, casi lo traumatizó, el colapso moral de la sociedad occidental y de la Iglesia postconciliar. En su último libro recuerda: «En diversos seminarios se organizaron clubes homosexuales que actuaban más o menos abiertamente y transformaban de forma patente el ambiente en dichos centros docentes. En un seminario de Alemania meridional, los aspirantes al sacerdocio y los aspirantes al cargo laico de pastoral vivían juntos. Durante las comidas, los seminaristas estaban con los laicos casados. Algunos de estos estaban acompañados de sus esposas, y en algunos casos de sus novias». En Estados Unidos, «un obispo que había sido rector tenía autorización para proyectar películas pornográficas a los seminaristas, presumiblemente con el fin de hacerlos capaces de resistir un comportamiento tan contrario a la fe».

Cuando era prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Benedicto habría podido intervenir con mano dura para poner fin a tal fenómeno. Si no lo hizo, ¿fue sólo porque siempre fue más profesor que gobernante, o por la debilidad que suponía una postura teológica incapaz de identificar los errores del Concilio y del postconcilio?

La nueva moral que se difundió por los seminarios y universidades católicas era fruto de la constitución Gaudium et Spes del Concilio Vaticano II, documento que evidencia ser un manifiesto de conversión de la Iglesia al mundo moderno. Pero si la Iglesia renuncia a evangelizar el mundo será inevitable que el mundo mundanice a la Iglesia. El debate sobre la correcta interpretación de Gaudium et Spes no tiene mucha importancia, porque para contener un proceso revolucionario no bastan los meros instrumentos de la hermenéutica si ese proceso de disolución no se contrarresta con un proyecto de reconquista y recristianización de la sociedad.

Los diez años de pontificado emérito de Josef Ratzinger han coincidido con los diez del pontificado de Francisco, que han estado marcados por la exhortación apostólica Amoris laetitia del 19 de marzo de 2016, pero también por las controversias suscitadas por ésta, entre ellas los dubia del 16 de septiembre del mismo año, suscritos por cuatro eminentes cardenales (Walter Brandmüller, Raymond Leo Burke, Carlo Caffarra, Joachim Meisner) y la Corrección filial del 11 de agosto de 2017, firmada por más de doscientos teólogos y especialistas de diversas disciplinas. Benedicto no podía desconocer estos documentos han pasado a la historia por la importancia teológica y moral de los temas tratados y la autoridad de los firmantes, y sin embargo no hay constancia de ello en las reflexiones contenidas en su libro. Y sobre todo, el papa emérito nunca consideró importante explicar los motivos de su abdicación; se limitó a señalar en su último libro: «El 11 de febrero de 2013, cuando anuncié mi dimisión del ministerio de la sucesión petrina, no tenía pensado qué iba a hacer en mi nueva situación. Estaba demasiado agotado para planificar otras tareas».

Diríase que ha llegado la hora de que se dejen de buscar tantas razones ocultas. La abdicación del Pontífice no se debió a misteriosas presiones, sino al agotamiento físico y mental, como explica con todo lujo de detalles monseñor Gänswein en las páginas que en su libro dedica a lo que llama histórica renuncia. Ese agotamiento fue además una confesión de impotencia ante una crisis moral que habría encontrado una nueva expresión en la Amoris laetitia del papa Francisco. En dicho documento, la moral queda reducida a depender de las circunstancias históricas y las intenciones objetivas de quien realiza un acto humano. Ese relativismo tiene su raíz primigenia en el abandono de la metafísica que tiene lugar cuando se sustituye la tradicional categoría filosófica de sustancia por la moderna de relación. Esto dice el papa Benedicto en su último libro: «A medida que se desarrollaban el pensamiento filosófico y las ciencias naturales, el concepto de sustancia se alteró radicalmente, y lo mismo pasó con el concepto de lo que en la filosofía aristotélica se denominaban accidentes. El concepto de sustancia, que antes se había aplicado a toda realidad en sí consistente, se fue aplicando cada vez más a lo que es físicamente inasible, como las moléculas, los átomos y partículas elementales. Actualmente se sabe que tampoco estas cosas son sustancias últimas, sino una estructura de relaciones. Ello ha traído consigo un nuevo cometido para la filosofía cristiana. La categoría fundamental de todo lo real ya no es en general la sustancia, sino la relación. En este sentido, los cristianos sólo podemos decir que, para nuestra fe, Dios es una relación, relatio subsistens». Tiene razón Benedicto cuando afirma que «una sociedad en la que Dios está ausente –es decir, que no lo conoce y lo trata como si no existiese– es una sociedad que pierde su criterio. (…) En la sociedad occidental Dios está ausente en la esfera pública y ya no tiene nada que decir». Pero Dios no es una relación; es el Ser perfectísimo, y por tanto el Sumo Bien y la Verdad Infinita. Se llama precisamente Ser, el que es (Éx. 3,14). Todo desciende de Dios, y todo conduce a Él. Él y nadie más que Él, Ser por esencia, podrá resolver la crisis religiosa y moral de nuestro tiempo.

