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viernes, 31 de mayo de 2019

Lo que está en juego tras las elecciones del 26 de mayo (Roberto De Mattei)

Las elecciones celebradas el pasado 26 de mayo han constituido un episodio significativo de un enfrentamiento que va más allá de lo que pase en el Parlamento Europeo o de cualquier gobierno nacional. Existe de hecho un lobby que tiene en la mira la destrucción de la sociedad cristiana y la construcción de organismos cosmopolitas que asuman poderes soberanos sobre la vida y la muerte de los ciudadanos europeos. Un ejemplo de dicho proyecto lo hemos visto últimamente en Francia, donde el Tribunal de Apelación de París ha transferido a la Organización de las Naciones Unidas la decisión definitiva sobre la vida de Vincent Lambert, el paraplégico francés condenado a muerte por su mujer y por los médicos del hospital de Reims, en el cual está ingresado.
Está claro que la autoridad legislativa sobre la vida de Lambert no corresponde ni a los jueces franceses ni a los de Europa o la ONU. Las leyes positivas, nacionales o internacionales, no dimanan de las instituciones que las promulgan o aprueban, sino de una ley divina preexistente a toda ley humana y que no se puede separar de las leyes de los hombres. Pues bien, la ley natural y divina prohíbe matar a un inocente, y toda ley humana que pretenda establecer lo contrario debe ser considerada nula e írrita, además de inicua. Y dado que la Iglesia Católica es la única institución que es custodia de la ley divina y natural, los eclesiásticos tienen más que nadie la obligación de proclamar el derecho inalienable a la vida. Pero hoy en día la voz de los eclesiásticos ha caído en un silencio atronador. El único problema que por lo visto interesa a las máximas autoridades de la Iglesia es dar acogida a los inmigrantes  extraeuropeos. Una acogida total, incondicional y absoluta. No hablamos de la antigua virtud, ya sea cristiana o laica, de la hospitalidad, sino de una opción ideológica en la que la filosofía de la acogida se manifiesta en realidad como una teoría de la renuncia a la identidad europea, o mejor dicho, a su sustitución.
El concepto de gran sustitución fue introducido por Renaud Camus (Le Grand Remplacement, David Reinharc, Neuilly-sur-Seine 2011), y fue desarrollado por el profesor Renato Cristin en su libro I padroni del caos (Liberlibri, Macerata 2017). Mediante un riguroso análisis, el autor, catedrático de filosofía en la Universidad de Trieste, explica que la mencionada teoría aspira a reemplazar los pueblos europeos con otros (africanos, árabes y asiáticos, en su mayoría musulmanes), dando lugar al caos como horizonte histórico concreto. Cristin recuerda la existencia de un proyecto de la ONU del año 2001 en el que se habla explícitamente de «inmigración sustitutiva» con el objeto de hacer frente al declive demográfico de Europa. Los flujos migratorios no sólo son un injerto étnico, sino también un vuelco que trastorna la civilización, una contracolonización en la que los inmigrantes aparecen como portadores de una civilización híbrida o mestiza que se opone a la cristiana que construyó Europa. La destrucción de los estados nacionales viene por tanto mediante una política de sustitución tanto étnica como cultural. La sustitución cultural supone la negación de toda identidad radicada en la tradición cristiana europea; la étnica se produce con una avalancha humana de inmigrantes que reemplazan la población europea, diezmada por el aborto y la anticoncepción. El antinatalismo es la expresión biológica del suicidio cultural y moral de Occidente.
Los resultados de las elecciones europeas han premiado a los partidos políticos que reivindican más abiertamente las identidades nacionales. Particular importancia reviste la aplastante victoria de la Liga de Matteo Salvini, que ha alcanzado en 34,3% de los votos en Italia. Pero Italia es también el país donde ha tenido más impacto el movimiento  a favor de la inmigración. No sólo la Conferencia Episcopal ha  salido a la palestra, sino el papa Francisco, que se ha presentado como cabeza de la izquierda política. La portada del semanario L’Espresso del pasado 26 de mayo mostraba un montaje fotográfico en el que aparecía el Papa disfrazado del Zorro, el famoso justiciero, y lo califica de la voz del «pueblo que protesta» contra Salvini. Al día siguiente, en su mensaje con motivo de la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, Franciscó afirmó: «El lema del cristiano es ¡primero los últimos!», y añadió: «No se trata sólo de migrantes: se trata de poner a los últimos en primer lugar». En la misma mañana, Su Santidad se reunió con Raoni Metukire, jefe de los indios cayapó del Amazonas, para promover el indigenismo revolucionario con vistas al Sínodo de la Amazonia del próximo octubre.
La teología bergogliana de los últimos supone un fomento abierto de la estrategia de la inmigración sustitutiva. No está claro quiénes son los últimos; lo que sí está claro es quiénes son los que deben ser sustituidos en la nueva opción preferencial.El Evangelio exhorta a amar al prójimo como a uno mismo: «No existe mandamiento mayor» (Mc.12,29-31). En la Suma Teológica, Santo Tomás de Aquino (26, parte II,II) explica no obstante que el amor al prójimo no es un sentimiento genérico e indiscriminado, sino que tiene una gradación precisa a la que llama orden de la caridad, en el cual el amor debe extenderse progresivamente de los más allegados a los más lejanos. Dios debe ser amado por encima del prójimo (a.2) y de nosotros mismos (a.3). El hombre debe amarse a sí mismo más que al prójimo (a.4), y entre los prójimos, algunos han de ser más amados que otros (a.6). Los más allegados son aquellos de quienes hemos recibido la vida y a quienes se la hemos transmitido: nuestros padres y nuestros hijos. Nuestro amor al prójimo se extiende a partir de ellos. Sería absurdo, por ejemplo, echar de casa a nuestros padres para meter en su cuarto a un matrimonio de inmigrantes. Es más, el amor que debemos al prójimo es ante todo de naturaleza espiritual. Lo que debemos desear por encima de cualquier otra cosa es la salvación de las almas de nuestros seres queridos. Amar significa desear su salvación. En el caso de los inmigrantes, consiste en desear su conversión a la verdadera fe. Ni en Italia ni en el resto de Europa se está llevando a cabo una pastoral de evangelización de los inmigrantes. Se nos presenta el multiculturalismo como un valor superior a la identidad monocultural cristiana.
El dogma de la acogida es proclamado por una sociedad que quita la vida a seres humanos inocentes, a niños por nacer y a ancianos; los primeros, condenados a muerte por aborto, y los segundos por eutanasia, sin que haya una verdadera oposición a estos crímenes por parte de las autoridades eclesiásticas. En realidad, quien se escandaliza por un crucifijo en la pared de un aula o porque un político bese un rosario*, no sólo desea extirpar toda expresión pública de cristianismo; pretende además apagar toda luz de la ley divina y natural que sobrevive en nuestra conciencia exigiéndonos la defensa de una vida inocente. Quien tenga todavía algo de conciencia cristiana no puede menos que exigir la presencia viva del Crucificado, y no sólo en la vida privada, sino también en la pública y en la identidad colectiva de las naciones europeas. Por ello, pedimos a todos los partidos que han ganado las elecciones en Italia, Hungría, Francia y tantos otros países, derrotando el inmigracionismo, que no se limiten a invocar de forma genérica y superficial las raíces cristianas, sino que manifiesten de modo concreto dicha identidad en las instituciones y leyes europeas, empezando por la defensa incondicional de la vida y de la familia. El caso de Lambert es, después de los de Eluana Englaro y Alfie Evans, ejemplo de una batalla a librar en los próximos meses. Es posible que con ello el enfrentamiento cobre más altura, pero actualmente se combate a vida o muerte por nuestra civilización. Más que una batalla en los parlamentos, es una batalla de cultura y mentalidad, aunque los resultados de las elecciones cumplen también la función de revelar tendencias profundas de la opinión pública. En el caso de las del pasado 26 de mayo, se ha revelado la existencia de un pueblo que europeo que no se rinde.
Roberto De Mattei

