BIENVENIDO A ESTE BLOG, QUIENQUIERA QUE SEAS



viernes, 8 de mayo de 2020

Comunicado de Mons. Viganó respecto a la firma del Card. Sarah



Asunto: Retirada de la adhesión de S.E. el cardenal Robert Sarah al Llamamiento para la Iglesia y para el mundo difundido ayer 7 de mayo.

En estos momentos de gravísima crisis para la Iglesia y el mundo es mi deseo mantener una actitud de profunda caridad hacia mi hermano en Cristo, el cardenal Robert Sarah, a quien he perdonado inmediatamente el serio agravio cometido contra la verdad y contra mi persona. Con todo, la verdadera caridad no puede prescindir la verdad, ya que en ella se fundamenta. Por consiguiente, tengo el deber, también por corrección fraterna, de dar a conocer los hechos, tal como han sucedido, con relación a la firma del Llamamiento por parte del cardenal Sarah.

Lunes 4 de mayo, 16 horas

He mantenido una conversación telefónica con Su Eminencia el cardenal Sarah. La llamada fue grabada y duró 6 minutos y 25 segundos.

Con relación al texto del Llamamiento, el cardenal declara: «Me parece algo muy serio. Creo que este llamamiento podrá hacer mucho bien, porque obligará a reflexionar y a tomar partido; estoy de acuerdo con que se publique lo antes posible.»

Pregunté a Su Eminencia si tenía intención de firmarlo, y respondió: «Sí, doy consentimiento para incluir mi nombre, porque es una batalla que debemos librar unidos, no sólo por la Iglesia sino toda la humanidad».

Jueves 7 de mayo

A las 8:43 telefoneé a Su Eminencia para preguntarle si tenía el número de teléfono del cardenal Gerhard Ludwig Müller, el cual tuvo la cortesía de enviarme enseguida vía SMS. En el curso de la conversación, que duró 4 minutos, el cardenal no dijo nada de que desease retirar su firma.

A las 15 horas empecé a enviar el llamamiento a las agencias de prensa, el blog y diversos periódicos, junto con la lista de los firmantes, cardenal Sarah incluido.

A las 17:48 recibí un SMS del cardenal del que no tuve noticia hasta aproximadamente una hora y media más tarde. En el momento en que me llegó el mensaje estaba enfrascado en la difusión del llamamiento y no me di cuenta de que me había mandado Su Eminencia un mensaje, por lo que no me fue posible tener noticia de su contenido.

A las 19:37 me telefoneó el cardenal para preguntarme si había visto su mensaje. Le respondí que no.

Éste es el texto de su mensaje:

«Estimadísima Excelencia: Como todavía estoy en funciones en la Curia Romana, una persona del círculo de mis amistades me ha desaconsejado que firme el Llamamiento que usted me ha propuesto. Tal vez sería mejor por esta vez retirar mi nombre. Me desagrada mucho hacerlo. Usted conoce mi amistad y mi cercanía a su persona. Gracias por su comprensión. Roberto cardenal Sarah.»

El cardenal me informó por teléfono de que tenía intención de retirar su nombre de la lista de firmas. Consternado y apenado, hice saber a Su Eminencia que desde hacía cuatro horas el Llamamiento y las firmas habían tenido una difusión universal. La conversación concluyó sin que Su Eminencia me propusiese o sugiriese solución alguna.

Entre otras cosas, se habría podido acordar un comunicado conjunto haciendo pública la decisión del cardenal de retirar su adhesión. No se hizo nada por el estilo. Nos despedimos cordialmente con sentimientos de estima y mutuo respaldo. Ante los hechos consumados, a los que ninguno de los dos hemos podido encontrar una solución, me permití animar a Su Eminencia haciéndole saber que su adhesión al Llamamiento sería de consuelo y aliento para muchísimos fieles.

Con sorpresa y gran pesar, he sabido después que Su Eminencia se ha valido de su cuenta de Twitter, sin darme previo aviso, para hacer declaraciones en grave detrimento de la verdad y de mi persona.

