BIENVENIDO A ESTE BLOG, QUIENQUIERA QUE SEAS



lunes, 14 de mayo de 2018

Otra vez el Pacto de Metz (XIV). Fátima traicionada (Capitán Ryder)


Milagro del sol

Mayo del 2017. Pongo la televisión, el noticiero se dirige a Fátima. Un minuto de telediario para recordarnos el centenario de las apariciones. Un grupo de jóvenes cantan aquello de “esta es la juventud del Papa”. Sigue la cámara, una mujer de unos 60 años afirma muy rotunda “Fátima no se explica, se siente“.
Me quedo pensando, confuso. Creo que ambas representaciones hablan muy bien de la tragedia del catolicismo moderno.
El mensaje más dramático del siglo XX reducido a puro sentimentalismo, un centenario que se puede celebrar “porque vamos a ver al Papa”. Un selfie, dos canciones, y a casa.
Tal vez sea lógico pues Fátima representa todo lo contrario de la Iglesia post-conciliar. Es necesario oscurecerla para que las vergüenzas no queden al aire. Pero los hechos están ahí, tozudos.
La mayoría de las apariciones marianas hablan de oración y sacrificio, pero Fátima dice algo más, en realidad, mucho más. ¿Por qué? Tal vez porque estábamos en puertas de un tiempo especial, de un peligro especial, y el Señor, a pesar de nuestra infidelidad, acudía presto en nuestra ayuda. ¿Cuáles son los hechos que han hecho tan especial este siglo?.
En realidad, podríamos hablar de un único hecho que sólo se entiende si se ve el proceso de estos años: la gran apostasía, en la que la jerarquía de la Iglesia ha jugado un papel clave. No es posible entenderlo de otro modo. Comentamos las claves del mensaje:
1- Citábamos el otro día al Cardenal Marx y las claves por la que se guiaba para interpretar la actualidad. En concreto, se remitía a Karl Marx como brújula adecuada de los hechos actuales. Fátima pone de manifiesto exactamente lo contrario. El pensamiento del hombre no está determinado por la materia; cada hombre no está determinado por la sociedad; y la sociedad no está determinada por la economía. Dicho de otro modo, Dios es el verdadero Señor de la historia. De ahí que la Virgen dijese explícitamente que “la Segunda Guerra mundial vendrá por los pecados de los hombres”. La Guerra no es el mal. El mal, el pecado, es el que trae la guerra.
2- Para subrayar su mensaje, para vencer nuestra incredulidad, se valió de un signo y una profecía. El primero se pudo ver in situ por más de 70.000 personas, y el Señor, en su infinita misericordia, lo anunció con antelación. Eso produjo una riada de periodistas, muchos pertenecientes a los principales diarios masónicos, que habían acudido prestos a la burla, y que hizo que la noticia de la danza del Sol se extendiese por todo el mundo. Desgraciadamente, se constató una vez más la advertencia evangélica, “si no hacen caso a los profetas ni aunque resucitase un muerto creerían.” La segunda fue la Guerra más sangrienta que la humanidad ha visto y que anunciada con décadas de antelación. Ni aún así nos hemos enmendado.
3- Para evitar que “Rusia esparciese sus errores por el mundo” dio unas instrucciones precisas: consagrar Rusia a su Inmaculado Corazón, la devoción de los cinco primeros sábados de cada mes, la reparación de los pecados propios y ajenos, la urgencia de la conversión etc.
4- Al mismo tiempo, recordaba ese examen final del que nadie se ha de librar, el juicio final, con el destino eterno que ya sufrían muchas almas.
Desde entonces muchas cosas han sucedido en el mundo, también en la Iglesia:
  • Rusia ha esparcido sus errores por el mundo. Fue la primera nación en aprobar el aborto, la hambruna como arma política, los gulags a gran escala y la propaganda política masiva para el lavado de mentes y la quiebra de voluntades.
  • La Segunda Guerra Mundial tal y como se había profetizado. Guerra, y postguerra(1), que dejó atrocidades que nunca hubiésemos imaginado.
  • La Iglesia no ha consagrado Rusia al Inmaculado Corazón de María(2)
  • Sor Lucía comentó que el tercer secreto debía hacerse público hacia 1960. Juan XXIII no lo hizo publico.
  • En el discurso inaugural del Concilio Vaticano II Juan XXIII habló de “profetas de calamidades” para referirse a los 3 pastorcitos. Todo el mundo confirma, dentro y fuera del Vaticano, que los destinatarios de ese mensaje eran los niños.
  • En cambio, Juan XXIII hablaba de un nuevo Pentecostés fruto de un aggiornamento que acercaría al hombre moderno a la Iglesia.
  • La Iglesia ha quedado reducida a la insignificancia durante este tiempo.
  • Los errores de Rusia están más vivos que nunca: la idolatría del poder, la primacía de la política, de tal forma, que la verdad es lo que diga el poder en cada momento. Quien discrepe se enfrenta a la muerte social, en muchos aspectos mucho peor que la física.
Como colofón anecdótico a este proceso estarían las palabras de Francisco en Fátima, pero ¡ojo!, palabras que dan la clave, creo que inconscientemente, de lo que ha pasado en la Iglesia respecto a Fátima, la reinterpretación del mensaje para que no suponga una amenaza. Dice Francisco “Cometemos una gran injusticia contra Dios y su gracia cuando afirmamos en primer lugar que los pecados son castigados por su juicio, sin anteponer —como enseña el Evangelio— que son perdonados por su misericordia. Hay que anteponer la misericordia al juicio y, en cualquier caso, el juicio de Dios siempre se realiza a la luz de su misericordia. Por supuesto, la misericordia de Dios no niega la justicia, porque Jesús cargó sobre sí las consecuencias de nuestro pecado junto con su castigo conveniente. Él no negó el pecado, pero pagó por nosotros en la cruz. Y así, por la fe que nos une a la cruz de Cristo, quedamos libres de nuestros pecados; dejemos de lado cualquier clase de miedo y temor, porque eso no es propio de quien se siente amado (cf. 1 Jn 4,18)”.
Es decir, tomar las palabras de la Virgen en su exacto contenido sería cometer una injusticia con Dios. Nada hay que temer, nos dicen, el mensaje es un error.
Capitán Ryder
(1) Las atrocidades no acabaron con la guerra. En Francia se calcula que hubo más de 10.000 asesinatos políticos, la mayoría atribuidos a los comunistas. De la violaciones del ejército ruso, también el americano, en Alemania, ya ni hablamos.
(2) Este tema dará para otro post. Es largo de explicar