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martes, 9 de agosto de 2022

Una poesía de Amado Nervo




HAY QUE 


Hay que andar por el camino
posando apenas los pies;
hay que ir por este mundo
como quien no va por él.

La alforja ha de ser ligera,
firme el báculo ha de ser,
y más firme la esperanza
y más firme aún la fe.

A veces la noche es lóbrega;
mas para el que mira bien
siempre desgarra una estrella
la ceñuda lobreguez.

Por último, hay que morir
al deseo y al placer,
para que al llegar la muerte
a buscarnos, halle que

ya estamos muertos del todo, 
no tenga nada que hacer
y se limite a llevarnos
de la mano por aquel

sendero maravilloso
que habremos de recorrer,
libertados para siempre
de tiempo y espacio. ¡Amén!

Amado Nervo

martes, 14 de diciembre de 2021

TÚ (por Amado Nervo)

 POESÍA



Señor, Señor, Tú antes,

Tú después; Tú en la inmensa

hondura del vacío

y en la hondura interior:

Tú en la aurora que canta

y en la noche que piensa;

Tú en la flor de los cardos

y en los cardos sin flor.


Tú en el cenit a un tiempo

y en el nadir; Tú en todas

las transfiguraciones

y en todo el padecer;

Tú en la capilla fúnebre

y en la noche de bodas;

Tú en el beso primero

y en el beso postrer.


Tú en los ojos azules

y en los ojos oscuros;

Tú en la frivolidad 

quinceañera, y también

en las graves ternezas

de los años maduros;

Tú en la más negra sima,

Tú en el más alto edén.


Si la ciencia engreída

no te ve, yo te veo;

si sus labios te niegan,

yo te proclamaré.

Por cada hombre que duda,

mi alma grita: "Yo creo".

¡Y con cada fe muerta

se agiganta mi fe!


Amado Nervo


miércoles, 7 de abril de 2021

La alegre canción de la mañana

Amado Nervo



Llegó la luz serena,

y a levantarme voy.

La noche se aleja como una gran pena;

¡qué alegre que estoy!


Los pájaros en coro

cantan sus alegrías;

las jaulas vibran como arpas de oro.

Hermanos pájaros, ¡muy buenos días!


Las gotas de rocío

comienzan a temblar

cual si tuviesen frío;

las rosas más hermosas del jardincito mío

con esos mil diamantes van a hacerse un collar.


El hilo del agua, la trémula brisa

sus más alegres cosas empiezan a decir.

El cielo resplandece como una gran sonrisa.

¡Qué bello es vivir! 

Amado Nervo