Me desagrada mucho que esta situación, debida a la debilidad humana y por la que no guardo rencor alguno a quien la ha causado, aparte la atención de aquello que debe ser motivo de gran preocupación en estos dramáticos momentos.

Confirmo que el nombre de Su Eminencia el cardenal Robert Sarah ha sido prontamente retirado del sitio oficial del Llamamiento, como se puede verificar en veritas liberavit vos. info

+ Carlo Maria Viganò, arzobispo y nuncio apostólico

(Traducido por Bruno de la Inmaculada/Adelante la Fe)

NOTICIAS VARIAS 8 de mayo de 2020

ADELANTE LA FE 

Impactante: aparecen nuevas pruebas históricas que corroboran la relación de Bugnini con la Masonería. Se dan nombres

INFOCATÓLICA 


Sexo, mujeres, poder. Los tres desafíos que Alemania lanza a la Iglesia

Lo demás carece de importancia (Bruno Moreno)

INFOVATICANA 


Aborto y LGTB en las aulas: ¿qué dicen los obispos ingleses?

“A todo el mundo nos llega la hora” (Padre Santiago Martín)

¿Cuándo es esencial la Eucaristía? (Carlos Esteban)

Benedicto XVI: Abdiqué, pero retuve la “dimensión espiritual” del Papado (Carlos Esteban)


Selección por José Martí

Cardenales y obispos firman un importante documento sobre el coronavirus



En un documento adelantado en primicia en español por InfoVaticana, los cardenales Pujats, Muller y Zen, además de decenas de obispos, sacerdotes y académicos hacen un llamamiento para detener el avance de determinadas prácticas totalitarias que se instauran en gran parte de las naciones cristianas con motivo del Covid19. Aunque en un primer momento aparecía como firmante el cardenal Robert Sarah, éste lo ha negado a través de Twitter


“No permitamos que con la excusa de un virus se borren siglos de civilización cristiana para instaurar una odiosa tiranía tecnológica en que personas sin nombre y sin rostro decidan la suerte del mundo confinándonos a una realidad virtual”. 


“La criminalización de las relaciones personales y sociales debe considerarse asimismo una parte inaceptable del proyecto de quienes promueven el aislamiento de las personas para manipularlas y dominarlas mejor.” 


“Solicitamos que nos sean retiradas las limitaciones a la celebración del culto público.”

Estas frases bien podrían ser el resumen del documento que, por su extensión y claridad, recomendamos lean íntegramente:


LLAMAMIENTO PARA LA IGLESIA Y PARA EL MUNDO

A los fieles católicos y a los hombres de buena voluntad
Veritas liberavit vos (Jn 8,32)

En un momento de gravísima crisis, los Pastores de la Iglesia Católica, en virtud del mandato que hemos recibido, nos consideramos en el sagrado deber de hacer un llamamiento a nuestros Hermanos en el Episcopado, al Clero, a los Religiosos, al pueblo santo de Dios y a todos los hombres de buena voluntad. Suscriben también este llamamiento intelectuales, médicos, abogados, periodistas y profesionales diversos que comparten su contenido, y pueden suscribirlo asimismo cuantos deseen adherirse al mismo.

Los hechos han demostrado que, bajo el pretexto de la epidemia de Covid-19 se ha llegado en muchos casos a vulnerar derechos inalienables de los ciudadanos, limitándose de forma desproporcionada e injustificada sus libertades fundamentales, entre ellas el ejercicio de las libertades de culto, de expresión y de movimiento. La salud pública no debe ni puede convertirse en excusa para conculcar los derechos de millones de personas en todo el mundo, y menos aún para que las autoridades civiles eludan su obligación de obrar con prudencia en pro del bien común. Esto es tanto más cierto cuanto más aumentan las dudas planteadas por muchos en torno a la verdadera capacidad de contagio, peligrosidad y resistencia del virus. Muchas voces autorizadas del mundo de la ciencia y de la medicina confirman que el alarmismo que han manifestado los medios informativos al Covid-19 no parece totalmente justificado.