miércoles, 29 de mayo de 2019

ELECCIONES EN ESPAÑA (IV). LOGIADANOS. (Capitán Ryder)



En las recientes elecciones generales, autonómicas y municipales, ha pasado en los medios como partido de derechas el de Albert Rivera, Ciudadanos.
Quizá, este encuadramiento ideológico sea uno de los más cómicos de los últimos 40 años. Incluso para un país desquiciado y una derecha paganizada, situaciones actuales en España, parece demasiado.
El caso es que pocos partidos pueden presumir de un pedigrí tan masónico, al menso aparentemente: en su nombre, en sus formas, en la supuesta defensa que hace de la nación española, en los candidatos que elige etc
Como el nombre, Ciudadanos, evoca más aquellos oscuros años de la Revolución francesa hay quien, con mucho tino, los ha rebautizado como Logiadanos.
El nombre no va a la zaga de las ideas con las que pretende hacer frente a los nacionalismos, y por lo que supongo que pasa por partido de derecha, abrazándose con gran pasión al “patriotismo constitucional”.
Así, en una idea repetida multitud de veces publicaba en 2018 en Twitter “Los nacionalistas vascos temen una marea de patriotismo constitucional. Es lógico, les gustan los privilegios y no les gusta la España de ciudadanos libres e iguales”.
Comentaba a este respecto el joven católico Jaume Vives con gran acierto “Los nacionalistas tienen razón en ese punto, la nación preexiste a la constitución”. Pues sí, lo que los romanos ya llamaban Hispania hace 2000 años ha sido reducida por estos defensores de la nación a una ley: la constitución de 1978.
Desde luego no es lo que generaciones de españoles han entendido por nación. Aunque quizá se entiende mejor si se enlaza con otra idea central de este partido: la disolución de la nación en la Unión Europea. Por ejemplo, hace unos meses “un patriotismo constitucional del siglo XXI, liberal, moderno y europeísta, y creo que ahí no coincidimos con algunos partidosTenemos el compromiso de que seguiremos trabajando por los estados unidos de Europa“.
Incluso ha propuesto ceder el control de fronteras a la Unión Europea. es decir, defienda una nación sin ninguna soberanía. Una nación en la que se podrá votar pero sin ninguna posibilidad de cambiar nada, pues todo se decidirá en esos oscuros órganos comunitarias.
Demasiado, incluso para la mierdocracia liberal.
Una nación sin raíces, sin lazos entre españoles, sin historia, reducida a una ridícula ley, y en la que el eslabón más fuerte para continuar juntos es un estúpido optimismo en el futuro. Así, comentaba hace no mucho “La diferencia entre un liberal y un socialista o un conservador es que pensamos que el futuro tiende a ser mejor”.
Es decir, las cosas irán mejor en el futuro…porque así tiene que ser. ¡Qué lástima que ni la historia, ni la razón, ni la naturaleza del hombre respalden su loca teoría!
Pero bueno, hace poco más de 200 años ya tuvo éxito este tipo de ideas, el paso de la organización política del pueblo, este sí, a un estado criminal que alumbraría un futuro esplendoroso.
Todo ello, por supuesto, de la mano de Soros, con quien ya se ha reunido y al que alaba en twitter el gurú económico de ciudadanos, señor Garicano.
A todo ello podemos añadir el fichaje del masón Valls, candidato ex-socialista en Francia. Recién llegado no ha parado de dar lecciones a todo el mundo sobre con quién se puede pactar o no y cuya última idea, “genial”, ha sido la de entregar la alcaldía a Ada Colau, cuya mayor preocupación tras los atentados de Barcelona era arrinconar al Rey de España en los actos institucionales posteriores, en los que, dicho sea de paso, no dejó de sonreír. ¡De qué se reía!
Por cierto, el político que expulsó ¡de qué manera! a los gitanos de Francia acusando a otros de racista.
Vuelvo al dicho americano, “si anda como un pato, vuela como un pato y hace cua cua…”
Esto es lo que hay.
Capitán Ryder
P.D: Más de 40 años de terrorismo para no entender nada: que unos españoles, ¡los mejores!, murieron por su país, y otros mataban para construir, es un decir, el suyo.
Que el Señor tenga en su gloria a los casi 1000 asesinados por el terrorismo en España.

