MAGNIFICAT TV - FRANCISCANOS DE MARÍA
10:22 MINUTOS
Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que procede de Dios (1 Cor 2, 12), el Espíritu de su Hijo, que Dios envió a nuestros corazones (Gal 4,6). Y por eso predicamos a Cristo crucificado, escándalo para los judíos y locura para los gentiles, pero para los llamados, tanto judíos como griegos, es Cristo fuerza de Dios y sabiduría de Dios (1 Cor 1,23-24). De modo que si alguien os anuncia un evangelio distinto del que recibisteis, ¡sea anatema! (Gal 1,9).
«Es desconcertante leer cómo el impostor Martín Lutero ha entrado desde hace mucho tiempo en la Iglesia con todos los honores, con lo que cada vez más aparece como una rehabilitación plena del monje rebelde, autor del cisma protestante y excomulgado por la Iglesia católica bajo el pontificado de León X. No se trata aquí de estar a favor o en contra del diálogo entre católicos y luteranos, pero lo inaceptable es la exaltación por parte de los líderes de la Iglesia del ex monje agustino».
«Cualesquiera que sean los terrores que las comuniones indignas puedan poner en el corazón del hombre por los castigos espantosos que nos atraen, todavía no es nada si los comparamos a aquellos de los que Jesucristo hace caer sobre las almas; y estos castigos son ordinariamente, el endurecimiento durante la vida y la desesperación a la hora de la muerte. El buen Dios, en castigo de sus abominaciones, abandona a este desgraciado a su ceguera; el demonio, que le engañó durante su vida, se deja percibir sólo en el momento en que prevé que el buen Dios lo abandona; va de crimen en crimen, de sacrilegio en sacrilegio, acaba por no pensar más en eso y se traga la iniquidad como el agua; por fin, a pesar de todo el tiempo que tuvo y los socorros de la gracia, muere en el sacrilegio como vivió».
«¿Desprecio los Mandamientos? No. Los observo, pero no como absolutos, porque sé que lo que me justifica es Jesucristo».
«Los Diez Mandamientos son básicamente inmutables y su obligación vale siempre y en todas partes. Nadie podría dispensar de ellos».
In one European city, there is a good relationship between the Catholic archbishop and the Lutheran archbishop. The Catholic archbishop was scheduled to come to the Vatican on Sunday evening, and he called me to say that he would arrive on Monday morning. When he arrived, he told me: “Excuse me, but yesterday the Lutheran archbishop had to go to one of their meetings, and he asked me: ‘Please, come to my cathedral and lead the worship.’” Eh, there’s fraternity. Coming this far is a lot. And the Catholic bishop preached. He did not do the Eucharist, but he preached. This is fraternity.
We Catholics also have closed people who do not want [to pray together] and say that the Orthodox are schismatics. That’s old business. The Orthodox are Christians. But there are some Catholic groups that are a bit fundamentalist. We have to tolerate them, and pray for them, that the Lord by the Holy Spirit softens their hearts. But I prayed during both [Our Fathers]. I did not watch [Romanian Orthodox Patriarch] Daniel, but I believe that he did the same.
1. Jesucristo está realmente presente en la Eucaristía, con su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad (Dogma de fe en la Religión Católica)Son "presencias" irreconciliables. ¿Cómo va a ser igual estar junto a nuestra madre real, a la que podemos tocar y abrazar, con la que podemos dialogar ... que tener una foto de ella, por muy bien que haya salido en la foto, que nos sirve para recordarla, puesto que ahora ya no vive? ¿Cómo se puede equiparar -e identificar incluso- la presencial real con el simple recuerdo? Eso no tiene ni pies ni cabeza: ¡es sencillamente absurdo!
2. Jesucristo está presente en la Eucaristía sólo como un recuerdo de algo que ocurrió, pero nada más, al igual que está presente en cualquier persona (Posición protestante)