En base a los datos oficiales sobre la incidencia de la epidemia en el número de fallecimientos, tenemos motivos para creer que hay fuerzas interesadas en generar pánico entre la población con el único fin de imponer de modo permanente formas inaceptables de restricción de las libertades, control de las personas y vigilancia de sus movimientos. Esta forma de imposiciones antidemocráticas preludian de manera inquietante un Gobierno Mundial que escapa a todo control.

Creemos igualmente que las medidas de protección adoptadas en algunas situaciones, incluido el cierre de las actividades comerciales, han desencadenado una crisis que ha hundido a sectores enteros de la economía, favoreciendo con ello la interferencia de potencias extranjeras, con graves repercusiones sociales y políticas. Quienes ejerzan cargos gubernamentales deben impedir estas formas de ingeniería social, adoptando medidas encaminadas a la tutela de sus ciudadanos, a quienes representan y en cuyo interés tienen la grave obligación de realizar sus funciones. Ayúdese igualmente a la familia, célula de la sociedad, evitando penalizar irrazonablemente a los débiles y los ancianos al obligarlos a sufrir dolorosas separaciones de sus seres queridos. La criminalización de las relaciones personales y sociales debe considerarse asimismo una parte inaceptable del proyecto de quienes promueven el aislamiento de las personas para manipularlas y dominarlas mejor.

Pedimos a la comunidad científica que vele porque se promuevan honradamente y con miras al bien común curas para el Covid-19, evitando escrupulosamente que intereses inicuos influeyan en las decisiones de los Gobernantes y los organismos internacionales. No es razonable penalizar remedios que se han revelado eficaces, en muchos casos de bajo costo, para privilegiar curas o vacunas no tan eficaces pero que garantizan ingresos mucho mayores a las empresas farmacéuticas, aumentando los costos de la sanidad pública. Como Pastores que somos, recordemos también que para un católico es moralmente inaceptable inocularse con vacunas en cuya producción se ha utilizado material procedente de fetos abortados.

Pedimos asimismo a los Gobernantes que garanticen que se eviten de la forma más rigurosa los medios de control de las personas sea mediante sistemas de rastreo electrónico o cualquier otra forma de ubicación: a pesar de la gravedad de la situación, el combate al Covid-19, no debe servir de pretexto para respaldar turbias intenciones de entidades supranacionales que albergan marcadísimos intereses comerciales y políticos en este proyecto. En particular, debe permitirse a los ciudadanos la posibilidad de rechazar semejantes limitaciones a las libertades personales, sin imponer forma alguna de penalización para quien no desee beneficiarse de las vacunas, de los métodos de localización y de cualquier otro instrumento análogo. Téngase en cuenta la flagrante contradicción que se observa entre quienes persiguen políticas de reducción drastica de la población y al mismo tiempo se presentan como salvadores de la humanidad sin tener la menor legitimación política ni social. Por último, la responsabilidad política de quien representa al pueblo no puede ser confiada en modo alguno a técnicos que encima exigen para ellos mismos formas de inmunidad personal que resultan como mínimo inquietantes.

Solicitamos enérgicamente a los medios de comunicación que se empeñen activamente en facilitar una información correcta que no sancione el disenso aplicando formas de censura, como está sucediendo de forma generalizada en las redes sociales, la prensa y la televisión. La veracidad de la información exige que se dé lugar a voces no alineadas con el pensamiento único para que los ciudadanos puedan evaluar la realidad con conocimiento de causa, sin ser influidos en gran medida por intervenciones partidistas. Un diálogo democrático y franco es el mejor antídoto contra el riesgo de imponer formas sutiles de dictadura presumiblemente peores de las que ha visto nacer y morir nuestra sociedad en épocas recientes.

