BIENVENIDO A ESTE BLOG, QUIENQUIERA QUE SEAS



Mostrando entradas con la etiqueta Vacuna Covid-19. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Vacuna Covid-19. Mostrar todas las entradas

sábado, 10 de septiembre de 2022

Emergencia sanitaria mundial: Manifiesto por la epidemia de enfermedades y muertes debido a las «vacunas» antiCovid



Les anunciamos en rigurosa exclusiva que HOY, Sábado 10 de Septiembre de 2022 a las 20,00 en Ecocentro, c/ Esquilache, 4 de Madrid, se va a dar lectura, al igual que en otros 36 países de Europa y América, así como en Rusia, Israel, India y Sudáfrica, del manifiesto elaborado por un nutrido e importante grupo de científicos y médicos de todo el mundo mediante el cual, ante la criminal opacidad de los gobiernos, se quiere alertar a la población mundial de la existencia de una situación de emergencia sanitaria debido al aumento injustificado de muertes y enfermedades graves, y no tan graves, cuya causa sólo pueden ser las «vacunas» antiCovid inoculadas masivamente.


A continuación les transcribimos el manifiesto que se leerá, tras de lo cual podrán los asistentes hacer las preguntas que deseen. Al final de este artículo lo pueden descargar en PDF.

DECLARACIÓN DE EMERGENCIA MUNDIAL POR ENFERMEDADES Y MUERTES ASOCIADAS A LAS “VACUNAS COVID-19”

Nosotros, médicos y científicos de todo el mundo, declaramos una Emergencia Mundial por Enfermedades y Muertes asociadas con los productos que se están utilizando como “vacunas COVID-19”.

Actualmente estamos presenciando un exceso de mortalidad en los países donde ha sido inoculada la mayoría de la población. Este exceso de mortalidad no ha sido explicado por las instituciones sanitarias, y a la fecha ha sido insuficientemente investigado.

El elevado número de muertes súbitas en personas sanas, jóvenes y previamente inoculadas con los productos conocidos como “vacunas COVID-19”, es especialmente preocupante.

En los sistemas oficiales de monitoreo de eventos posiblemente atribuibles a la vacunación de diferentes países, la Comunidad Europea y la OMS se han registrado números altos de muertes que se asocian en temporalidad a la recepción de los productos conocidos como “vacunas COVID-19”, además de diversas discapacidades y efectos graves que han requerido hospitalización y que han provocado incapacidades permanentes. Estos datos no tienen precedente en la historia de la vacunación.

Tan solo utilizando los datos del Centro de Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos ([i]), el sistema de Tarjeta Amarilla del Reino Unido ([ii]), el sistema de monitoreo de eventos adversos de Australia ([iii]) y Eudra Vigilance ([iv]) en Europa, así como el sistema Vigiaccess de la OMS ([v]) se han registrado, hasta la actualidad, más de 11 millones de reportes adversos y más de 70,000 muertes asociadas en temporalidad a la recepción de los productos conocidos como “vacunas COVID-19”.

Consideramos, por tanto, que estamos ante una emergencia sanitaria, que debe ser gestionada como tal por parte de todos los estados, las instituciones sanitarias y el personal médico de todo el mundo.

Las medidas a tomar, de forma urgente, son:

1. Paralización mundial de las campañas de inoculación con los productos conocidos como “vacunas COVID-19” y suspensión de cualquier acto relacionado con la promoción de las mismas.

2. Investigación de todas las muertes súbitas ocurridas a personas previamente sanas, inoculadas con los productos conocidos como “vacunas COVID-19” y de cualquier muerte sospechosa de haber sido directa o indirectamente provocada por el producto conocidos como “vacuna COVID-19”, mediante la realización de autopsias completas.

3. Implementación de programas de detección temprana de eventos cardiovasculares, susceptibles de causar muertes súbitas, con analítica de Dímeros-D y Troponina en todas las personas inoculadas con los productos conocidos como “vacunas COVID-19”.

4. Implementación de programas de estudio, investigación y tratamiento de víctimas de efectos secundarios de las “vacunas Covid-19”.

5. Realización de análisis de viales de Pfizer, Moderna, Astra Zeneca, Janssen, Cansino, Coronavac, Sinovac, Sputnik V y cualquier otro producto conocido como “vacuna COVID-19” que se están aplicando, por centros de investigación independientes y no financiados por ninguna farmacéutica, así como la divulgación completa, detallada y libre de conflictos de interés, al público en general.

6. Realización de estudios sobre las interacciones entre los diversos componentes de los productos conocidos como “vacunas COVID-19” y su efecto molecular, celular y a nivel organismo.

7. Implementación activa de programas de indemnización a toda persona víctima de enfermedad, que le imposibilite trabajar o que le haya provocado cualquier discapacidad como consecuencia de haber sido inoculado con algún producto conocido como “vacuna COVID-19”.

8. Implementación activa de programas de indemnización a los familiares de cualquier persona que haya fallecido a consecuencia de haber sido inoculado con algún producto conocido como “vacuna COVID-19”.

En consecuencia, QUEDA DECLARADA UNA EMERGENCIA MUNDIAL POR ENFERMEDADES Y MUERTES ASOCIADAS CON “VACUNAS COVID-19”. 

Dada la declaración, exigimos a las agencias reguladoras de medicamentos e instituciones sanitarias de cada país, junto con organismos internacionales como la OMS, OPS, EMA, FDA, UK MHRA, TGA y NIHS que den respuesta a esta declaración y cumplan con las ocho medidas aquí señaladas.

10 Septiembre 2022

Para descargar el manifiesto en PDF: AQUÍ

jueves, 9 de diciembre de 2021

Razones por las que desaconsejo la “vacunación” obligatoria


UN ARTÍCULO QUE HAY QUE LEER SI QUEREMOS DESPERTAR


Antes de empezar a exponer mis razones por las que desaconsejo la vacunación obligatoria diré que, a pesar de que no soy médico ni biólogo ni experto en ningún tema sanitario, creo que tengo la suficiente formación intelectual en otros campos, como para poder diferenciar entre lo que es lógico y lo que no lo es. Por esta razón no entraré en ningún argumento científico de orden sanitario, para no caer en la red de aquel médico cuya carta tuve ocasión de leer y que nos catalogaba a todos los que opinábamos de este tema sin pertenecer al ámbito sanitario de IMBÉCILES; pero sí en un análisis lógico de la realidad en la que estamos inmersos porque creo que cualquier persona formada tiene derecho a hacerlo. También quisiera decir que no niego la existencia del virus aunque, como afirma el premio nobel Montagnier, creo que ha sido creado a partir de otro ya existente manipulado artificialmente.


EXPOSICIÓN DE RAZONES

- No hay debate público, abierto y plural en los medios de comunicación de masas sobre la necesidad o no de someterse a este tratamiento. Sencillamente se han acatado, por parte de prácticamente todos los dirigentes políticos del mundo, las decisiones de un organismo, la OMS, cuando menos muy controvertido, dirigido por una persona de pasado oscuro en Etiopía, al que financia el partido comunista chino y las grandes farmacéuticas (BIG PHARMA), y que constantemente ha incurrido en decisiones contradictorias a lo largo de estos últimos ya casi 2 años de “PLANDEMIA”. Sencillamente, a los que no comulgamos con la verdad oficial se nos tacha de “negacionistas” cuando en realidad los negacionistas son aquellos que niegan cualquier debate sobre la verdad.