Roberto De Mattei

martes, 24 de enero de 2023

Mons. Juan Straubinger: Reglas católicas para la lectura de la Sagrada Escritura.

 STAT VERITAS



Como poseemos en el magisterio infalible de la Iglesia la próxima y última regla de nuestra fe, la lectura de la Sagrada Escritura no es requisito indispensable para nosotros. Sin embargo, desde los tiempos de los apóstoles hasta las más recientes manifestaciones de las autoridades eclesiásticas, fue inculcado y sigue siendo inculcado el leer y estudiar las Escrituras a fin de profundizar la fe y ampliar y arraigar los conocimientos religiosos, y principalmente, para conocer la persona, vida y doctrina de nuestro Salvador Jesucristo. “Ignora a Cristo quien ignora las Sagradas Escrituras.” (San Jerónimo).
Más aun insiste San Juan Crisóstomo en la lectura del libro divino, por ejemplo en su primera homilía a la Epístola de San Pablo a los romanos: “Como los ciegos se hallan incapaces de ir derecho, así los privados de la luz que resplandece de las Escrituras Divinas, yerran continuamente puesto que caminan en espesas tinieblas.”
¡Ay de los muchos que hoy en día recorren los caminos de un mundo tempestuoso sin la luz del Evangelio!

I. Leamos la Sagrada Escritura con espíritu de fe.

El hombre que vacila en la fe, “es semejante a la ola del mar alborotada y agitada por el viento, acá y allá” (Santiago 1, 6). El hombre de ánimo doble, que está dividido entre Dios y el diablo, es inconstante en todos sus caminos. En vez de enseñarle y consolarle, la palabra de Dios le sirve para su ruina.
¡Cuántas veces Nuestro Señor no ha insistido en la necesidad de la fe!: “Oh mujer, grande es tu fe; hágase conforme tú lo deseas. Y en la misma hora la hija quedó curada.” (Mat. 15, 28). Negó el médico divino varias veces su ayuda por faltar la fe, por la incredulidad de los suplican­tes. “Tenéis poca fe... si tuviereis fe, como un granito de mostaza, podréis decir a este monte: Trasládate de aquí a allá, y se trasladará y nada os será imposible.” (Mat. 17, 19). Jamás olvidemos el lamento del Señor: “¡Oh raza incrédula y per­versa! ¿hasta cuándo he de vivir con vosotros? ¿hasta cuándo habré de sufriros?” (Mat. 17, 16).

II. Leamos la Sagrada Escritura con espíritu de humildad.

Los misterios del reino de Dios no se revelan a la sabiduría puramente humana, por grande que sea el genio de sus maestros, sino sólo a los humildes. La humildad, la virtud de los pequeños es indispensable, para que el lector de la Biblia saque los valores intrínsecos del libro de los libros. Hay que volver a ser niño; hay que exponerse con espíritu sencillo e inocente a los rayos de la luz que, por falta de nombre adecuado, definimos con el nombre de misterios.
De otro modo no podríamos comprender el espí­ritu del Evangelio, ni aplicarlo a la vida: “En verdad os digo, que si no os volvéis y hacéis semejantes a los niños, no entraréis en el reino de los cielos.” (Mat. 18, 3). Y para grabar esta amonestación en los corazones de sus discípulos, Jesús llamando a un niño y colocándolo en medio de ellos, les dio una lección más elocuente que todas las palabras.
“Quien se humillase, será ensalzado.” (Mat. 23, 12). Quien con espíritu de niño se acerca a los tesoros de la Sagrada Escritura, los conseguirá. A los demás, los orgullosos y presumidos, los pre­suntuosos y ambiciosos se les cierra la puerta.
Saca, pues, saca, alma mía. El pozo es pro­fundo; y jamás se agotará.