Recordemos, para terminar, como Pastores a quienes se ha encomendado la importante misión de guiar la grey de Cristo, que la Iglesia reivindica con firmeza su propia autonomía de gobierno, de culto y de predicación. Dicha autonomía y libertad son un derecho de nacimiento que le concedió Nuestro Señor Jesucristo para que cumpla las finalidades que le corresponden. Por este motivo, los Pastores reivindicamos enérgicamente el derecho a decidir de forma autónoma en lo que se refiere a la celebración de la Santa Misa y los Sacramentos, como también exigimos plena autonomía en materias que están dentro de nuestra inmediata competencia y jurisdicción, como por ejemplo las normas litúrgicas y la manera de administrar la Comunión y otros Sacramentos. El Estado no tiene el menor derecho a interferir por motivo alguno en la soberanía de la Iglesia. La colaboración de las Autoridades Eclesiásticas, que jamás ha sido negada, no supone por parte de las civiles prohibiciones ni limitaciones al culto público o el ministerio sacerdotal. Los derechos de Dios y de los fieles son ley suprema de la Iglesia que ésta no quiere ni puede abrogar. Solicitamos que nos sean retiradas las limitaciones a la celebración del culto público.

Invitamos a las personas de buena voluntad a no sustraerse a su deber de colaborar al bien común, cada cual según su propio estado y posibilidades y en espíritu de Caridad fraterna. Esta cooperación, auspiciada por la Iglesia, no puede prescindir sin embargo del respeto a la ley natural ni a la garantía de las libertades individuales.

Los deberes civiles a los que están obligados los ciudadanos suponen el reconocimiento de sus derechos por parte del Estado. Todos estamos llamados a valorar la situación actual de forma coherente con las enseñanzas del Evangelio, y ello exige tomar partido: o con Cristo o contra

Cristo. No nos dejemos intimidar ni asustar por quienes nos hacen creer que somos minoría: el bien está mucho más difundido y es mucho más poderoso de lo que el mundo quiere que creamos. Nos enfrentamos a un enemigo invisible que hace separaciones entre sus ciudadanos, entre los hijos y los padres, entre nietos y abuelos, fieles y pastores, alumnos y docentes, clientes y vendedores. No permitamos que con la excusa de un virus se borren siglos de civilización cristiana para instaurar una odiosa tiranía tecnológica en que personas sin nombre y sin rostro decidan la suerte del mundo confinándonos a una realidad virtual. Si tal es el proyecto que tienen para dominarnos los poderosos de la tierra, sepan que Jesucristo, Rey y Señor de la Historia, ha prometido que «las puertas del Infierno no prevalecerán» (Mt.16,18).

Encomendamos al Dios Todopoderoso a los Gobernantes y a cuantos rigen el destino de las naciones para que los ilumine y oriente en estos momentos de grave crisis. No se olvide que del mismo modo que el Señor nos juzgará a los Pastores según por la grey que nos ha confiado, también juzgará a los Gobernantes por los pueblos a los que tienen la obligación de defender y gobernar.

Roguemos con fe al Señor para que proteja a la Iglesia y al mundo. La Virgen Santísima, Auxilio de los Cristianos, aplaste la cabeza de la vieja Serpiente y frustre los planes de los hijos de las tinieblas.

8 de mayo de 2020
Virgen del Rosario de Pompeya


Para firmar el llamamiento:
www.veritasliberabitvos.info
El sitio estará activo desde la mañana del 8 de mayo.
Lista de firmantes: 

Cardenales

Cdl Robert Sarah, Prefect of the Congregation for Divine Worship

Cdl Gerhard Ludwig Mueller, Prefect emeritus of Congragation of the Doctrine of the Faith