- Poco antes de la organización de todo este circo mediático se cambiaron los requisitos, por parte de la OMS, para calificar una epidemia como pandemia. Lo que toda la vida había sido una condición “sine qua non” para declarar pandemia, que no era ni más ni menos que el % de incidencia en la población, ahora se ha cambiado, cómo no, por la globalización de la enfermedad. Es decir, basta con que aparezca en varios sitios del mundo a la vez, (lo que es muy fácil hoy día de provocar) aunque sea con un % de incidencia muy bajo, para declararlo pandemia. Desde luego lo que no se puede negar es que con este nuevo concepto de pandemia es más fácil extender EL MIEDO Y EL PÁNICO en la población y mantenerla sumisa a una serie de medidas que incluso quiebren sus derechos básicos más inalienables.

- Nadie, ni farmacéuticas, ni gobiernos, ni personal sanitario alguno, ni siquiera las aseguradoras se hacen responsables de los efectos secundarios de este tratamiento a corto, medio y largo plazo. Para muestra vale un botón: invito a cualquiera que no se haya vacunado, o que lleve una dosis y quiera inocularse la segunda o la tercera o las que en lo sucesivo vendrán, a que solicite a su médico o personal sanitario o entidad sanitaria pertinente, que le prescriba con receta el tratamiento; eso sí, con firma, sello y número de colegiado y que exija el consentimiento informado, es decir, que le informen de la composición exacta de lo que le van a inocular y las posibles reacciones adversas. Verán que sorpresa se llevan. Nadie firmará. Qué raro, ¿no?.

- Una vacuna, por definición, proporciona inmunidad contra una enfermedad. Este tratamiento, ya está aceptado incluso por el establisment médico/farmacéutico, que no inmuniza contra nada y ya están hablando de sucesivas dosis. No quiero convertirme en cobaya de un tratamiento experimental que no protege de forma efectiva y permanente contra nada y no quiero tomar un tratamiento médico de por vida contra un virus que estas inyecciones ni siquiera previenen.

- No confío en la demonización brutal y sistemática que se ha hecho por parte de los gobiernos y los medios de comunicación de masas de los tratamientos alternativos a esta “vacuna” como son, la ivermectina y el dióxido de cloro, ya comprobada su eficacia al 100% contra este virus en varios países sudamericanos cuya incidencia ya roza el cero y las recuperaciones el 100% . Pero de esto no sabemos nada por los medios de comunicación de masas en España, todos bien untados por el gobierno.

- El establisment médico/farmacéutico no sabe los efectos a corto, medio y largo plazo. Entonces, por qué tanta prisa en inocular a la población con un tratamiento que ya ha provocado decenas de miles de efectos secundarios graves y la muerte a miles de personas. Sabemos que Bill Gates es uno de los magnates más importantes de la industria farmacéutica y todos conocemos sus declaraciones sobre la sobrepoblación del mundo y su drástico remedio. No les creo.

- ¿Debo arriesgar mi vida con un tratamiento del que nada se sabe de los riesgos futuros que puedo correr cuando ellos, los ejecutivos de las grandes farmacéuticas, se sabe que no se han vacunado alegando que “se sacrifican generosamente para que la vacuna llegue a más personas”. Puesto que no soy idiota, no confío en ellos ya que no arriesgan nada.

- A propósito del debate que debiera surgir pero que no lo consienten ni los gobiernos ni los medios de comunicación bien untados por ellos, han surgido por todo el mundo distintos grupos de “profesionales por la verdad”; “médicos por la verdad”, “abogados por la verdad”, …etc , con el único fin de esclarecer la verdad de todo este circo mediático mediante un debate público en los medios. En vez de facilitarlo, lo que han hecho los medios es demonizar a estos colectivos, insultarlos, estigmatizarlos, y postergarlos en sus respectivos trabajos, muchos han perdido su empleo por esta causa, encasillarlos con el adjetivo de “negacionistas”, llamarles asesinos, egoístas, irresponsables, que debieran ser confinados y demás lindezas para provocar su muerte profesional. Pero al campo, al fin y a la postre, no se le pueden poner puertas y la verdad al fin resplandecerá tarde o temprano. Me fío mucho más de estos colectivos que son capaces de arriesgarlo todo, su profesión, su vida, sus familias, su prestigio por el resplandecimiento de la verdad, que no de estos magnates de las farmacéuticas que ya tienen un largo historial de multas por prácticas amorales y catástrofes provocadas por sus tratamientos milagro en muchas partes del mundo, sobre todo en África y Asia. Para muestra un botón: PFIZER ha sido multada con más de 6.000 millones de dólares durante los últimos 30 o 40 años, no recuerdo bien ahora, por este tipo de prácticas a las que me he referido antes.

- Otra cuestión importante, generalmente aceptada por el público, es la ausencia de autopsias en las muertes para distinguir quienes han muerto con COVID o por COVID. ¿por qué se prohibieron las autopsias?.¿Tal vez porque se habría descubierto que muchas de las muertes se habrían producido no por COVID sino con COVID por patologías previas?. No lo sabremos. Lo cierto es que un tanto por ciento altísimo de personas fallecidas eran personas de más de 75 años con patologías previas muchos de ellos abandonados en sus residencias de ancianos.

- Otro tema sin aclarar es el de las famosas PCR de las que el propio descubridor Kary Mullis, ya fallecido, ha comentado en repetidas ocasiones su inutilidad para detectar cualquier tipo de virus, y que convenientemente manipuladas en cuanto a los ciclos por segundo a las que se realicen pueden dar positivos a todas luces falsos. Es decir es una herramienta que convenientemente manipulada sirve para aumentar o disminuir la incidencia de la enfermedad según convenga para una buena dosificación de miedo y pánico en la sociedad. ¿Hasta cuándo va a guardar silencio el gremio sanitario?

- Se están ignorando los efectos secundarios de estos tratamientos cuando se sabe ya que los producen y en cantidades significativas, pero como no se cuentan en los medios de comunicación o cuando se hace no se atribuyen a la inoculación del tratamiento, el resultado es que al contarse sólo algunos de forma aislada e intermitente y sin causalidad, la población no los correlaciona con la inoculación de la “vacuna”. Como dato significativo diré que en este último año y medio transcurrido se han producido muertes por síncopes, problemas de miocarditis, infartos y otros motivos médicos entre deportistas de élite sin patologías previas aparentes, con una incidencia del 150% más que lo producido habitualmente. Es decir, si en un año normal, por ejemplo, morían en todo el mundo 20 deportistas de élite, en este último periodo “plandémico” se han producido 50 casos de desvanecimiento, en algunos casos con resultado de muerte, sin que sepamos por qué pero al parecer todos estaban ya vacunados.

- Por último, aunque tengo bastantes más razones para desaconsejar la “vacunación”, diré que jamás en mi vida, y tengo casi 70 años, vi semejante campaña de marketing pro-vacunación. Ha sido bestial el bombardeo a los cerebros de las personas a través de los medios de comunicación que sistemáticamente han abierto todos los días sus informativos con más de un cuarto de hora acojonando, permítaseme la expresión, al personal para después poner la “vacuna” como remedio infalible para inmunizarse aunque el paso del tiempo ha demostrado la gran falacia, ya que la “vacuna” ni inmuniza ni protege del contagio y ya se habla de tercera dosis, con la que ya se han inoculado al parecer más de 4 millones de personas en España, y de dosis posteriores semestrales de recuerdo. 

O sea, dependencia total y absoluta de por vida de las farmacéuticas y GRAN NEGOCIO ASEGURADO PARA ELLAS, SUS VOCEROS POLÍTICOS Y LOS MEDIOS.