ELECCIONES EN ESPAÑA (III). CATALUÑA (Capitán Ryder)


Continuamos con el análisis, más que de los resultados electorales, de algo muchísimo más importante, la deriva de España como país.
Hay que entender que todo lo que aflora ahora, este camino al precipicio, tiene un origen. Renunciar a estudiarlo y entenderlo impide combatirlo. Exactamente igual que en la Iglesia. En España ha pasado lo mismo; determinados épocas, aparentemente más estables, escondían los graves problemas que no sólo no habían acabado sino que se incrementaban sin que fuésemos conscientes de ello.
Así se ha llegado a la actual situación.
Ahora se echa de menos a quienes empedraron este camino al infierno.
Otra muestra más nos la cuenta, extensamente documentada, Botifler4ever en su twitter.
Antes, rescatamos una pregunta de la entrevista de Pedro Jota Ramirez al presidente de entonces, José Luis Rodriguez Zapatero, sobre el Estatuto de Cataluña, que este impulsaba para acabar con la crispación, integrar a los nacionalistas catalanes y finiquitar los movimientos nacionalistas.
¿Se sentirá responsable si dentro de 10 años Cataluña inicia un proceso de ruptura con el Estado?
Dentro de 10 años España será más fuerte, Cataluña estará más integrada y usted y yo lo viviremos.
Ahora sí, vamos con el hilo.
La noche del 20 al 21 de mayo de 1981 la banda terrorista Terra Lliure secuestró y disparó al profesor Federico Jimenez Losantos al salir del instituto de Santa Coloma en el que trabajaba. En el siguiente hilo cuento las causas, consecuencias y significado de este acto criminal.
Se podría decir que esta historia empezó el 25 de enero de aquel año, cuando una serie de profesores e intelectuales, entre los que se encontraba Federico, redactan el Manifiesto por la Igualdad de Derechos Lingüísticos en Cataluña, conocido como Manifiesto de los 2300.
La mayoría de sus firmantes eran maestros militantes del sindicato FETE-UGT y en la órbita de la federación catalana del PSOE, que veían con preocupación su futuro laboral debido a las políticas nacionalistas en educación que estaba implantando Pujol desde su victoria en 1980.
El curso 80-81, los profesores interinos son obligados a firmar un documento conforme a su no renovación en caso de no aprobar los cursos de reciclaje de lengua catalana, y con el nuevo sistema de baremos el catalán se vuelve en la práctica indispensable para profesores nuevos.
Era una forma amable de enseñarle a los profesores hispanohablantes el camino hacia otras comunidades autónomas, y de asegurarse de que los puestos en educación son copados por licenciados en filología catalana, los únicos que entonces tenían el nivel adecuado.
Estos profesores agraviados lograron el apoyo de intelectuales como el catedrático de la UB Amando de Miguel, el Premio Nacional de Poesía Carlos Sahagún, el escritor Santiago Trancón, el traductor Alberto Cardín y el teniente de alcalde de Santa Coloma Jesús Vicente (PSC-PSOE).
En su manifiesto, denunciaron el intento por parte de los nacionalistas de intentar imponer una lengua por encima de otra, reivindicando el bilingüismo desde el respeto por ambas lenguas y en reconocimiento a la realidad social y cultural de Cataluña.
El manifiesto fue publicado en el madrileño Diario 16 que por entonces dirigía Pedro J. Ramírez ante la censura de la prensa catalana, y no se hizo público hasta el 12 de marzo debido a que los firmantes no querían que los nacionalistas los relacionasen con el 23-F.
Esta publicación supuso un auténtico terremoto para el pujolismo, incapaz de aceptar que se pusiera en duda su política lingüística. Rápidamente salieron a desmentir lo que denunciaban los firmantes con su habitual tono falsamente conciliador.
La directora general de política lingüística, Aina Moll, convocó a los firmantes a una reunión (que apenas duró cinco minutos) para exigirles explicaciones y entregarles un cuestionario con 23 preguntas redactadas a modo de comisaria lingüística.
No tardó en impulsarse desde el poder político un contramanifiesto, firmado por los habituales intelectuales orgánicos del nacionalismo y miembros de asociaciones satélite del pujolismo como Omnium Cultural o el Institut d’Estudis Catalans, hecho público el 16 de marzo.
El 14 de marzo, el presidente del parlamento regional, el reconocido racista Heribert Barrera (ERC) publicó una editorial en La Vanguardia considerando “inoportuna” la publicación e instando a “despreciar la actitud de esta gente”.
La prensa catalanista se lanzó a una brutal campaña de acoso y derribo contra el manifiesto, dirigida a satanizar y desacreditar a los firmantes con las acusaciones a las que ahora nos tienen acostumbrados: Anticatalanes, lerrouxistas, campaña orquestrada desde Madrit…
Lo peor estaba por llegar. El 18 de marzo se creó la Crida a la Solidaritat en Defensa de la Llengua, movimiento nacionalista radical en defensa de la política lingüística pujoliana que fue presentado en público el 24 de junio en un acto multitudinario en el Camp Nou(1).
Nacida originalmente como reacción al Manifiesto de los 2300, esta organización se dedicará a lo largo de los años 80 a denunciar a multitud de entidades y empresas por no usar el catalán, iniciando el acoso a los comercios que rotulaban en español.
Una de sus acciones vandálicas más espectaculares tuvo lugar el 20 de abril de 1985, cuando ochenta individuos ocuparon la estación de Sants para eliminar la rotulación en español. Dieciocho de ellos fueron detenidos y cuatro encarcelados por el fiscal Carlos Jiménez Villarejo.
La Crida puede ser considerada como una antecesora de la ANC como organización dedicada a la movilización callejera del nacionalismo, y de ella salieron algunos de sus líderes como Àngel Colom (ERC), Jordi Sànchez (ANC) o Carles Riera (CUP).
así como asociaciones chupasubvenciones como la Plataforma per la Llengua o la Coordinadora d’Associacions per la Llengua Catalana (CAL), consideradas herederas directas de La Crida.
Ya por entonces la Generalidad desviaba fraudulentamente el dinero público destinado a causas sociales como la lucha contra el desempleo a subvencionar el nacionalismo radical y violento, como destapó Albert Montagut en 1988. Como veis, poco ha cambiado.
Pero volvamos a 1981. En ese clima de crispación creado por la prensa catalanista dedicada a señalar sin piedad a los atrevidos disidentes, no tardaron en surgir voces más radicales que creían que había que dar un escarmiento a esa “panda de fachas”.
Los terroristas de Terra Lliure decidieron coger a uno de los firmantes para darle un “castigo ejemplar”. El elegido fue Federico Jiménez Losantos. No fue una elección casual. El joven maestro oriundo de Orihuela del Tremendal llevaba tiempo en el punto de mira del nacionalismo.
En concreto desde la publicación en 1978 de su ensayo “Lo que queda de España”, en el que criticaba la asunción por parte de la izquierda de la política cultural del nacionalismo y reivindicaba la figura de Azaña, entre otros.
Este texto ganó el I Premio de Ensayo de El Viejo Topo, por entonces revista de cabecera de la izquierda, que se comprometieron a publicarlo si Federico lo alargaba, por lo que le añadió algunos artículos más sobre la situación del español en Cataluña.
Sin embargo, a la editorial que presumía de pluralismo y libertad le parecieron impublicables los nuevos capítulos, al considerarlos un ataque a la lengua y la cultura catalanas. Ahí empezó la polémica y las descalificaciones contra Losantos.