Cdl Joseph Zen Ze-kiun, Bishop emeritus of Hong Kong

Cdl Janis Pujats, Archbishop emeritus of Riga

Obispos

Mgr Luigi Negri, Archbishop emeritus of Ferrara-Comacchio

Mgr Joseph Strickland, Bishopof Tyler, Texas

Mgr Thomas Peta, Metropolitan Archbishop of Astana

Mgr Athanasius Schneider, Auxiliary Bishop of Astana

Mgr. Carlo Maria Viganò, Archbishop, Apostolic Nuncio

Mgr Jan Pawel Lenga, Archbishop emeritus of Karaganda

Mgr Rene Henry Gracida, Bishop emeritus of Corpus Christi

Mgr Andreas Laun, Auxiliary Bishop of Salzburg



Sacerdotes
 
Father Serafino Lanzetta, Theologian

Father Alfredo Maria Morselli, Theologian

Father Curzio Nitoglia, Theologian

JOURNALISTS, EDITORS, WRITERS
Dr Aldo Maria Valli, journalist

Dr Magdi Cristiano Allam, writer

Dr Giulio Meotti, journalist

Dr Marco Tosatti, journalist

Claudio Messora, director Byoblu.com

Dr Robert Moynihan, writer, journalist

Dr Jeanne Smits, journalist

Dr Olivier Figueras, journalist

Dr Cesare Sacchetti, journalist

Prof. Giorgio Nicolini, director of Tele Maria

Michael J. Matt, editor The Remnant

John-Henry Westen, co-founder, editor-in-chief LifeSiteNews.com

Vittoria Alliata di Villafranca, journalist and writer

Maria Guarini, editor

Prof. Francesco Lamendola

António Carlos de Azeredo, editor

José Narciso Pinto Soares, editorial counselor

Dr Massimo Rodolfi

Riccardo Zenobi, writer

Danilo Quinto, writer

Olivier Valette, writer

DOCTORS, IMMUNOLOGISTS, VIROLOGISTS, RESEARCHERS

Dr Stefano Montanari, scientific director Nanodiagnostics laboratory, Modena

Dr Antonietta Gatti, research manager, Nanodiagnostics laboratory, Modena

Prof. Alessandro Meluzzi, psychiatrist

Dr Anna Rita Iannetti, doctor, PNEI and biointegrated medicine

Dr Fabrizio Giudici, orthopedic traumatologist

Dr Rosa Maria Roccaforte, cardiologist

Dr Silvana De Mari, doctor

Dr Maria Grazia Sordi, psychologist

Dr Roberto Marrocchesi, nutritionist

Dr Mario Sinisi

Dr Antonio Marcantonio

LAWYERS
Dr Angelo Giorgianni, judge

João Freire de Andrade, jurist

Lawyer Francesco Fontana

Lawyer Luigi Valenzise

Lawyer Fabio Candalino

Lawyer Luca Di Fazio

Lawyer Massimo Meridio

Dr Lawyer Gianni T. Battisti

Lawyer Piero Peracchio

Lawyer Paola Bragazzi

Lawyer Luís Freire de Andrade

Lawyer Heitor A. Buchaul

Lawyer Maître Olivier Bonnet

LECTORS, TEACHERS AND PROFESSIONALS
Hon. Prof. Vittorio Sgarbi, art critic, essayist

Prof. Matteo D’Amico

Prof.ssa Mafalda Miranda Barbosa

Prof. Francesca Maimone

Prof. Martino Mora, philosopher

Prof. Massimo Viglione, historian and essayist

Prof. Elisabetta Sala, teacher and writer

Dr Ing. Alessandro Peracchio

Dr Luca Scantamburlo

Prof. Rosa Maria Bellarmino

Steven Mosher, president Population Research Institute

Prof. Emeterio Ferrés Arrospide, Coimbra University

Prof. Ibsen Noronha

Prof. ing. Amadeu Teixeira Fernandes, Georgetown University

Dr José Filipe Sepúlveda da Fonseca

Dr Alfonso Martone, CNR Italy

Dr Luís Ferrand d’Almeida

Ing. Roberto Imparato

ASSOCIATIONS


Atman Association – President Manuela Baccin

Riprendiamoci Il Pianeta Association – President Magda Piacentini

Movimento 3V – Vaccini Vogliamo Verità – Secretary Luca Teodori

Libera Scelta Association – President Alessandra Bocchi

Iustitia in Veritate Association- Directors

Una Vox Association – President Calogero Cammarata

Comitato Famiglia e Vita – President Franco Rebecchi

Confederazione dei Triarii

AURET, Autismo, Ricerca e Terapie – President Lawyer Roberto Mastalia

Vita al Microscopio Association – President Nino Ferri

Texas Right to Life – Jim Graham

Cleveland Right to Life – Molly Smith

La apostasía disfrazada, el papado espiritual de Benedicto XVI, las excomuniones del Vaticano, la belleza del Papa Francisco.