III. Leamos la Sagrada Escritura con el propósito de reformar nuestra vida.

La senda que conduce a la vida eterna, es estrecha, mientras que el camino que conduce a la perdición, es ancho y espacioso (Mat. 7, 13-14). ¿Quién será nuestro guía en la estrecha senda? Abre el Evangelio, lee las Escrituras; medita un ratito sobre las enseñanzas que te brinda el Evangelio en cada página; y encontrarás al guía que te hace falta. La palabra de Dios es uno de los medios más apropiados para nuestra salvación; sólo que debemos ponerla en práctica, como dice Santiago: “Recibid con docilidad la palabra ingerida que puede salvar vuestras almas. Pero habéis de ponerla en práctica, y no sólo escucharla, engañándoos a vosotros mismos. Porque quien se contenta con oír la palabra, y no la practica, este tal será parecido a un hombre que contempla al espejo su rostro nativo y que no hace más que mirarse, y se va y luego se olvida de cómo está.” (Santiago 1, 21-24). El Evangelio es, pues, el espejo en que hemos de contemplar el semblante de nuestra alma, para ver las faltas que la manchan. Si no, somos como aquel hombre olvidadizo que se engaña a sí mis­mo, no sabiendo cuál es su rostro.
Reformar la vida, conformar la conducta a los preceptos del Evangelio; he aquí los frutos más provechosos de la lectura del Evangelio. Leyén­dolo, meditándolo dejamos de ser injustos, menti­rosos, avaros, orgullosos. La palabra de Dios penetra en el alma como una espada de dos filos (Hebr. 4, 12), que ha de apartar a los malos de los buenos; que va a despertar a los ociosos y rechazar a los presuntuosos; que está destinada a humillar a los doctos vanidosos, pero a satis­facer a quien con razón recta y pura busca a Dios y la salud eterna.
¡Ojalá busquemos con toda el alma esa fuente de regeneración moral!

IV. Leamos la Sagrada Escritura todos los días.

¿Por qué todos los días? ¿No bastaría leer la Biblia una sola vez, como los otros libros, y des­pués depositarla en la biblioteca? No, amigo mío. La Sagrada Escritura es un libro de categoría superior, y no como los demás de tu biblioteca, muchos de los cuales, una vez leídos no valen más que el polvo que los cubre.
Hallábase en Alejandría, en Egipto, la más rica biblioteca que se conocía en la antigüedad, una verdadera maravilla de riqueza literaria. Sin em­bargo, los musulmanes cuando ocuparon aquella ciudad, arrojaron al fuego todos los libros de la biblioteca argumentando: o consienten con el corán (libro santo de los musulmanes) o no consienten con él. En el primer caso son superfluos, en el segundo malos.
Hay en realidad un libro de que se podría afir­mar la preeminencia que los secuaces de Mahoma atribuyen al coran. Es la Sagrada Escritura. Por tanto ya León XIII concedió indulgencias a los que leen la Sagrada Escritura: una indulgencia de 300 días para la lectura de quince minutos y una indulgencia plenaria a los que durante un mes observen tan provechosa práctica. Pío X no desea más que la lectura diaria de la palabra de Dios.Benedicto XV repite la misma intimación en la Encíclica llamada de San Jerónimo del 15 de Sept. de 1920: “Toda familia debe acostum­brarse a leerlo y usarlo (el Nuevo Testamento) todos los días.”