Apareció entonces un manifiesto en su apoyo titulado “Contra cualquier censura”, entre cuyos firmantes destacan nombres como Gustavo Bueno, Labordeta, Antoni Tapies, Manuel Lara, Santiago Trancón, Jaime Gil de Biedma y José Manuel Broto.
Por ironías de la vida, el manifiesto contra la censura fue firmado incluso por algún nacionalista furibundo como Isabel-Clara Simó y Lluís Llach.
Finalmente, “Lo que queda de España” fue publicado por la editorial libertaria Ajoblanco, la competencia de El Viejo Topo, y presentado en Madrid (ante el miedo a sufrir un boicot violento si se presentaba en Cataluña) por Francisco Umbral.
El hecho de presentarlo en la capital dio la excusa perfecta a la prensa catalanista para acusar a Losantos y compañía de pertenecer a un complot contra Cataluña urdido desde Madrid, la misma cantinela que se ha repetido desde entonces cada vez que alguien les ha contradicho.
La feroz campaña de desprestigio que sufrió Federico por Lo que queda de España se puede considerar una antesala de lo que sufrirían los firmantes del Manifiesto de los 2300, y ya incluía todos los topicazos a los que aún hoy recurren para desacreditar a los disidentes.
Irónicamente se acusaba de franquista y anticatalán a alguien que había dirigido dos revistas, Diwan y Revista de Literatura, en las que siempre se habían publicado textos en catalán, y de hecho Diwan era la única revista editada fuera de Cataluña que publicaba textos en catalán.
No acabó ahí la cosa. A finales de 1979 Losantos volvió a protagonizar otra polémica con el catalanismo a raíz de su malograda aventura política con motivo de las elecciones regionales que iban a celebrarse en marzo de 1980.
Todo comenzó con el anuncio de Alejandro Rojas Marcos, líder del Partido Socialista de Andalucía (futuro Partido Andalucista), de su intención de presentarse en Cataluña para poder representar al millón de andaluces que vivían en Cataluña.
Eso suponía un peligro para el PSC, ya que podría perder a muchos votantes del PSOE descontentos con la deriva catalanista, así como al PSUC, cuyo caladero de votos eran los barrios obreros mayoritariamente andaluces, a pesar de sus coqueteos con el nacionalismo.
También para el pujolismo era un peligro, no porque fuera a quitarles votos (en los barrios obreros no rascaban nada, obviamente) sino porque suponía un desafío a su doctrina asimilacionista oficial.
Federico decidió apoyar al PSA de Rojas Marcos fundando un partido con las mismas siglas (Partido Socialista de Aragón) que iría en coalición con él. El objetivo final era crear un frente de defensa de la “emigración” hispanohablante frente a la política lingüística pujolista.
Nuevamente las terminales mediáticas del catalanismo y la izquierda servil los atacaron recurriendo al manido tópico de acusarlos de lerrouxistas (el que Lerroux y Rojas Marcos compartieran nombre dio mucho juego) y de querer dividir y enfrentar a la sociedad catalana.
Por desavenencias personales con Losantos, Rojas-Marcos se presentó finalmente en solitario. Obtuvo algo más de 70.000 votos y dos diputados.
Por todo esto, Jiménez Losantos se había ganado a pulso el título de “Enemigo de Catalunya” por el cual los terroristas eligieron darle un escarmiento la noche de aquel 20 de mayo, cuando lo esperaron a que saliera del Instituto Puig Castellar, en el que daba clases de lengua.
Los dos pistoleros siguieron en un Simca 1000 a Federico y a su compañera, Ángela, hasta Barcelona, donde a la altura de la calle Guillermo Tell pararon y les obligaron a subir a punta de pistola, para llevarlos Diagonal arriba hasta un descampado en Esplugas de Llobregat.
Ahí les ataron a un algarrobo, le pegaron el famoso tiro en la pierna a Losantos y se fueron dejándolo para que se desangrase. Por suerte Ángela logro librarse de sus ataduras y huir para avisar a la policía y a una ambulancia, que llegó a tiempo para salvar la vida de Federico.
En ambulancia salió Federico de esa Barcelona a la que había llegado años atrás en moto buscando libertad, y que ya no era la ciudad que conocía. Ningún partido ni ninguna institución nacionalista condenó el atentado que llevaban tiempo alentando desde sus medios.
Desde el entorno del PSUC llegaron al colmo de la indecencia tergiversando sus palabras para insinuar que el atentado lo había buscado el propio Losantos. ¿Os suena?.
La única excepción digna de elogio fue la del ex presidente Tarradellas, que condenó el atentado y afirmó que era el resultado de meses de demagogia, y se puso en contacto con Losantos vía carta ya que su estado de salud le impedía ir a visitarlo personalmente.
Los autores materiales del atentado fueron Pere Bascompte Carbonell y Jaume Fernàndez Calvet (sobrino de la diputada del PSC Anna Balletbó). Bascompte fue detenido, pero puesto en libertad por un error administrativo, que aprovechó para huir a Francia.
Calvet fue uno de los detenidos en 1985 junto a Carles Sastre, autor del atentado contra Bultó, como ya expliqué en este hilo.
Bascompte y otros terroristas, cínicamente autoproclamados “exiliados” (¿Os suena?) intentaron pedir asilo en Francia, mientras en Cataluña el nacionalismo radical se movilizaba en su apoyo.
Bascompte fue finalmente detenido en 1989 en Perpiñán. Sin embargo, las autoridades francesas negaron la extradición, y el terrorista se quedó en el país galo, de donde no volvió hasta 1999, una vez habían prescrito todas sus causas pendientes con la justicia española.
Bascompte fue uno de los terroristas de Terra Lliure que en 1991 pasaron a engrosar las filas de ERC tras las negociaciones con su secretario general Àngel Colom, veterano de la Crida a la Solidaritat como ya hemos visto más arriba.
Pero el ataque contra los firmantes del Manifiesto de los 2300 no cesó con el atentado contra Losantos. Durante los siguientes meses muchos de ellos recibieron amenazas de muerte telefónicas, pintadas amenazantes en sus domicilios…Hasta el punto que la mayoría abandonó Cataluña.
No fueron los únicos. En aquellos años, unos 16.000 maestros hispanohablantes abandonaron Cataluña, bien “voluntariamente” por no aguantar el ambiente cada vez más asfixiante, bien forzosamente al no haber pasado la criba lingüística impuesta por el pujolismo.
Fue una victoria aplastante del pujolismo, que no habría sido posible sin la agitación violenta. Después de lo que pasó con los firmantes del Manifiesto de los 2300 casi nadie se atrevió a plantar cara al proceso de “normalización” (imposición) lingüística.
Se iniciaba una década oscura en la que los vándalos de La Crida campaban a sus anchas cometiendo chantaje y saboteo contra empresas simbólicas españolas y cualquier comercio que rotulase en español, vendido como “acciones directas no violentas” por una prensa a su servicio.
Mientras la administración imponía la inmersión lingüística ya sin oposición más allá de alguna anecdótica apelación en los tribunales. Los maestros que no se fueron aceptaron que no les quedaba más remedio que agachar la cabeza ante el nacionalismo hegemónico.
Y así es como se impuso el falso “consenso social” pujoliano: Mediante la violencia, física y simbólica, y el avasallamiento del que no pensase igual. Mediante la derrota humillante de una parte de la sociedad. Por eso se tienen que dar a conocer estas historias. Fin del hilo.