En Italia es muy conocida la llamada ‘escuela de Bolonia’ de la que forman parte teólogos, filósofos e historiadores afines a las tesis del Instituto de Bolonia, fundado por Giuseppe Dossetti y Giuseppe Alberigo, del que salió la «Historia del Concilio Vaticano II». La tesis fundamental es que están a favor de que el Concilio Vaticano II supuso una ruptura con la Tradición. Entra en contradicción directa con la llamada hermenéutica de la continuidad por la que debemos leer el último concilio a la luz de la Tradición, como es defendido por Juan Pablo II y Benedicto XVI, no tanto por Francisco. 

Éste es el problema de fondo en el que nos movemos desde hace decenios y que el cardenal Müller explica muy claramente en su última entrevista. Su contenido está a disposición en español y no entramos en el fondo. Müller considera esta escuela una apostasía disfrazada:
«La interpretación del Concilio Vaticano II difundida por la así llamada «Escuela de Bolonia» fue una agenda para la refundación de la Iglesia católica, de acuerdo con las ideas de la Ilustración y la crítica religiosa: en otras palabras, la transformación de la Iglesia de Dios en una iglesia civil, sin la divinidad de Cristo. No es otra cosa que apostasía disfrazada, porque los obispos y el Papa «son los únicos sucesores de los apóstoles y vicarios de Cristo, que no tienen el derecho a fundar otra iglesia, transmitir una fe diferente y administrar otros sacramentos que aquellos instituidos por Cristo» (Santo Tomás de Aquino, Summa Teológica III, q.64 a.2 ad 3). ¿De dónde recibirían los arquitectos de su propia iglesia la autoridad para adoctrinar, integrar y, en el caso de desobediencia, excomulgar a los fieles de Cristo, apartarlos de los magisterios dados a ellos por Cristo y ridiculizarlos en los medios de comunicación contrarios a la Iglesia?»; «Aunque esté justificado hablar del principio sinodal en la interacción entre obispos, sacerdotes y laicos, no deberíamos pasar por alto su defecto original. Este consiste en el error político de considerar que en la Iglesia el problema principal gira en torno al poder que ahora tiene que ser limitado «democráticamente». Hablar de «división de poderes en la Iglesia es populismo e ignorancia teológica». De imprescindible lectura como casi todo lo de Müller en estos momentos en que el Sínodo Alemán parece que pretende retomar sus reclamaciones olvidando el drama de la peste y el fracaso amazónico que tan lejano nos parece.
Seguimos con el último libro sobre el Papa Benedicto y contamos con varios artículos sobre su contenido. Nos parece interesante la reflexión sobre el ‘papado espiritual’. El cambio de la sociedad que ha producido el alargamiento de la vida ha provocado la aparición, inexistente en la historia milenaria de la Iglesia, de los obispos eméritos que no terminan, como los llamados auxiliares, de encajar muy bien en la Tradición. Un sacerdote «puede convertirse en obispo sólo en relación con una diócesis específica», es decir, cada «consagración es siempre relativa» y «vinculada a una sede episcopal». Para los obispos auxiliares, por ejemplo, la Iglesia ha elegido «sedes ficticias». Un obispo retirado «ya no tiene una sede episcopal activa, sino que todavía tiene una relación especial como ex obispo con su sede». Este obispo retirado «no se convierte así en un segundo obispo de su diócesis», explica Benedicto. Tal obispo habría «renunciado completamente a su cargo, sin embargo, el vínculo espiritual con su sede anterior es reconocido, incluso como una cualidad jurídica». Esta «nueva relación con su sede» se «da como una realidad, pero se encuentra fuera de la sustancia jurídica concreta del oficio episcopal». Al mismo tiempo, agrega el Papa retirado, el «vínculo espiritual» se considera una «realidad». «Entonces, continúa, no hay dos obispos, sino uno con un mandato espiritual, cuya esencia es servir a su antigua diócesis desde adentro, desde el Señor, estando presente y disponible en la oración». «No es concebible que tal concepto jurídico no pueda aplicarse también al obispo de Roma», afirma explícitamente el Papa Benedicto XVI, aclarando así que renunció completamente a su cargo papal mientras mantiene una «dimensión espiritual de su oficio».
------
 