Sebastián Bel Bravo 

martes, 19 de octubre de 2021

El cardenal ‘negacionista’ Raymond Burke, totalmente recuperado del covid (Carlos Esteban)



El Papa se refirió a él irónicamente como “un negacionista que, pobre, estuvo ingresado con el virus”, pero el “negacionista” de la anécdota papal, el cardenal norteamericano Raymond Burke, está casi totalmente recuperado y celebra ya la Santa Misa.

El ingreso del cardenal Burke, uno de los dos firmantes supervivientes de los Dubia sobre Amoris Laetitia que Francisco aún no ha respondido, causó un considerable revuelo al ser ingresado por infección de coronavirus en un hospital. Debido a su avanzada edad y al hecho de que se le sometió a un respirador -un procedimiento muy agresivo con una altísima tasa de mortalidad- se temió por su vida, algo que, a juzgar por sus comentarios, no acababa de desagradar a algunos de los más agresivos ‘renovadores’.

Incluso los más sinceramente benévolos usaron su caso como ejemplo de lo que les pasa a los que ponen reparos morales al uso de las vacunas, apoyándose en el hecho de que se usaron tejidos fetales para probarlas.

Pero ahora, si todo lo que se ha sabido hasta ahora de inmunología sirve para algo, Su Eminencia está ya más que inmunizado gracias a haber superado la infección, algo que no pueden decir todos los inoculados.

El cardenal ha anunciado su recuperación desde su cuenta de Facebook, donde también informa que ya celebra diariamente la Santa Misa.

Carlos Esteban

jueves, 14 de octubre de 2021

Encontramos un obispo católico!: Arzobispo castrense de EEUU dice claramente que “no se puede obligar a nadie a recibir una vacuna COVID-19 si ello viola la santidad de su conciencia”


l

Ocasiones como ésta son las que avivan la esperanza: la Iglesia no solamente está compuesta por clericalistas obispos serviles, doblegados, arrodillados, conniventes, complacientes con la dictadura sanitaria, como muy probablemente y desgraciadamente le haya tocado a usted; también hay excepciones, como es este caso. Se trata del Arzobispo castrense de EEUU, Mons. Timothy Broglio (no confundir con Bergoglio), quien emitió ayer una declaración en la cual afirma claramente, “no se puede obligar a nadie a recibir una vacuna COVID-19 si ello viola la santidad de su conciencia”.

Esta es una información de Gaudium Press, Oct-13-2021.


Mons. Broglio: No se puede obligar a vacunarse a quien manifieste serios problemas de conciencia. El Arzobispo Castrense americano habló sobre el respeto a la conciencia de quienes hallan moralmente inaceptable algunas vacunas anti Covid

-------

Redacción (13/10/2021 08:55, Gaudium Press) Después de manifestar que – siguiendo las directrices de la Congregación de la doctrina de la Fe vaticana y las de la Conferencia de Obispos Católicos de los EE.UU. – él ya declaró que era moralmente permitido recibir las vacunas disponibles contra el Covid 19, ahora Mons. Timothy Broglio, el Arzobispo castrense americano, analiza en comunicado circunstancias planteadas por la orden de vacunación obligatoria contra el coronavirus decretada a todos los militares en servicio por el gobierno.

Desde que fue decretada esa vacunación obligatoria, “algunos miembros del servicio se han negado a recibir la vacuna y han solicitado un acuerdo [accommodation] a través de la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa [Religious Freedom Restoration Act]”.
“Esta circunstancia plantea la cuestión de si la permisibilidad moral de la vacuna impide que una persona forme una creencia religiosa sincera [en el sentido] de que recibir la vacuna violaría su conciencia. No es así”, expresa Mons. Broglio.
Recuerda el Arzobispo la constatación de que “las vacunas Pfizer y Moderna contra el Covid 19 fueron testadas usando un línea celular derivada del aborto”, algo que ha sido considerado tradicionalmente como “una cooperación material remota con el mal”, que “nunca es pecaminosa”.

En sentido diverso, la “vacuna de Johnson & Johnson fue desarrollada, testada, y es producida, con líneas celulares derivadas del aborto. Esa vacuna es por tanto, más problemática. Si fuera la única vacuna disponible, sería moralmente permisible, pero el católico fiel debe hacer conocer su preferencia por un tratamiento más aceptable moralmente”.

La conciencia sigue siendo un santuario

No obstante, y a pesar de la permisibilidad de aplicación de todas las vacunas a pesar de su relación con líneas celulares de niños abortados, “la Iglesia atesora su enseñanza sobre la santidad de la conciencia. ‘La conciencia es el más secreto núcleo y santuario del hombre. Allí esta solo con Dios, cuya voz resuena en sus profundidades’ ”, dice el Arzobispo castrense citando a Pablo VI.

Y continúa repitiendo al Papa Montini, quien así habla en Dignitatis Humanae:

“En toda su actividad, un hombre está obligado a seguir su conciencia para que pueda venir a Dios, fin y propósito de la vida. De ello se deduce que no se le debe obligar a actuar de manera contraria a su conciencia. Tampoco, por otro lado, debe ser restringido de actuar de acuerdo con su conciencia, especialmente en materia religiosa”.

Teniendo estos principios en vista, Mons. Broglio sentencia que “nadie debería ser obligado a recibir una vacuna COVID-19 si esto violase la santidad de su conciencia”, afirmación que también sustenta en doctrina pontificia presente en Dignitates Humanae, cuando Pablo VI dice que los individuos poseen el “derecho civil a no verse obstaculizados en la conducción de sus vidas de acuerdo a sus conciencias”.

Incluso, expresa el Arzobispo, “si la decisión de un individuo parece errónea o inconsistente a los demás, la conciencia no pierde su dignidad. Esta creencia permea la teología moral católica así como la jurisprudencia de la Primera Enmienda” americana, que protege derechos a la libertad de religión y de expresión en los EE.UU.
“Negar acuerdos religiosos, o tomar acciones personales punitivas o adversas contra aquellos que plantean objeciones serias y basadas en la conciencia, sería contrario a la ley federal y moralmente represensible”, afirma oponiéndose de esta manera a la vacunación compulsoria de quienes plantean auténticos problemas de conciencia por la relación de las vacunas con líneas celulares de niños abortados.
“Aquellos que rechacen la vacuna COVID-19 deben continuar actuando en caridad hacia sus vecinos y por el bien común mediante la adopción de medidas para mitigar la propagación de COVID-19 a través del uso de cubiertas faciales, distanciamiento social, someterse a pruebas de rutina, cuarentenas y permanecer abiertos a recibir un tratamiento en caso de que esté disponible uno que no se deriva ni se prueba con líneas celulares derivadas del aborto”, concluye.

miércoles, 10 de marzo de 2021

Entrevista concedida por monseñor Carlo Maria Viganò al Deutsche Wirtschaftsnachrichten



NOTA: Esta entrevista ha salido ya en este blog, tomada de Eclesia e Post Concilio, pero la traducción fue del traductor Google, con algunas modificaciones personales para que se entendiera bien. Como la traducción de Adelante la Fe está realizada por una persona experta en traducción, traigo aquí nuevamente dicha entrevista, pero ahora con procedencia diferente.

DW: Excelencia, ¿cómo vive en lo personal la crisis del coronavirus?