Poco más que añadir, el Estado desapareció de Cataluña, el PSC hizo lo que siempre han hecho los socialistas con España; traicionarla, y España entró sin saberlo en un callejón sin salida del que todavía desconocemos las consecuencias.
Hay que decir que, por ejemplo, el PSC ha gobernado años Barcelona, Lérida e, incluso, la Comunidad Autónoma de Cataluña sin que la mayoría de sus votantes, de origen andaluz, hayan podido estudiar en la escuela en su lengua materna, el español.
Muchos políticos catalanes han colaborado de diversas maneras con los grupos terroristas ETA y Terra Lliure, y la Iglesia se ha entregado al nacionalismo permitiendo, entre otras cosas, la profanación periódica de sus templos.
Vuelvo a repetir; con estos “chicos” el obispo de Solsona, Xavier Novell, y el nuevo Arzobispo de Tarragona, el profanador Joan Planellas, flamante nombramiento de Francisco. Su particular contribución a la paz en esta tierra.
Pues sí, parece que tenemos problemas muy serios, y que vienen curvas.
Sólo la oración puede darle la vuelta a esto.
Capitán Ryder
  1. Conozco multitud de españoles aficionados al Barcelona. Cada acción de este club deportivo en aras de la destrucción de España sólo arranca gemidos en el sentido “no hay que mezclar política con deporte”. Da igual que sea este club el que lo haga constantemente, en el peor sentido de la palabra.

sábado, 25 de mayo de 2019

Una reflexión sobre las elecciones del 26M desde una pequeña web sin amos políticos (Elentir)


APUNTES SOBRE EL VOTO DE UN ESPAÑOL QUE VIVE DE SU TRABAJO Y SIN SUBVENCIONES

Este domingo los españoles estamos convocados otra vez a las urnas para votar en las elecciones locales y autonómicas y en las elecciones europeas. Una convocatoria en la que nos jugamos mucho.
La satisfacción de hablar con libertad y sin deber favores a políticos
Tal vez estas líneas no lleguen a muchos. Yo soy un español más, un simple trabajador autónomo que vive de su trabajo, que no recibe ni un céntimo en subvenciones y que paga religiosamente sus impuestos (con los que se alimentan tantos chiringuitos). No estoy afiliado a ningún partido. Este blog no tiene publicidad, ni recibe donativos ni ayudas públicas de ningún tipo: sólo lo sostengo yo con mis ingresos. Una de las grandes satisfacciones que me da Contando Estrelas es, precisamente, la gran libertad e independencia que tengo a la hora de escribir: nadie me dicta lo que debo publicar o lo que debo callar, y por eso no veis aquí las noticias-basura que publican por encargo ciertos medios que pagan, a base de obediencia, los favores políticos que reciben en forma de subvenciones y publicidad institucional. Esta es una web con escasos recursos pero sin más señores que Dios, el honor y mi conciencia. Y así seguirá mientras dependa de mí.
Un voto que no servirá para premiar a quienes se ríen de sus votantes
En diciembre de 2017 publiqué aquí una entrada exponiendo mis principios. Mantengo todo lo publicado, e iré a votar este domingo por patriotismo y por responsabilidad: no quiero desentenderme del futuro de mi Patria dejando que otros decidan por mí. Eso sí, no votaré a los que buscan el voto del miedo, un voto en el que los votantes sean rehenes y esclavos de sus temores. Me niego a premiar con mi apoyo a quienes nos piden el voto para derrotar a la izquierda y después hacen políticas progres en las instituciones. Basta ya de engaños. Basta ya de reírse de los votantes para luego reclamarles el voto de malos modos. De hecho, el PP ya ha dicho que formará una “coalición” con los socialistas en Bruselas: no lo harán con mi voto. Se acabaron los tiempos de votar con la nariz tapada. Me niego a votar a los que apoyan una monstruosidad como el aborto, a los que imponen la ideología de género, a los que han asumido las tesis del feminismo radical, a los que dejaron intacta la ley de memoria histórica, a los que buscan callarnos con la corrección política y a los que permiten que el separatismo campe a sus anchas.
Un voto para quienes nos han devuelto la voz en el Congreso
Este domingo no votaré con miedo ni al mal menor. Votaré por convicción, con esperanza y con ilusión. Por ello, este domingo volveré a votar a Vox, porque es el partido que defiende mis principios y porque lo hace dando, sin complejos, la batalla de las ideas de la que otros se retiraron. Este partido nos ha devuelto la voz a quienes nos habíamos quedado mudos en el Congresoy quiero que también volvamos a tenerla en Bruselas y en las demás instituciones. Pero más allá de que los planteamientos de Vox se identifican con lo que vengo defendiendo desde hace años, también importan las personas que defienden esas ideas: personas honradas como Santiago Abascal, José Antonio Ortega Lara, Javier Ortega Smith, Francisco José Contreras, Alicia Rubio, Gádor Joya, Rocío Monasterio, Iván Espinosa de los Monteros y Jorge Buxadé. Por lo demás, Roma no se construyó en un día. No cabe esperar grandes cambios tras estas elecciones, pero este domingo puede ser el inicio de un camino que nos devuelva aquello que perdimos: una España soberana y fuerte en una Europa que respete la dignidad humana, la familia y la libertad.
ELENTIR

lunes, 20 de mayo de 2019

Cinco razones para no ser de izquierdas (Una lectura que nos debe llevar a votar a VOX en las próximas elecciones del 26 de mayo) [Comentado por José Martí]



Duración 11:18 minutos

Aunque se dan sólo cinco razones, se podrían dar bastantes más. Éstas son las que anota aquí Agustín Laje, en este corto video. 