V. Leamos la Sagrada Escritura en la familia.

“Donde dos o tres se hallan congregados en mi nombre, allí me hallo yo en medio de ellos.” (Mat. 18, 20). Estas palabras del Señor, además de verificarse constantemente en la comunidad de la Iglesia, siguen cumpliéndose donde quiera que dos o tres se reúnen en nombre de Jesús para la lectura común de la Biblia en la familia. ¡Qué aspecto tan hermoso! El padre, rodeado de sus hijos, leyendo en voz alta el Evangelio, y añadiendo algunas anotaciones que el sentimiento religioso y la responsabilidad paterna le dictan!
La familia que diariamente se reúne pura la lectura de la Biblia, es un pilar del temor de Dios, un fuerte fundamento de la vida religiosa y un dique contra las ideas perversas. “¡Que no haya ninguna familia sin el Nuevo Testamento” Este deseo de Benedicto XV sea para nosotros un precepto. Tan pronto como las familias se pongan a leer la Biblia, el mundo se cambiará, porque de la familia inspirada en la doctrina del Evangelio, surge el renacimiento de la humani­dad, así como la regeneración del cuerpo procede de la célula.

VI. Siete consejos para los lectores de la Sagrada Escritura.

1° Antes de leer, recoge tus pensamientos. Dios, la verdad eterna quiere dialogar contigo fami­liarmente. ¿Hay un honor más alto que conver­sar con Dios?
2° Luego pide al Espíritu Santo la gracia de entender su Palabra. Piensa que el sacerdote antes de leer el Evangelio de la misa, está obli­gado a rezar el “Munda”, el “limpia mi corazón y mis labios”.
3° No leas demasiado de una vez. La Sagrada Escritura no es una novela. Dios no habla por la multitud de palabras sino más bien mediante la fuerza del espíritu, infusa en las palabras de la Sagrada Escritura.
4° Después de leer hay que meditar los ver­sículos leídos. En otras palabras: no sólo estudiar el contenido sino prestar los oídos a las inspira­ciones de Dios.
5° Cuando no comprendas lo que lees, consulta las notas añadidas, los comentarios o a un sacer­dote. La Iglesia, y no el lector, es intérprete de la Sagrada Escritura.
6° Acaba la lectura con una oración y acción de gracias por las ilustraciones que Dios te ha regalado.
7° Escribe en un cuaderno cuanto quieras gra­bar en la memoria para leerlo repetidas veces. Así se aumenta la eficacia de la Palabra de Dios.

VII. Pongamos el hacha en la raíz.

¿Qué es lo que debemos hacer? preguntaba la gente que salía a Juan el Bautista (Luc. 3, 10). ¿Qué exige de nosotros la situación religiosa de nuestro tiempo y país? “La segur”, responde el Bautista, “está ya puesta en la raíz de los árboles. Así que todo árbol que no da buen fruto, será cortado y arrojado al fuego.” (Luc. 3, 9). Hoy también la gente va a buscar “la salud de Dios.” (Luc. 3, 6). El gran predicador del Jordán necesita sucesores que sin cesar proclamen lo que “la voz en el desierto” proclamaba: “Preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas.” (Luc. 3, 4). Voz en el desierto son todos aquellos que tratan de difundir la palabra de Dios transmitida en la Sagrada Escritura.
Dios, quien es el inspirador de toda actividad fecunda, conduzca nuestros pasos, a fin de que de la lectura cotidiana del Evangelio nazcan siempre más beneficios para nuestra alma y para la patria; y que así vaya a cumplirse el dicho del apóstol: Toda escritura inspirada de Dios es propia para enseñar, para convencer, para corre­gir, para dirigir en justicia, para que el hombre de Dios sea perfecto, y esté apercibido para toda obra buena. (II. Tim. 3, 16-17).


Mons. Dr. Juan StraubingerProfesor de Sagrada Escritura. Tomado de “El Nuevo Testamento de Nuestro Señor Jesucristo”, Editorial Guadalupe, Bs. As., 1942. Visto en Syllabus, 26-Mar-2014.

domingo, 22 de enero de 2023

¡ÉXITO DE ABASCAL EN CIBELES CONTRA SÁNCHEZ, FEIJÓO NO ACUDE Y VOX ES CLARO: ¡HAY QUE ECHAR AL PSOE!