Monseñor Viganò: Es posible que mi edad, mi condición de arzobispo y mi habitual vida retirada no sean representativas de lo que debe de estar sufriendo la mayoría de la gente; con todo, desde hace un año me veo imposibilitado de desplazarme y de visitar a personas que necesitan una palabra de aliento. En el caso de una verdadera pandemia no habría tenido problemas para aceptar de buen grado las decisiones de las autoridades civiles y eclesiásticas, porque reconocería en ellas la voluntad de proteger del contagio. Pero para que sea una pandemia, hace falta ante todo que el virus haya sido aislado; que sea grave y no sea posible tratarlo a tiempo; y que las víctimas constituyan un amplio sector de la población. Sabemos por el contrario que el SARS-Covid 2 nunca ha sido aislado, sino apenas secuenciado (2); que se cura con el tiempo mediante terapias disponibles, y sin embargo la OMS y las autoridades sanitarias han impuesto boicots por medio de normativas absurdas y vacunas experimentales; y que el número de fallecimientos en 2020 se ajusta en todo a la medio de los años anteriores (3). Todo esto lo reconocen los propios científicos mientras los medios informativos guardan un silencio mafioso.

Lo que estamos presenciando es un plan que no tiene nada de científico y debería ser objeto de desprecio universal. Sabemos, porque lo han reconocido sus propios perpretadores, que está pseudopandemia ha sido planificada desde hace años4, empezando por desmantelar los sistemas nacionales de salud y sus planes de contingencia para pandemias5. Sabemos que siguen un plan bien preciso, concebido para que todos los estados reaccionen de forma unánime y para homologar a nivel mundial diagnósticos, hospitalizaciones, terapias y, sobre todo, medidas de contención y de información a los ciudadanos. Existe una dirección que gestiona el covid-19 con el único fin de imponer por la fuerza limitaciones a las libertades naturales, los derechos constitucionales, la libre empresa y el trabajo.

El problema no es el covid en sí, sino que se sirvan de él para implementar el Gran Reinicio que desde hacía tiempo6 venía anunciando el Foro Económico Mundial y que actualmente se está aplicando punto por punto con miras a implantar en la sociedad unas transformaciones inevitables que de otro modo serían rechazadas y condenadas por la mayor parte de la población. Dado que la democracia, siempre tan exaltada en tanto que se conseguía dirigirla gracias a la influencia de los medios, jamás habría consentido que se llevase a cabo esta obra de ingeniería social auspiciada por la élite mundialista, era necesario el peligro de una pandemia –presentada por los medios oficiales como devastadora– para convencer a la población mundial a fin de que se sometiera a confinamientos, cierres perimetrales (o sea auténticos arrestos domiciliarios), clausura de actividades, suspensión de clases escolares e incluso la prohibición de cultos. Y todo ello se ha conseguido con la complicidad de todos los que están metidos en ello, en particular los gobiernos, las autoridades sanitarias y las propias autoridades eclesiásticas7.

El daño que todo ello ha ocasionado y sigue ocasionando es enorme, y en muchos sentidos irreparable. Sufro lo indecible al pensar en las devastadoras consecuencias de la mala gestión de la pandemia: familias destruidas, niños y jóvenes afectados en el equilibrio psicofísico y privados del derecho a relacionarse socialmente, ancianos que mueren abandonados en residencias de mayores, enfermos de cáncer y otras graves dolencias totalmente desatendidos, empresarios condenados a la quiebra, fieles a los que se les niegan los sacramentos y la asistencia a Misa… Estos son los efectos de una guerra, no de un síndrome gripal estacional que sana con el tiempo y que en los pacientes no aquejados de otras enfermedades previas tiene un porcentaje de supervivencia del 97,7%. Es significativo, además, que en esta carrera desenfrenada hacia el abismo no se tengan en cuenta los principios fundamentales de una vida saludable, al objeto de debilitar nuestro sistema inmunitario: se nos confina en casa, privados de la luz del sol y del aire puro, para someternos al terrorismo mediático de la televisión.

¿Con qué severidad habrá que juzgar a quienes han prohibido a sabiendas los tratamientos y prescrito normas terapéuticas descaradamente erróneas a fin de dar lugar a una cantidad de muertos que legitimase las alarmas sociales y las absurdas medidas de protección? ¿Quién ha sentado deliberadamente las bases de una crisis económica y social de alcance planetario, destruir la pequeña y mediana empresa y hacer prosperar a las multinacionales? ¿Quién ha boicoteado o prohibido terapias existentes a fin de favorecer a las empresas farmacéuticas? ¿Quién ha hecho pasar sueros génicos por vacunas, sometiendo a la población a un experimento cuyos resultados y efectos secundarios son imposibles de prever, y sin duda mucho más graves que los síntomas del covid? ¿Quién promueve el discurso apocalíptico en los escaños del Parlamento y las redacciones de la prensa? Y los más altos niveles de la jerarquía eclesiástica, cómplices de esta grotesca farsa: ¿cómo se justificarán ante Dios cuando comparezcan ante Él para ser juzgados?

DW: En una carta que dirigió al entonces presidente de los Estados Unidos Donald Trump V.E. no sólo habló de un estado profundo –expresión bastante difundida– sino también de una Iglesia profunda. ¿Podría explicar más?

Monseñor Viganò: La expresión estado profundo transmite muy bien la idea de un poder paralelo privado de legitimidad pero que interviene en los asuntos públicos persiguiendo unos intereses particulares. El estado profundo promueve la superioridad de una élite sobre el bien común que el Estado tiene la obligación de promover. Por otra parte, tampoco podemos dejar de reconocer que en las últimas décadas se ha consolidado un poder semejante en el ámbito eclesial, al que he dado en llamar iglesia profunda, que opone la consecución de sus propios intereses a los fines de la propia Iglesia, el primero y principal de los cuales es la salvación de las almas.

Así pues, del mismo modo que en los asuntos públicos hay unos poderes ocultos que dirigen entre bastidores las decisiones de los gobiernos siguiendo un plan mundialista, existe en la Iglesia Católica un lobby muy poderoso que usurpa la autoridad de la jerarquía con los mismos objetivos. En sustancia, el Estado y la Iglesia están ocupados por una autoridad ilegítima que tiene por objetivo principal destruirlos para instaurar un Nuevo Orden Mundial. No hablamos de teorías conspiracionistas ni de fantasías políticas; lo demuestra cuanto estamos presenciando con nuestros propios ojos, hasta el punto de que hace poco el Secretario General de las Naciones Unidas afirmó que el virus está sirviendo para reprimir a los disidentes.

DW: ¿Hasta qué punto se superponen estado profundo e iglesia profunda, al menos en el mundo occidental?

Monseñor Viganò: La superposición entre estado profundo e iglesia profunda se desenvuelve en varios frentes. El primero es sin lugar a dudas el ideológico: la matriz revolucionaria, anticatólica y esencialmente masónica del pensamiento mundialista es la misma, y no sólo desde 2013. A decir verdad, no hay más que tener en cuenta la significativa concomitancia temporal entre la celebración del Concilio Vaticano II y el nacimiento del llamado movimiento estudiantil: el aggionamento doctrinal y litúrgico supusieron para las nuevas generaciones un impulso que tuvo repercusiones inmediatas en los ámbitos social y político.

El segundo frente está en las dinámicas internas del Estado profundo y la Iglesia profunda. Tanto el uno como la otra cuentan entre sus miembros con personajes desviados no sólo intelectual y espiritual sino moralmente. Los escándalos sexuales y financieros en los que se han visto implicados altísimas figuras tanto de la política como de las instituciones y la jerarquía católicas demuestran que la corrupción y el vicio son por un lado un elemento que los liga, y por otro un eficaz elemento disuasorio debido a los chantajes de que todos ellos son objeto. Las perversiones de destacados políticos y prelados los obligan a obedecer el plan mundialista aun a pesar de que su colaboración parece ilógica, desconsiderada o contraria a los intereses de los ciudadanos y de sus fieles. Por eso hay gobernantes a las órdenes de la élite que destruyen la economía y el tejido social de sus países. Por eso, hay también cardenales y obispos que propagan la ideología de género y el falso ecumenismo para escándalo de los católicos; unos y otros colaboran a los intereses de su amo, traicionando su misión de servir a su nación o a la Iglesia.