Según él -y los hechos lo confirman- LA IZQUIERDA:

1. Es la ideología más asesina de la historia.

2. Recorta todo tipo de libertades: económica, de prensa, etc

3. Destruye la economía y el consumo

4. Destruye la calidad de vida y empobrece a la gente.

5. Es la religión laica de los resentidos sociales.


Se podrían apuntar más razones, pero sólo éstas son más que suficientes como para no votar a partidos como Podemos y PSOE. Es más: aunque PP y Ciudadanos no se "consideran" de izquierdas, su praxis, lo que la gente ha observado durante el tiempo en el que el PP estaba en el Gobierno fue una continuidad de la política de izquierdas, en asuntos sociales tan básicos como es la negación del derecho a la vida (lo que aparece en la ley es "derecho" al aborto), introducción de la perniciosa ideología de género en los colegios y en la vida pública, apoyo al lobby gay, propuestas de legalización de la eutanasia, etc ... (todo esto en partidos que "decimos" de derechas).

Tenemos muy presente en el tiempo, la época del gobierno de Zapatero, que supuso un incremento de más de tres millones de parados. Y la llegada de Rajoy al poder no cambió nada en lo que respecta a las políticas sociales, en sanidad y educación especialmente.

Antes no había alternativas. Hoy sí la hay. Tenemos un partido contra el que todos luchan y al que califican de Ultraderecha: VOX. Mediante esa calificación se pretende influir en la gente , de modo negativo, para que no se les vote; pero lo cierto y verdad es que se trata de un partido que es cualquier cosa, menos violento. La violencia es la que el resto de partidos ejerce sobre él. 
Todo son obstáculos. No se les permite que salgan en el debate de televisión junto al resto de partidos. Se les demoniza "injustamente", mediante calumnias y ataques a sus sedes, etc... Y todo ello, ¿por qué? Sencillamente, para que predomine el "pensamiento único", común al resto de partidos, un pensamiento del que nadie puede discrepar y menos todavía si continúan los socialistas y comunistas en el Poder. Su modo de hacer política es siempre coercitivo y como telón de fondo el odio. 

Aconsejo leer las entradas en este blog referentes a las votaciones, que titulé "A propósito del VOTO CATÓLICO en las elecciones generales del 28 de abril de 2019". Lo que se dijo entonces vale también para las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo de 2019. 

Es muy importante nuestro voto en relación al tipo de sociedad que queremos construir. Votar a PSOE, Podemos, PP o Ciudadanos es un VOTO PERDIDO, en el sentido de que supone una pérdida para el bien común de España y de todos los españoles. 

Tal y como están hoy las cosas, el único modo eficaz que yo veo (humanamente hablando, claro está) para hacer frente a la política del Pensamiento Único es el voto a VOX. 

Evidentemente ésta es una opinión, pero respaldada por los hechos, esos hechos que se quieren borrar de la Memoria, a base de construir otra Memoria histórica alternativa y falsa.  Si  lo que queremos para España y para nuestros hijos y nietos, es un país de libertad y de auténtico progreso ... yo votaría a VOX. Tiempo habrá de "meterse" con VOX si no cumplen sus promesas; pero para ello hay que darles la oportunidad de que lleguen al Poder y podemos contribuir a ello votándoles. Ésta es mi opinión.

José Martí 

domingo, 19 de mayo de 2019

Cuatro grandes principios que marcan la diferencia entre Vox y el ‘centrismo’ progre (Elentir)



Como votante de Vox empiezo a estar harto de ver a políticos, periodistas y tertulianos afines a otros partidos, que hablan de una ansiada unidad del centro-derecha pero sin explicar para qué.

González Pons anuncia que el PP formará una ‘coalición’ con los socialistas en la UE
Por fin más de dos millones de españoles volvemos a tener voz en las instituciones

¿Si no existiese Vox sus votantes apoyaríamos en masa al PP o a Cs?

Ayer mismo Eduardo Inda publicó un artículo en Ok Diario titulado “O el centroderecha se une o no será nunca nada”. El artículo estaba encabezado por una foto de Pablo Casado en primer plano con Albert Rivera detrás: ni una referencia visual a Vox, a pesar de ser en el plano ideológico el único partido netamente liberal-conservador y de centro-derecha que queda en el arco parlamentario. Al hablar sobre el partido de Abascal, Inda dice: “si Vox no existiera o estuviera integrado en el PP, los de la calle Génova 13 hubieran estado cerca del empate técnico con el Partido Socialista. Y que Casado y Rivera hubieran tocado con los dedos la ansiada mayoría absoluta”. Este señor parte de un error muy común: piensa que los votantes de Vox optaríamos en masa por el PP y Cs de no presentarse el partido de Abascal, como si la aparición de Vox hubiese sido un capricho de algunos. Y no es así. Vox era lo que estábamos esperando muchos votantes hartos de un centro-derecha cada vez más progre. Y no tenemos ningún motivo para volver al redil de quienes usaron nuestros votos para consolidar la hegemonía política e ideológica de la izquierda.

Algunos ejemplos de las grandes diferencias ideológicas entre Vox y PP-Cs

Inda también demuestra ignorar las razones de nuestro hartazgo del PP. Por ejemplo, reduce las diferencias de los programas económicos de Vox, PP y Cs a “el nivel de bajada de los impuestos”, como si eso fuese un tema baladí. Pero lo más engañoso lo dice a continuación: “En materia social les une infinitamente más de lo que les separa, especialmente a Casado y Rivera, y en el espinoso y tan de actualidad apartado territorial las diferencias entre los tres son prácticamente imperceptibles. En materia educativa también son primos hermanos: quieren un sistema único en toda España, similar al exitoso modelo francés, y acabar con la dictadura lingüística en las aulas”. Esto que dice Inda no es verdad.Como suele ser una confusión muy común y que algunos incluso se esfuerzan en promover, explicaré a continuación las principales diferencias ideológicas entre los tres.