12:34 MINUTOS


Bienvenidos a RoberSR!!! 

Nuevo vídeo en el canal comentando los aspectos más destacados de la manifestación realizada ayer en Cibeles contra Pedro Sánchez.

Las declaraciones de Santiago Abascal (único líder nacional que estuvo), la ausencia de Feijóo

No sólo hay que expulsar al PSOE de la Moncloa sino también todas las políticas socialistas que al PP le encanta aplicar.

Todo esto y mucho más en el vídeo de hoy!!!

Se publica el libro que Benedicto XVI quiso póstumo: su teología, a modo de testamento espiritual



El viernes, 20 de enero de 2023, se pone a la venta en Italia el libro que recoge los escritos de Benedicto XVI posteriores a su renuncia al pontificado. Se titula Qué es el cristianismo (Mondadori) y el subtítulo lo presenta como Casi un testamento espiritual.

Póstuma por decisión propia

Es una obra póstuma por decisión del propio Joseph Ratzinger. Quizá no habría sido así de no mediar la polémica por su obra con el cardenal Robert Sarah Desde lo más hondo de nuestros corazones, sobre el sacerdocio católico, pero tras esa grave crisis en las relaciones con su sucesor, el Papa emérito decidió que no publicaría nada más hasta su muerte.

Llamó entonces a Elio Guerriero, su biógrafo italiano, a quien había confiado la preparación del volumen, y se lo dijo con total claridad: "Por mi parte, en lo que me quede de vida, ya no quiero publicar nada. La furia de los círculos contrarios a mí en Alemania es tan fuerte, que la aparición de cualquier palabra mía provoca enseguida por su parte un vocerío asesino. Quiero ahorrarme eso a mí mismo y a la cristiandad".

Son las palabras que Guerriero cita entrecomilladas en la presentación del libro, y evocan la reacción que suscitó aquel libro con Sarah, no solo por la cuestión de su autoría (que implicaba Benedicto en una advertencia contra la posible autorización de la ordenación de hombres casados pretextando el sínodo para la Amazonia), sino por la propia teología del sacerdocio expuesta en sus páginas, y rechazada por el ultraprogresista establishment eclesiástico germano.


El origen de Qué es el cristianismo (cuyo título evoca, como colofón a una vida, la Introducción al cristianismo de Joseph Razinger, una de sus primeras obras y la más célebre hasta el Informe sobre la fe con Vittorio Messori) es una idea del propio Guerriero, animado por el éxito en 2019 de Judíos y cristianos, los diálogos del Papa emérito con el rabino Arie Folger.

Elio, quien había publicado en 2016 la biografía Servidor de Dios y de la humanidad, le propuso entonces recoger todos sus escritos desde la renuncia al pontificado. Benedicto le dijo que lo pensaría, pero empezó a recopilar y trabajar sobre el material.

Tras el affaire del libro con Sarah, llegó la respuesta: aceptaba la idea, pero "ponía una condición tajante: la obra debía publicarse después de su muerte".

"Contento del resultado"

El 28 de junio de 2021, Guerriero visitó a Ratzinger y le encontró "contento del resultado" del escrito más valioso para él incluido en esta recopilación, el que se refiere al sacerdocio, respecto al cual el propio Benedicto dice ha sido "reelaborado" respecto al que "se publicó inicialmente en el volumen del cardenal Sarah", dándole "un nuevo centro de gravedad".

Cree que tras el decreto Presbyterorum ordinis del Concilio Vaticano II sobre el sacerdocio había quedado flotando "una omisión esencial causada por la exégesis bíblica moderna" en torno al ministerio pastoral: "He podido demostrar que el presbítero neotestamentario es un sacerdos, aunque en un sentido nuevo definido en la Cruz por el sumo sacerdote Jesucristo".

Joseph Ratzinger en estado puro

En los más de ocho años que ha vivido en el monasterio Mater Ecclesiae, Benedicto XVI escribió estos trabajos en alemán, pero quiso que la edición de referencia fuese la italiana, en traducción del propio Guerriero.

Qué es el cristianismo incluye textos ya publicados, otros reelaborados y algún inédito.