El plan de instauración del Nuevo Orden Mundial no podrá realizarse, por otra parte, sin una religión universal de inspiración masónica, a cuya cabeza deberá estar un dirigente religioso ecuménico, pauperista, ecologista y progresista. ¿Quién mejor que Bergoglio para desempeñar ese papel, con el beneplácito de la élite y el insensato entusiasmo de las masas adoctrinadas en el culto idolátrico de la Pachamama.

DW: ¿Qué pruebas o indicios hay de ello?

Monseñor Viganò: Creo que la demostración más evidente ha coincidido con la pandemia. El rebajamiento de las altas esferas de la jerarquía en la torpe gestión de la emergencia sanitaria –emergencia artificialmente provocada y servilmente amplificada por los medios de difusión de todo el mundo– ha llegado al extremo de prohibir las celebraciones litúrgicas antes incluso de lo que solicitasen las autoridades civiles; a prohibir la administración de los sacramentos incluso a los moribundos; a ratificar con ceremonias surrealistas el discurso dominante repitiendo hasta la saciedad todo el léxico de la neolengua: nueva normalidad, nada será como antes, build back better, etc., etc., etc.; a promover como un deber moral un suero génico producido a partir de tejidos fetales procedentes de abortos8, todavía en fase experimental y cuyos efectos secundarios a largo plazo se desconocen. Es más: por medio del Council for Inclusive Capitalism promovido por los dirigentes mundialistas –entre quienes destaca Lady Lynn Forester de Rothschild9 — con la participación del Vaticano, se da el espaldarazo oficial al Gran Reinicio del Foro Económico Mundial, incluido el ingreso universal y la transición ecológica. En Santa Marta se empieza a hablar de transhumanismo, haciendo caso omiso obstinadamente del carácter anticristiano de dicha ideología a fin de adular a la dictadura del pensamiento único. Cosas todas que ponen los pelos de punta y uno se pregunta por cuánto más tiempo tolerará el Señor semejante afrenta por parte de sus ministros.

Por otro lado, la obsesiva insistencia en el ecologismo malthusiano ha llevado a que para la Pontificia Academia para la Vida se nombre a personajes notoriamente anticatólicos, partidarios de la reducción demográfica mediante la esterilización, el aborto y la eutanasia. Todos ellos, bajo la dirección de un prelado de probada fidelidad bergogliana, han invertido totalmente los objetivos de la academia que fundó Juan Pablo II, facilitando con ello a la ideología dominante un respaldo autorizado y prestigioso como el de quienes, por añadidura usurpándola, detentan autoridad en la Iglesia Católica. No tiene nada de sorprendente que al número de los académicos se haya unido recientemente el profesor Walter Ricciardi, uno de los supuestos expertos que en Italia propusieron el confinamiento y el uso a ultranza de la mascarilla, en ausencia de toda prueba científica de su eficacia y contrariando las recomendaciones de la propia OMS. Según una noticia de ayer mismo, el intermediario para la obtención de suministros chinos para el covid en Italia, Mario Benotti, habría sido recomendado por el cardenal Pietro Parolin10, que por lo averiguado por la Magistratura parece que también ha participado en otros asuntos relacionados con el subdirector de Leonardo Spa, que según Benotti podría ser sustituido por Domenico Arcuri.

Todo esto revela la participación del Estado profundo y la Iglesia profunda en un torpe contubernio que tiene por objeto destruir las soberanías nacionales y la misión divina de la Iglesia. Salen a la luz inquietantes vínculos con el fraude electoral de EE.UU., con el virus creado en el laboratorio de Wuhan y hasta con las relaciones comerciales con la dictadura china, principal suministradora de mascarillas (si bien no se ajustan a la normativa de la Comunidad Europea) a Italia y a otros muchos países. Yo diría que nos encontramos ante algo más que meros indicios.

DW: Quienes lo consideran una teoría conspirativa podría objetar que cómo es posible que en casi todos los países del mundo la gran mayoría de los políticos participen en este juego; ¿quién va a tener tanto poder e influencia como para mantener a medio mundo aislado?

Monseñor Viganò: Le respondo con un ejemplo: la Iglesia es una institución supranacional que está presente en todo el mundo con diócesis, parroquias, comunidades religiosas, conventos, universidades, colegios y hospitales. Todas estas instituciones están a las órdenes de la Santa Sede, y cuando el Papa dispone una jornada de oración o ayuno todos los católicos del mundo le obedecen. Si un dicasterio de la Curia Romana da unas orientaciones, todos los católicos del mundo las cumplen. El efecto es capilar e inmediato gracias a una estructura jerárquica eficiente. Y dentro de los límites nacionales sucede también igual en los estados: cuando el cuerpo legislativo aprueba una ley, los organismos correspondientes la cumplen.

El estado profundo y la iglesia profunda funcionan de manera parecida: se valen de una estructura marcadamente jerárquica en la que prácticamente no hay un elemento democrático. Las órdenes se imparten desde arriba y se acatan de inmediato, porque se sabe que la desobediencia puede suponer el fracaso profesional, el ostracismo social y en algunos casos hasta la muerte física. Esta obediencia es fruto de la coacción: te promociono, te doy autoridad, te hago rico y famoso pero a condición de que hagas lo que yo digo. Si obedeces y eres fiel, aumentará tu autoridad y tu riqueza; si desobedeces, eres hombre muerto. Supongo que los lectores de lengua alemana se acordarán automáticamente del Fausto de Goethe.

Salvo raras excepciones, todos los políticos que gobiernan las naciones forman parte del estado profundo. De lo contrario no estarían donde están. Pensemos en las elecciones estadounidenses del pasado 3 de noviembre. Como el presidente Trump no estaba alineado con el pensamiento único, se decidió expulsarlo mediante un fraude electoral de proporciones inauditas y contrariando la voluntad del pueblo. Los procesos que se están llevando a cabo en Estados Unidos están confirmando los fraudes e irregularidades. Creo que en los próximos meses saldrán a la luz pruebas de esa estafa que, oh casualidad, ha llevado a la Casa Blanca a un demócrata católico progresista totalmente alineado con el plan del Gran Reinicio. Bien mirado, la dimisión de Benedicto XVI y la elección de Jorge Mario Bergoglio parecen responder a la misma dinámica y proceder del mismo lobby de poder.

Por lo que he oído, en Alemania también ha habido indicios que demostrarían que en la gestión de la pandemia se han falsificado datos a fin de legitimar la vulneración de los derechos de los ciudadanos. Y a pesar del preocupante número de personas afectadas por efectos secundarios de la vacuna o fallecidas a consecuencia de ésta, siguen machacando con la obligación de vacunarse, cuando a estas alturas es evidente que no garantiza la inmunidad y que no evitará ni el distanciamiento social ni la obligación de portar mascarilla.

Hay motivos para sostener que la gestión del covid está organizada bajo una dirección única y con un único guión. Hace unos días, el gobernador del estado de Nueva York Andrew Cuomo reconoció que se había recibido instrucciones de ingresar a los ancianos en residencias; ancianos que fallecieron a causa de una normativa terapéutica errónea, intubados y obligados a estar conectados a un respirador artificial. Instrucciones que les dio el Imperial College de Londres, financiado por la Fundación Bill y Melinda Gates. Y qué casualidad, los patrocinios del filántropo estadounidense afectan a muchísimas entidades nacionales, incluso del gobierno, haciéndolas depender económicamente de un individuo que teoriza la despoblación del planeta por medio de una pandemia.