1. Defensa del derecho a la vida

Sin duda, las diferencias más abismales entre los tres partidos son las que figuran en este epígrafe. En su programa “100 medidas para la España Viva” (ver PDF), Vox es muy claro: “Defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural”. Desde ese partido se han defendido planteamientos muy valientes en defensa de la vida de los hijos por nacer. Por el contrario, en el acuerdo firmado por PSOE y Cs en febrero de 2016 (ver PDF), el partido de Albert Rivera aceptó expresamente mantener la vigente Ley del Aborto de 2010 (página 40), que suprime toda protección legal para el derecho a la vida de los hijos por nacer. A su vez, y a pesar de tener una mayoría absoluta, el Gobierno de Rajoy mantuvo esa ley incumpliendo el propio programa del PP. En marzo de 2019 Pablo Casado se mostró dispuesto a apoyar esa ley si el TC la avala. Así mismo, el programa electoral del PP para las elecciones generales de 2019 (ver PDF) omitió toda referencia a esta cuestión. Ese partido ha asumido hasta tal punto las tesis abortistas de la izquierda que en el pacto con Vox para Andalucía el PP exigió suprimir la palabra “natalidad”.

2. Defensa de la libertad de educación

En las ya citadas “100 medidas para la España Viva” (ver PDF), Vox propone medidas netamente liberales que devolverían la capacidad de elección a las familias y reducirían drásticamente el control político sobre los centros escolares: cheque escolar (punto 61), derecho a elegir la lengua de escolarización de los hijos (62) y “PIN parental” para evitar el adoctrinamiento ideológico en las aulas (63). Así mismo, reclama la devolución de las competencias educativas al Estado. Por el contrario, el PP y Cs no suscriben nada de esto. En las comunidades bilingües tanto el PP como Cs apoyan el timo del “trilingüismo”, en el que los políticos siguen decidiendo por las familias. Por otra parte, el PP y Cs han votado junto al PSOE y Podemos a favor de graves ataques a la libertad de educación, como la ley de adoctrinamiento aprobada en Madrid en 2016. Recordemos, además, que en el pacto que firmaron en diciembre, PP y Cs acordaron dejar intactas las leyes creadas por el PSOE para imponer sus ideas en los colegios de Andalucía.

3. Defensa de la igualdad ante la ley

Otro punto en el que hay grandes diferencias entre los tres partidos es el relativo a la igualdad ante la ley. En sus “100 medidas para la España Viva” (ver PDF), Vox propone (70): “Derogación ley de violencia de género y de toda norma que discrimine a un sexo de otro. En su lugar, promulgar una ley de violencia intrafamiliar que proteja por igual a ancianos, hombres, mujeres y niños”. También señala lo siguiente: “Transformar el Estado autonómico en un Estado de Derecho unitario que promueva la igualdad y la solidaridad en vez de los privilegios y la división“. Ni el PP ni Cs suscriben estos puntos. Tanto el PP como Cs apoyan el Estado autonómico que ha generado una gran desigualdad entre españoles. Así mismo, el PP y Cs han apoyado al PSOE para instaurar leyes de desigualdad entre sexos que se basan en las tesis izquierdistas de la ideología de género.

4. Defensa de la soberanía nacional

Los tres partidos también difieren notablemente en su idea del papel que debe jugar nuestra Nación en la Unión Europea. En su programa electoral para las elecciones europeas de 2019 (ver PDF), Vox afirma: “queremos apostar por una Europa fuerte que respete la idiosincrasia de cada uno de los Estados que la conforman y su soberanía nacional y que sea un medio adecuado para intensificar las relaciones de todo orden”. Por el contrario, el programa base del Partido Popular Europeo (ver PDF), adoptado en 2012 y que el PP español enlaza en un lugar destacado en su web europea, señala lo siguiente (pág. 13): “los Estados, deben compartir su soberanía con organizaciones internacionales y supranacionales; de este modo, deben aunar sus capacidades a través de asociaciones y convenciones internacionales y mundiales”. Ciudadanos ha ido más allá defendiendo unos “Estados Unidos de Europa” e incluso proponiendo pasar el control de nuestras fronteras a la UE.

El PP ya ha anunciado que se aliará con los socialistas en Bruselas

Pero sin duda alguna, la prueba que mejor demuestra con quién tienen la voluntad de aliarse tanto PP como Cs en Europa es el siguiente vídeo en el que Esteban González Pons (PP) reconoce que su partido hará una coalición con el PSOE en Bruselas, a la que invitarán a Cs:

Duración: 62 seg

Así pues, hay dos partidos, PP y Cs, cada vez más sometidos a los dictados de la izquierda y dispuestos a aliarse con los socialistas en Bruselas (con lo que implica de suscribir la agenda ideológica de la izquierda, como ya vienen haciendo en España), y por otro lado hay un partido de centro-derecha que no se somete a los dictados de la izquierda: Vox. ¿De qué unidad habla Eduardo Inda, cuando el PP busca coaliciones en Bruselas con los socialistas, dejando claro -como lo indicó González Pons- que ni siquiera se reunirán con Vox? Basta ya de engañar a los votantes de centro-derecha para luego hacer políticas de izquierdas con nuestros votos.
Elentir

viernes, 10 de mayo de 2019

ELECCIONES EN ESPAÑA (I) [Capitán Ryder]