El propio Ratzinger los presenta:

-su intervención del 21 de octubre de 2014 en la inauguración del aula magna de la pontificia universidad Urbaniana;

-un texto "para aclarar el concepto de las religiones con las que la fe cristiana quiere dialogar";

-un capítulo sobre "la naturaleza y el devenir del monoteísmo", un texto "sobre el método del diálogo cristiano-islámico" y el agradecimiento por el doctorado honoris causa de la pontificia universidad de Cracovia; también el prólogo que escribió para la edición en lengua rusa del volumen de sus obras completas sobre la teología de la liturgia.

-en el tercer capítulo recoge el texto escrito sobre las relaciones judeo-cristianas y su intercambio epistolar con Arie Folger en septiembre y octubre de 2018, tan bien recibido en medios hebraicos (hubo tres rabinos en su presentación) como molesto para los adversarios alemanes de Ratzinger: "Las acusaciones sobre presuntas posiciones antijudías en mi pensamiento las rechacé terminantemente en su día", añade.

-el cuarto capítulo recoge una entrevista con el padre Daniele Libanori en la que aborda la cuestión de si Jesucristo debía morir para restaurar el orden del ser, trastocado por el pecado: "La respuesta clásica", explica Ratzinger, "fue elaborada por San Anselmo de Canterbury y hoy es para nosotros casi incomprensible": "En la entrevista he intentado mostrar cómo podemos hoy comprender racionalmente el motivo del sufrimiento y de la muerte de Jesucristo".

-Luego vienen dos textos, uno sobre el sacerdocio, antes citado, y otro sobre la Eucaristía, donde afronta el debate sobre la intercomunión (comunión de protestantes en misas católicas), "que periódicamente se replantea con fuerza en Alemania". Estudiar esto le ha permitido "una mirada más profunda" sobre la Presencia Real y una "nueva definición" de lo que significa comer y beber el Cuerpo y la Sangre de Cristo.

-el siguiente capítulo trata "cuestiones morales" y "una contribución fundamenta sobre la cuestión de la Iglesia y del escándalo de los abusos sexuales".

-y un último capítulo sobre cuestiones históricas, como su texto por los cincuenta años de la Comisión Teológica Internacional (en el que hizo importantes revelaciones sobre su funcionamiento), un recuerdo a Juan Pablo II en el centenario de su nacimiento, unas palabras con motivo del 75º aniversario de la muerte del padre Alfred Delp (condenado a muerte por los nazis) y una entrevista sobre San José.

La sabiduría de San José, más que la propia

Sobre él dice Benedicto: "Cuanto más envejezco, con mayor claridad veo la figura de mi patrono. De él no nos ha llegado ninguna palabra, pero sí su capacidad para escuchar y actuar. Cada vez comprendo mejor que precisamente es su silencio el que nos habla y, más allá del conocimiento científico, quiere conducirme a la sabiduría".

Conocedor de la "competencia teológica" de Guerriero, Ratzinger le confía "esta mi última obra", que, según su editor y traductor es "casi un testamento espiritual dictado por la sabiduría de su espíritu y por su corazón de padre, siempre atento a las expectativas y a las esperanzas de los fieles y de todos los hombres".

Odio asesino contra Benedicto | Actualidad Comentada | 20-1-2023 | Pbro. Santiago Martín FM



11:23 minutos

“Sí, soy un fundamentalista”, dice el cardenal Burke

ADELANTE LA FE


“Estoy abierto al mundo, pero insisto en las cosas fundamentales. Como la Eucaristía”. “La Iglesia debe ser clara sobre la identidad”, dice al Foglio el canonista

El cardenal Raymond Leo Burke, hoy capellán de la Soberana Orden Militar de Malta, fue prefecto del Tribunal Supremo de la Signatura apostólica del 2008 al 2014. Esto tuvo lugar el 2 de abril de 2016
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Si por fundamentalista se entiende alguno que insiste en las cosas fundamentales, soy un fundamentalista. Como sacerdote, no enseño ni actúo para mí mismo. Pertenezco a Cristo. Actúo en su persona, enseño solo lo que Él enseña en la Iglesia, porque esta enseñanza salvará las almas. 