Me ha preguntado quién podría tener suficiente poder e influencia para tener a medio mundo aislado. Pues quien dispone de enormes recursos, como disponen precisamente ciertos personajes bien conocidos entre los que destacan Bill Gates y George Soros; gente que está en condiciones de financiar la propia OMS, interviniendo en sus decisiones y obteniendo pingües beneficios, ya que también tiene acciones de las compañías farmacéuticas.

DW: En su carta abierta al entonces presidente Donald Trump habló de un enfrentamiento entre las fuerzas de la luz y las de las tinieblas. Mirando el año 2020 en retrospectiva, ¿cómo se ha ido desarrollando ese conflicto hasta el día de hoy?

Monseñor Viganò: Como pasa siempre en los asuntos terrenos, la guerra entre el bien y el mal, entre los hijos de la luz y los de las tinieblas, siempre parece inclinarse a favor de estos últimos. Satanás, que es el príncipe de este mundo, tiene muchos secuaces organizadísimos e infinidad de sirvientes. Por su parte, los buenos parecen numéricamente inferiores y poco organizados, con frecuencia anónimos, y casi siempre desprovistos de todo poder y de unos medios económicos que les permitan actuar con la misma eficacia que sus enemigos. Pero siempre ha sido así, porque la victoria no es de los buenos, sino de Cristo. Ego vici mundum: Yo he vencido al mundo, nos advierte Nuestro Señor. Nosotros aportamos nuestra pequeña contribución, tal vez de forma heroica, pero sin la gracia de Dios no somos capaces de nada: sine me nihil potestis facere.

2020 nos ha obligado a mirar a los ojos a la Medusa mundialista, haciéndonos ver lo fácil que es para el estado profundo imponer una tiranía sanitaria a miles de millones de personas. Un virus no aislado, con un porcentaje altísimo de supervivencia, es aceptado como instrumentum regni, como un medio de dominar a los súbditos, con la complicidad de los gobernantes, de los medios de prensa y de la propia jerarquía eclesiástica. La crisis económica ocasionada por el confinamiento debe hacer inevitable la anulación de las deudas y la institución de la renta universal al precio de renunciar a la propiedad privada y la aceptación de la localización a través del pasaporte sanitario. Quien se niegue a vacunarse podrá ser internado en campos de detención ya listos en numerosos países, entre ellos Alemania11. La conculcación de los derechos constitucionales y religiosos será tolerada por los tribunales en aras de una emergencia eterna que prepara las masas para la dictadura. Esto es lo que nos espera, según reconocen los propios autores del Gran Reinicio.

Pero esta sucesión de medidas severas motivadas por ridículas y contradichas por la evidencia está debilitando muchas certezas en cosas a las que hasta ahora las masas concedido una aceptación fideísta rayana a veces en la superstición. Las acusaciones iniciales de negacionismo a quien pone en tela de juicio las absurdas afirmaciones de sedicentes expertos han hecho entender a muchos que el covid nos es presentado con connotaciones religiosas precisamente para que no sea tema de discusión, porque desde el punto de vista científico se lo habría considerado igual que los coronavirus de años anteriores. Estas contradicciones están abriendo los ojos a muchos, aun en medio del descarado servilismo de los medios y la creciente censura de los objetores en las redes sociales.

DW: ¿Cómo sería el mundo si triunfaran las fuerzas que V.E. llama de las tinieblas?

Monseñor Viganò:
Un mundo en el que triunfara el estado profundo vería el cumplimiento de las peores situaciones descritas por el Apocalipsis, los Padres de la Iglesia y los místicos. Sería un reino infernal en el que todo lo que recuerde remotamente a la sociedad cristiana –de la religión a las leyes, la familia, la enseñanza, la sanidad y el trabajo– sería inevitablemente prohibido, alterado y corrompido. Los heterosexuales perseguidos, las familias formadas por un hombre y una mujer prohibidas, los hijos naciendo en vientres de alquiler, la historia censurada, la religión desacreditada, la honradez y la disciplina ridiculizadas, el honor tildado de concepto fascista, la virilidad condenada como tóxica, la maternidad deplorada como no sostenible, la vejez obligada a someterse a la eutanasia, la enfermedad considerada oportunidad de lucro y la salud bajo sospecha. Y al cabo de dos siglos de adoctrinamiento se renegaría de la famosa democracia, en nombre de la cual quien nos gobierne lo hará sin haber sido elegido, por el bien de la salud pública.

Sólo en el Reino de Cristo puede haber paz y verdadera concordia. En la tiranía de Satanás se imponen el terror, la represión, la guerra contra el bien y la autorización de los más vergonzosos vicios.

DW: ¿Cómo cree que se puede evitar todo eso?

Monseñor Viganò: Debemos procurar que lo que ha sucedido hasta ahora no logre sus objetivos finales. Podemos y debemos denunciar los engaños y mentiras que nos endilgan a diario quienes nos consideran siervos estúpidos y creen que nos podrán someter sin que reaccionemos. Si hay leyes que tutelen los derechos naturales de los ciudadanos, es necesario que todos alcen la voz y protesten valerosamente pidiendo a los jueces que los responsables de este golpe de estado mundial sean procesados y condenados.

No podemos permitir que por miedo a una pandemia artificial los países del mundo se vean abocados a unas crisis económica y social inducidas, ni que se restrinjan las libertades infringiendo las leyes y el sentido común. Si sabemos mantenernos firmes y no nos echamos atrás ante esta una oportunidad más propicia, y estaremos a tiempo de impedir que se instale la tiranía. Y si nos quedamos cruzados de brazos, ese plan infernal se volverá irreversible.

No olvidemos que, como católicos, tenemos una responsabilidad grandísima tanto de cara a nuestros pastores como a nuestros gobernantes. Podemos y debemos dejar de obedecer cuando se nos pida que acatemos leyes inicuas o contrarias al Magisterio inmutable de la Iglesia. Si nos oponemos con firmeza y valor como en tiempos de los mártires, haremos nuestra parte para obtener del Cielo gracias que pueden transformar la suerte de la humanidad y retrasar la persecución de los últimos tiempos.

Roguemos, pues, con toda confianza a la Virgen Santísima, Reina de las victorias y Auxilio de los cristianos, para que sea nuestra Generala en esta épica batalla. Esté a su flanco el glorioso arcángel San Miguel para que mande de vuelta al Infierno a Satanás y demás espíritus malignos que ad perditionem animarum pervagantur in mundo.

+ Carlo Maria Viganò, arzobispo

28 de febrero de 2021

Dominica II Quadragesimæ


(Traducido por Bruno de la Inmaculada)

viernes, 5 de marzo de 2021

El Culto del Covid. Conferencia de Tom Woods. TeleCreyentes de la Propaganda que ignoran los hechos y no usan el sentido común

 EL INVESTIGADOR.ORG


Duración: 20 minutos
(subtítulos en español)

Demoledora conferencia de 20 minutos de Tom Woods en el Instituto Mises en la que expone hechos sobre los confinamientos y sobre las mascarillas.

“¡Solo quieres que la gente muera!” Esa es la respuesta intelectualmente estimulante que sueles obtener cuando se cuestiona la “ciencia” de confinar a toda la población sana.