Hace un par de semanas hubo elecciones en España.
He leído muchos análisis, casi todos dejan de lado cuestiones morales, parece que no son de importancia cuando en realidad lo explican todo.
En otra entrada realizaré un análisis al uso pero antes un hilo de twitter que explica más cosas que 100 editoriales de los grandes medios.
Tomado de EugeniodOrs twitter.
Ayer se cumplió el 42 aniversario de José María Bultó
Lunes, 9 de mayo de 1977. 13.00 horas. José María echa un último vistazo al proyecto para la modernización de una de las plantas de hilado que tiene en la fábrica de Vilanova i la Geltrú. En una hora almuerza con su hermana, así que decide apresurarse. Tiene ganas de verla.
Hace un día radiante. Desde su oficina hasta la casa de su cuñado, en la calle Muntaner, hay un paseo largo, pero decide darlo. Le gusta pasear. Desde que enviudó pasea mucho. Aprovecha para pensar, para rezar, para contemplar. Le encanta contemplar.
14.00 horas. Llega a casa de su hermana. Besos, abrazos, apretón de manos con su cuñado, se tienen verdadero aprecio. La mesa ya está dispuesta, así que rápidamente se sientan. Charlan sobre la actualidad, sobre los sobrinos, sobre algunos negocios comunes.
La familia está muy unida. Son seis hermanos. Él siempre se ha dedicado al mundo del textil. Es su mundo. Aunque también tiene acciones de una gran empresa química. Adora su trabajo. A su hermano, en cambio, le tiran más las motos. Tanto, que montó una fábrica de motos.
Tras comerse los tres un delicioso pollo al horno, su hermana se levanta de la mesa y se dirige a la cocina. En ese momento, suena el telefonillo del portal. Lo atiende. “¿Quién es?”, le pregunta su hermano. “Vienen a hacer una revisión del gas”, le contesta ella.
Al cabo de un minuto, tocan el timbre. La hermana abre la puerta. En ese momento la arrollan seis personas, con monos de trabajo, a punta de pistola. El grito de ella alarma a José María y a su cuñado, que no tienen tiempo de reaccionar.
“Quédense sentados y todo irá bien”. Les amenazan. “Usted, venga conmigo”. Se llevan a José María a una habitación. “Quítese la camisa”. Él obedece a regañadientes. “Carles, pónselo”. Carles es un joven que va con el grupo.
Lleva una mochila en su espalda. De la mochila saca, con mucho cuidado, una especie de cajita. Pide ayuda a una compañera. “Montse, ayúdame con el esparadrapo”. Entre Carles y Montse adhieren esa cajita, con esparadrapo, a la axila izquierda de José María.
“Póngase de nuevo la camisa”, le ordenan. En ese momento, el que le apunta con la pistola saca un papel de su bolsillo y se lo da. “Queremos 500 millones de pesetas. Cuando nos los pague, recibirá indicaciones de cómo quitarse la bomba que acabamos de adosarle al pecho”.
“En este papel están las indicaciones de cómo realizar el pago, tiene 24 horas”. José María, hombre enérgico, les dice que no piensa pagar nada. “No intente quitarse usted la bomba. Explotará”. “¡Vámonos!”, ordena al resto del grupo. Carles recoge su mochila y salen todos.
José María, asustado pero rabiosamente sofocado, sale de la habitación. “¿Qué ha ocurrido? ¿Estás bien?”, su hermana está completamente alterada. “Escuchad, no digáis a nadie nada de esto, tengo que irme, no os preocupéis, todo está bien”. José María sale rápidamente de la casa.
Ya en la calle, se sube a un taxi. “A la avenida de Pedralbes, por favor, rápido”. Quiere ir a su casa. Desde allí llamará a su hijo y a su hermano para que le acompañen a comisaría. Nota la caja en la axila. La siente. Intenta no rozarla con el brazo. Está sudando. Tiembla.
16.00 horas. Llega a su casa. Ordena a la mujer de servicio que llame a su hermano y a su hijo. Él, mientras tanto, sube al piso de arriba. Quiere lavarse la cara, cambiarse de ropa. Entra en el lavabo. Delante del espejo, se quita poco a poco la camisa.
Ahí está. La cajita. En su axila. Abre el grifo. En el momento de agacharse para lavarse la cara, en un movimiento involuntario un trocito de esparadrapo se le engancha en el brazo y hace que la cajita se mueva. Oye un clic. Es lo último que oye.
Después, una fuerte explosión. Rápidamente, sube la mujer de servicio. El escenario es estremecedor: las paredes, llenas de sangre y vísceras. Los intestinos sobre el suelo, junto a la parte inferior del cuerpo. Los brazos mutilados, junto a la cabeza destrozada.
1 de julio de 1977. Han pasado dos meses desde el trágico atentado. Carles, el que le puso la bomba, es detenido junto a Montse, Àlvar y Josep Lluís. El joven Carles. Un chaval.
Cinco meses después fue puesto en libertad por la Ley de Amnistía. Y dos meses después, volvió a cometer un idéntico asesinato: esta vez fue el exalcalde de Barcelona, Joaquín Viola, y su esposa. La bomba le explotó tan solo ponérsela y el matrimonio murió en el acto.
Carles huyó a Francia, pero en 1985 fue detenido en Puigcerdá. Ese mismo año fue condenado a 48 años de prisión por el asesinato de José María Bultó y por pertenencia a banda armada. Fue absuelto de los otros dos asesinatos por falta de pruebas. Fue liberado en 1996.
Este es Carles. Carles Sastre. Secretario general del sindicato independentista CSC. Militante de la CUP (ha formado parte de su candidatura en las últimas elecciones). Lo pasean por teles, radios y periódicos.
Hasta el presidente Torra se hace fotos con él. En TV3 lo presentan como “patriota” y “gran reserva” del independentismo.
Recordad: los intestinos en el suelo. Los brazos mutilados junto a la cabeza destrozada. Las vísceras en las paredes. El cuerpo despedazado de José María Bultó.
En su memoria. La de José María Bultó, la de Joaquín Viola y la de Montserrat Tarragona, asesinados vilmente por el grupo terrorista EPOCA, germen de Terra Lliure. Los asesinos de ayer son los patriotas de hoy.
(El relato contiene detalles de ficción que en nada afectan a la exposición principal de los hechos.)
Algunas notas del Capitán
  • Observese que la Ley de Amnistia llevó a que otros ciudadanos inocentes pagasen con su vida el desatino de los políticos. Liberación por narices, asesinato de dos personas.
  • Esta persona es ahora entrevistada en la TV pública catalana.
  • Recibido por las autoridades. En la foto con el presidente de la Generalitat.
  • Con estos mimbres quieren construir un país el obispo de Solsona, Xavier Novell, y el nuevo Arzobispo de Tarragona, el profanador Joan Planellas. Por cierto, el obispo de Solsona fue otro “pequeñísimo error” de Benedicto XVI, porque antes de Francisco todo funcionaba como un tiro. Del segundo, daremos las gracias a Francisco otro día.
  • Lo dicho, es suficiente una anécdota para reflejar la indigencia moral en la que ha caído un país.
  • Foto de Joaquín Viola y Monserrat Tarragona.
  • Cumplamos el deseo de la familia, una oración por su alma y por la de todas las víctimas del terrorismo.