El cardenal Raymond Leo Burke, canonista y desde hace casi un año capellán de la Soberana Orden Militar de Malta, responde así a la pregunta de el Foglio si su notable y repetida oposición a cada cambio de la praxis pastoral en discusión durante estas semanas en el sínodo sea tachada de fundamentalismo. 

Burke dice que hay que olvidar las etiquetas, cuyo uso “es un modo para descartar a una persona y para no considerar la verdad de lo que enseña o hace. Yo soy católico romano, espero siempre serlo, y, al final de mi vida terrena, morir en los brazos de la Iglesia”. 

(...) De la Eucaristía se discute y se debate ardientemente, en libros y diarios y asambleas episcopales. Darla o no darla a los divorciados vueltos a casar es el dilema sobre el cual se desarrolla el confrontamiento sinodal, con los bandos opuestos empeñados en individualizar un compromiso capaz de evitar sucesivas laceraciones. 

Walter Kasper, teólogo y cardenal alemán al que el pontífice asignó el honor de sostener la relación consistorial sobre la familia, en febrero de 2014, ha confirmado recientemente que no se puede negar la comunión a los divorciados vueltos a casar, desde el momento en que la Eucaristía “es siempre para los pecadores”.

Burke tiene las ideas claras: “la proposición del cardenal Walter Kasper no es conciliable con la doctrina de la Iglesia sobre la santa comunión y sobre la indisolubilidad del matrimonio. Ciertamente, el Santísimo Sacramento es para los pecadores – que somos todos nosotros- pero para pecadores arrepentidos. La persona que vive en unión irregular es relacionada a otro matrimonio, y por eso vive públicamente en estado de adulterio, según la clara enseñanza del Señor en el evangelio. Hasta que la persona en unión irregular, o sea, en un contexto contrario a la verdad de Cristo sobre el matrimonio, no corrija la propia situación, no puede disponerse a recibir los sacramentos, porque no ha manifestado el arrepentimiento necesario para la reconciliación con Dios”

Y aunque se discute, y no son pocos los que quisieran abrirse a tal posibilidad, también en el nombre de la divina misericordia que no deja atrás a ninguno. Dice Burke: “Si la Iglesia permitiera la recepción de los sacramentos (al menos en un solo caso) a una persona que se encuentra en unión irregular, significaría que o el matrimonio es indisoluble y así la persona no está viviendo en un estado de adulterio, o que la santa comunión no es comunión en el cuerpo y sangre de Cristo, que en cambio necesita la recta disposición de la persona, o sea, el arrepentimiento de grave pecado y el sólido propósito de no volver a pecar”.

“Tristemente –agrega el purpurado- toda la discusión que ha seguido la presentación de la tesis del cardenal Kasper, sea antes o después de la asamblea del sínodo de los obispos en octubre de 2014, creó una gran confusión entre muchos fieles. Muchos sacerdotes y obispos me dicen que tantas personas que viven en unión irregular están convencidas que la Iglesia ha cambiado su enseñanza y por eso pueden recibir los sacramentos. En una gran ciudad que visité el pasado mayo, sobre el portón de una iglesia parroquial había un aviso en el que se advertía que en esa iglesia los divorciados vueltos a casar accederían a los sacramentos. En ciertos países, parece que diversos obispos hayan simplemente tomado la decisión de administrar los sacramentos a cuantos se encuentran en unión irregular”. Raymond Burke ve confusión: “no hay duda que la confusión sea ya grande, y que la Iglesia, para el bien de las almas y para su fiel testimonio a Cristo en el mundo debe afirmar claramente su perenne enseñanza sobre la indisolubilidad del matrimonio y sobre la santa comunión”.

(...). Quizá el riesgo de hoy es de degradar el sentido, casi haciendo aparecer la comunión una rutina o menos: “No hay duda que por varios motivos, el supremo bien con el que el Señor ha dotado su cuerpo místico, la Iglesia, es decir, el sacramento de la Eucaristía, dé mucho para que en la Iglesia no sea visto en su tremenda realidad. Cuando uno considera la verdad enunciada de santo Tomas de Aquino, según el cual la Eucaristía contiene todo el bien de nuestra salvación, es difícil comprender cómo tantos se ausentan de la misa dominical y tantos no retienen que la sagrada hostia sea el verdadero cuerpo de Cristo”.