Thomas E. Woods, Jr., es el ganador en 2019 del premio Hayek Lifetime Achievement Award del Austrian Economics Center en Viena. Es miembro senior del Instituto Mises y presentador de The Tom Woods Show, que lanza un nuevo episodio todos los días de la semana.

Es autor de 12 libros varios de ellos Best Sellers. Es Autor del Ebook gratuito “tus amigos de facebook están equivocados sobre los confinamientos“.

La conferencia de título “El Culto del Covid“, ha sido subtitulada por voluntarios de el proyecto elinvestigador.org y al que hemos añadido el subtítulo de “Tele-Creyentes de la Propaganda que ignoran los hechos y no usan el sentido común“.

El subtítulo trata de reflejar que muchas personas forman parte de ese irracional “Culto del Covid” sin darse cuenta al haber estado sometidos a propaganda constante.

Y se refleja en que difícilmente atienden a razones, rara vez cuestionan la información televisiva, les cuesta aceptar hechos evidentes o reflexionar por si mismos sobre ellos.

E incluso se enfadan con aquellas personas o información que suponga poner en tela de juicio ciertas creencias acientíficas repetidas en televisión una y otra vez, utilizando una cantidad de propaganda sin precedentes a la que llevan sometidos durante meses.

Similar a lo producido en una secta o culto.

¿Te atreves a ver una conferencia que te hable sobre confinamientos y mascarillas de forma clara y directa? El video está al comienzo de esta entrada del blog.

Enlaces para ver el video en plataformas resistentes a la censura:

Ver video en LBRY (En LBRY además puedes descargarlo con el botón ↓ al lado de “compartir”)
————

Ver en Facebook (mientras no lo censuren)

Los confinamientos de gente sana nunca han funcionado en toda la historia, salvo para quitarte la felicidad, agotar tus ahorros, arruinar tu medio de vida, retrasar procedimientos médicos necesarios, interrumpir las cadenas de suministros, lo cual provoca hambruna.

Y todo ello conduce a un exceso de MILLONES de muertes en el mundo por otras enfermedades, hambre, depresión, desesperación y ruina económica

Esto debería ser terriblemente obvio a estas alturas. Y sin embargo tenemos aún a mucha gente creyendo que deberíamos insistir en los procedimientos que ya han demostrado que no funcionan y han fracasado.


De hecho, las consecuencias de los encierros son tan devastadoras y trascendentales que todas las personas decentes y humanas deben rechazar toda la estrategia.

En este libro electrónico gratuito, el autor más vendido del New York Times, Tom Woods, aclara las cosas y deja la estrategia de cierres y confinamientos por los suelos.



Enlaces para investigar más:

[Web] oficial de tomwoods.com

jueves, 25 de febrero de 2021

El obispo Schneider pide un "nuevo movimiento provida" contra las vacunas y los medicamentos "contaminados por el aborto"



En nuestra traducción de LifeSiteNews, el relato del discurso del obispo Athanasius Schneider en la conferencia on line titulada 

"Desenmascarando el COVID-19: vacunas, mandatos y salud global"

en el que espera la formación de un "nuevo movimiento pro-vida" se niega a tratar con medicamentos o vacunas derivadas de cualquier forma de bebés abortados.

Observo que el problema no es sólo de carácter moral en relación con el uso de células fetales, sino que también concierne al desconocimiento que se tiene de las consecuencias, insuficientemente probadas (incluso a medio / largo plazo) sobre el organismo humano, de los productos concebidos y fabricados en el campo de las nuevas biotecnologías. 

Están mal definidas como vacunas, ya que no se corresponden con las características de las vacunas utilizadas hasta la fecha, que actúan confiriendo inmunidad mediante la creación inducida de anticuerpos. 

Los nuevos productos, en cambio, actúan de forma invasiva sobre el delicado equilibrio del mecanismo de funcionamiento de las células; un mecanismo complejo, ni siquiera del todo conocido, así como interconectado de una manera admirable pero no completamente explorada, con todos los innumerables sistemas fisiológicos del organismo humano. 

En conclusión, manifestar perplejidad respecto a las vacunas anti-Covid no significa ser no-vax, sino ejercitar libremente el derecho de elección tanto por motivos morales -objeto de la pastoral del obispo Schneider- como pendientes de más elementos de evaluación en el aspecto de salud.

--------

Un obispo católico pide la formación de un "nuevo movimiento provida" que se niega a tratar con medicamentos o vacunas derivadas de una forma u otra de niños abortados. "Tenemos que crear un nuevo movimiento pro-vida", dijo el obispo Athanasius Schneider, obispo auxiliar de Astana, Kazajstán, el 19 de febrero durante su discurso en una conferencia on line titulada " Desenmascarando el COVID-19: vacunas, mandatos y salud global ", organizado por LifeSiteNews

El obispo Schneider dijo que hasta ahora el movimiento pro-vida ha sido "muy meritorio" al adoptar una postura unívoca contra el aborto. Y agregó: “Sin embargo, creo que ha llegado ya un nuevo tiempo, una nueva etapa, un nuevo período para que todos los movimientos pro-vida protesten, de manera clara e inequívoca, contra las drogas contaminadas por el aborto, contra el uso de partes del cuerpo del feto ". "Esta es una nueva etapa y debemos ser valientes"

El llamado a la acción de Schneider se produce a raíz de las revelaciones sobre cómo los investigadores obtienen líneas celulares celulares de bebés abortados que se utilizan en el desarrollo de numerosas vacunas, incluidas varias vacunas COVID, para tener tejido utilizable.

Las pautas de la Iglesia Católica de 2020 permiten que los católicos reciban vacunas contaminadas por aborto, enfatizando que los católicos que reciben una vacuna COVID relacionada de alguna manera con el aborto pueden hacerlo con "buena conciencia" con "la certeza de que el uso de tales vacunas no constituye una cooperación formal" con el aborto.

El obispo Schneider, aunque ciertamente podría estar de acuerdo con la no cooperación formal (es decir, la participación voluntaria) de un vacunado en un aborto del que se ha obtenido una línea celular para producir vacunas, también sostiene que los cristianos no pueden "simplemente disociarse" del hecho de que la producción de varios medicamentos está relacionada con el sacrificio de bebés prematuros cuyas partes del cuerpo se utilizan.

"La voz de la sangre de los niños por nacer clama a Dios por las vacunas contaminadas por el aborto, por los medicamentos contaminados por el aborto", dijo Mons. Schneider. "Esta voz está gritando en todo el mundo y tenemos que despertar". Y agregó: "Nadie que esté verdaderamente preocupado por la defensa de la vida y la ley moral puede callar o mantener la calma y resignarse a esta situación".

El obispo se quejó de los líderes de la Iglesia, especialmente de los vinculados a la Santa Sede, que "lamentablemente no ven la gravedad" de la cuestión.

Schneider destacó que hay una "acumulación de delitos" en relación con la creación de medicamentos contaminados por el aborto.
«El primer crimen es el asesinato, el asesinato del feto. Luego está la extracción de las células: es un crimen, es horrible. Y luego el reciclaje de estas partes del cuerpo. Y luego está el marketing y así sucesivamente. Y finalmente está la fabricación de medicamentos y la fabricación de vacunas ”.
“Son todos aspectos conectados. No se pueden separar”, dijo. “Cuando tomas una determinada medicina o una determinada vacuna, no puedes decir: 'Oh, todos estos males desaparecen y estoy muy lejos [de todos]'. Eso no es verdad. Entras en esta cadena". "Ha llegado el momento de que todas las personas de buena voluntad, especialmente los católicos creyentes y todas las organizaciones pro-vida, se pongan de pie y protesten fervientemente con voz unánime diciendo: "Nunca estaremos de acuerdo, nunca admitiremos [en nuestras vidas] estos males”
Schneider citó de Los hermanos Karamazov, de Dostoievski , la advertencia del autor ruso sobre el costo moral de crear una utopía de "paz e inactividad" basada en la tortura, la muerte y las "indescriptibles lágrimas" de "una pequeña criatura, ese niño que se golpea el pecho con su puño».