Pero también hay otras cosas, por ejemplo, la difícil comprensión por el “modo de ofrecer la santa misa centrado en el sacerdote y la congregación, y no en la presencia real de Cristo, sentado a la derecha del Padre celeste, que baja al altar para hacer presente su sacrificio, para ofrecernos de nuevo el don de sí mismo, como lo hizo por primera vez en la última cena, anticipando su Pasión y muerte para nuestra salvación. 

Si uno cree verdaderamente en el sacramento de la Eucaristía, no renunciará a presenciar la asamblea eucarística y querrá demostrar en modos concretos de fe a través de la dignidad de la celebración de la santa misa y las devociones eucarísticas, la exposición del Santísimo con la bendición, las procesiones eucarísticas, las visitas al Santísimo Sacramento, actos de comunión espiritual durante el día, etc.”. 

(...) “En mi opinión dice el cardenal Burke – la principal causa de la pérdida de fe eucarística y de todas las ofensas ofrecidas al Señor en su presencia real en el Santísimo Sacramento es una catequesis vacua y hasta casi errónea que han abajado la Iglesia en los Estados Unidos por lo menos en los últimos 40 años. 

(...) El hecho –agrega el purpurado americano- “que algunos, y quizá muchos, padres no enseñaran en casa la verdad sobre la Eucaristía y no fueran regularmente a la misa dominical, agravó más la ignorancia de la fe eucarística. En los Estados Unidos se dice con cierta frecuencia que más del 50 por ciento de los católicos no cree más en la presencia real. Sin embargo, esto es el corazón de la fe católica. Quien ya no cree en la presencia real ya no es católico. La situación es grave y no puede ser corregida sino por una catequesis completa y repetida –a lo largo de los años de infancia y juventud, y también para los adultos con la homilía dominical- sobre la riqueza de la doctrina de la Eucaristía, sobre el modo de celebrar la santa misa que evidencia la acción de Cristo a través de la persona del sacerdote que guía los fieles en el sacrificio eucarístico. Una catequesis necesaria también en referencia a la devoción eucarística que fue desarrollada en modo extraordinario a lo largo de los siglos cristianos, como el papa Benedicto XVI subraya en la exhortación postsinodal Sacramentum Caritatis”.

(...) Cristo, cuando encontró a la samaritana en el pozo de Jacob, sí fue acogedor, pero le habló claramente de su grave desorden por sus tantos matrimonios y de los requisitos inherentes al culto de Dios ‘en espíritu y verdad’”. 

(...) Cristo dejó claro que no vino al mundo para cambiar la realidad matrimonial como Dios Padre la constituyó al inicio del mundo, sino para restituirla a su verdad, belleza y bondad original. Por su Pasión, Muerte, Resurrección y Asunción, Cristo elevó el sacramento natural, la participación al amor divino, al sacramento sobrenatural, concediendo a los esposos la gracia de vivir fielmente, hasta el final, la verdad de su estado matrimonial”. 

En cuanto a las críticas que le vienen a diario, de ser indisponible a la apertura hacia la realidad concreta que trasciende la abstracta doctrina, Raymond Burke sonríe: “estoy totalmente abierto al mundo y estoy lleno de compasión para la situación de nuestro mundo, que está confundido y en error sobre las verdades más fundamentales: la inviolabilidad de la vida humana, la integridad del matrimonio y su fruto incomparable, la familia, y la libertad religiosa como expresión de la relación insustituible del hombre con Dios. Por este motivo, voy al encuentro del mundo con la verdadera compasión que ofrece al mundo la verdad en la caridad. He descubierto, durante los cuarenta años de mi sacerdocio, que lo que el hombre (también el secular) espera de un sacerdote es Cristo, su verdad, su amor. Un sacerdote que –frente a la situación de la cultura actual- no anuncia con claridad la verdad, no practica la caridad pastoral y falta al testimonio inherente a su oficio”.

[Traducción H.A. Artículo original]