“Hay que protestar contra esto e iniciar un nuevo movimiento en el sector farmacéutico, en la medicina, sin ninguna conexión, ni siquiera la más remota, con estos delitos”, dijo el obispo.

Schneider declaró que los cristianos en este nuevo movimiento deberían estar dispuestos a enfrentar la "prisión" e incluso la "muerte" en lugar de recibir los beneficios para la salud, que provienen de matar a los niños por nacer.
“¿Cómo se puede explotar el asesinato y todos estos horribles crímenes en los niños no nacidos más débiles e inocentes para la salud temporal de uno? El fin nunca justifica los medios. No puedes entrar en esta cadena ».
Indicó el ejemplo de los primeros cristianos que, ante tiempos de persecución, eligieron el martirio antes que salvar sus vidas, sus familias, sus hijos, colocando un grano de incienso frente a la estatua de un ídolo. "Rechazaron cualquier acto de ambigüedad o cooperación contra el primer mandamiento de Dios", dijo.

“Creo que nos acercamos a un tiempo en el que los verdaderos cristianos entrarán en una especie de período de persecución. Las señales ya están ahí. Pero no debemos tener miedo porque Dios está con nosotros […] "Si Cristo vive en nosotros, no debemos tener miedo", añadió.
"Debemos estar convencidos de que somos ganadores y mirar hacia la eternidad. ¿Qué es un cristiano? Diría que es una persona de la eternidad. Y como miramos más allá de esta vida única temporal, como miramos lo eterno, buscamos sólo la voluntad de Dios, y cuando lo hagamos, Dios siempre nos dará la fuerza de Jesús, su consuelo y su bendición".

lunes, 22 de febrero de 2021

Monseñor Athanasius Schneider: Francisco está “objetivamente equivocado”



Al hablar el 19 de febrero en una conferencia online de LifeSiteNews.com, el obispo Athanasius Schneider advirtió que la voz de la sangre de los niños no nacidos clama a Dios desde las vacunas contaminadas por el aborto.

Schneider presenta una “cadena de crímenes”: el asesinato de niños no nacidos, la extracción de sus células, el reciclaje de partes de sus cuerpos y su comercialización. Critica que Francisco y los obispos no vean la gravedad del asunto.

Para Schneider, el documento del Vaticano que permite esas vacunas y su promoción por parte de Francisco son declaraciones personales: “No tenemos que aceptarlo como enseñanza definitiva e infalible". El obispo aclara que Francisco está “objetivamente equivocado” en este tema.

Schneider desea un nuevo movimiento provida que proteste sin ambigüedades contra las vacunas contaminadas por el aborto.

sábado, 20 de febrero de 2021

Tanzania católica: No hay necesidad de vacunas Covid-19

 GLORIA TV


La ministra de Salud de Tanzania, Dorothy Gwajima, anunció el 1 de febrero que el país no tiene necesidad de vacunas y “no tiene planes para recibirlas”.

Tanzania tiene 60 millones de personas. Algunas vacunas deben recibir aprobación ministerial. Gwajima explico que Tanzania es segura, y animó a consumir comida saludable, mejorar las prácticas higiénicas, usar desinfectantes y hacer nebulizaciones.

Unos días antes el presidente católico John Magufuli calificó a las vacunas de peligrosas e innecesarias, diciendo que “Dios protegerá” a la nación.

En marzo Magufuli decidió NO cerrar las iglesias. Animó al pueblo para que fuera a trabajar y asistir a los lugares de culto.

Tanzania es uno de los únicos tres países en el mundo que no participa en la histeria del Covid-19 y no da a conocer “datos de infectados”

Los otros son Turkmenistán y Corea del Norte. La Wikipedia de los oligarcas está acusando ahora a Tanzania de “negar el Covid-19”.

Los jesuitas vuelven a la carga: «Legalidad» de utilizar células extraídas de fetos abortados para preparar vacunas contra Covid-19

 SPECOLA


El último número de la Civiltà Cattolica se centra en la «legalidad» de utilizar células extraídas de fetos abortados para preparar vacunas contra Covid-19. Los jesuitas vuelven a la carga desafiando a los católicos más reaccionarios. 

En este momento sus ‘borradores’ son revisados por la Secretaría de Estado y su contenido es el fundamento, o la explicación, de muchas intervenciones del Papa Francisco. 

Por primera vez las autoridades vaticanas, «ante la propagación de la pandemia y la necesidad de producir vacunas capaces de afrontar la amenaza del Covid-19 en un nivel global» da luz verde al uso de células obtenidas de fetos tras la interrupción del embarazo. 

Se elogia la decisión de Doctrina de la Fe de disolver con gran prudencia todos los nudos morales y canónicos sobre el uso de esas células vivas hasta la pandemia, y nos recuerda, menos mal, pero con los artificios propios de las neuronas jesuíticas, que «el recurso la interrupción voluntaria del embarazo es siempre y en todo caso pecado mortal».

Specola

domingo, 7 de febrero de 2021

Vídeos censurados por Youtube. Dra. Pilar Calva Mercado, genetista y estudiosa del Covid-19 (Padre Javier Olivera Ravasi)

QUE NO TE LA CUENTEN

 

No sin sorpresa hemos recibido en estos días la noticia de que Youtube censuró algunos vídeos de la Dra. Pilar Calva Mercado, genetista eximia y discípula del Venerable Jérôme Lejeune acerca de la constitución de ciertas vacunas contra el Covid-19.

Es por ello que ofrecemos aquí los vídeos censurados para disposición del público. Los mismos pueden descargarse y subirse a la plataforma que se desee con nuestro expreso consentimiento dado desde ahora.

P. Javier Olivera Ravasi, SE

Que no te la cuenten…

1) Juicio ético y genético de las vacunas contra el C0V1D-19: conferencia magistral brindada por la Dra. Pilar Calva Mercado Calva, el 21/1/2021 genetista y discípula del Venerable  Jérôme Lejeune acerca de la constitución de las vacunas realizadas contra el Covid-19.(Puede descargarse el ppt de la conferencia aquí)

Reproductor de vídeo
00:00
01:31:11


El vídeo puede descargarse y usarse libremente desde aquí

Para analizar la fabricación de cada vacuna, la Dra. Calva recomienda seguir este enlace que se actualiza permanentemente: https://lozierinstitute.org/update-covid-19-vaccine-candidates-and-abortion-derived-cell-lines/

2) P. Javier Olivera Ravasi: La presentación de la «Nota de la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre la moralidad del uso de algunas vacunas contra la Covid-19« (del 21/12/2020).

Reproductor de vídeo
00:00
13:00


El vídeo puede descargarse y usarse libremente desde aquí (El vídeo en inglés puede verse aquí)

3) Entrevista del P. Javier Olivera Ravasi a la Dra. Pilar Calva Mercado acerca de las vacunas contra el Covid-19

Reproductor de vídeo
00:00
42:51


El vídeo puede descargarse y usarse libremente desde aquí

Estos vídeos pueden descargarse y subirse a la plataforma que se desee con nuestro expreso consentimiento dado desde ahora.

Padre Javier Olivera Ravasi