Seguimos en Italia con la ‘guerra de las misas’ que puede terminar el día 18 de este mes con un acuerdo con el gobierno de cómo recomenzar sin tener que sufrir situaciones molestas para ambas partes. Ahora parece que puede no ser el mismo día en todas las regiones pero estamos llegando.
------

El presidente de la conferencia Italiana se suma a la regularización de inmigrantes. El Papa Francisco habla con la Merkel que es la que, sin duda, tiene el ‘mando único’ sobre el euro y parece dispuesta a ejercerlo. Tenemos la sensación de que el Papa Francisco está muy mal informado cuando habla de la deuda que estrangula a muchos países. Italia tiene una deuda seis veces superior a la de su Argentina natal, que es considerada mítica y muy superior, incluso en términos porcentuales; Alemania más que duplica la deuda argentina. El colapso de nuestras economías es de tal calado que necesitamos tiempo para asumir la profundidad del pozo en que nos encontramos.
-------
 
Seguimos con el culebrón de los hospitales herejes belgas. Hoy son muchas las órdenes y congregaciones religiosas que están creando sociedades interpuestas para mantener la propiedad de sus instituciones, sobre todo hospitales y colegios, renunciando a la gestión. Realidades nacidas con el único objetivo de evangelizar y hacer presente a Jesucristo, se han convertido en ‘empresas’ que poco, o nada, tienen de presencia ‘católica’. El cinismo de lo sucedido en los hospitales belgas es que se condena al hospital, pero su propietario sigue gozando del título de católico incluso con votos de pobreza, castidad y obediencia.
-------
 
El cardenal Pell sigue con sus persecuciones. Suponemos que está gozando de un merecido descanso reparador, pero que no está inactivo. Pensaron que ya estaba vencido y que, por su edad, no superaría la dureza de la prueba sufrida. No creemos que las nuevas embestidas le causen especiales temores.
-------
 
El Papa Francisco nos habla de la belleza. Dostoievski profetizó : «La belleza nos salvará». En tiempos de desolación, desconcierto, fealdad, esta frase, tan difundida, tal vez puede devolvernos un poco de claridad, puesto que la belleza es el esplendor de la verdad y la verdad es siempre tan eterna como nueva. Benedicto XVI lo explica con claridad:
«La Iglesia reconoce a Cristo como el más bello de los hombres; la gracia derramada en sus labios manifiesta la belleza interior de su palabra, la gloria de su anuncio. De este modo, no sólo la belleza exterior con la que aparece el Redentor es digna de ser glorificada, sino que en Él, sobre todo, se encarna la belleza de la Verdad, la belleza de Dios mismo, que nos atrae hacia sí y a la vez abre en nosotros la herida del Amor, la santa pasión («eros») que nos hace caminar, en la Iglesia esposa y junto con ella, al encuentro del Amor que nos llama.»

«…os llevaré conmigo, para que donde estoy yo estéis también vosotros. »

Buena lectura. 
Specola

ENLACES

PG A BASSETTI: PENSI AI SACERDOTI E AI VESCOVI, NON AI MIGRANTI.

«Abbiamo sempre celebrato per i pochi cittadini del Vaticano»

Papa Francesco, gaffe sull’inferno. Perché il Santo Padre ha ragione

Il papa prega per gli artisti: «Ci fanno capire cosa è la bellezza»

Papa e Merkel, telefonata con al centro la solidarieta verso i Paesi strangolati dal debito e la tenuta dell’Europa

Eutanasia, per i cattolici è “meglio lasciare gli ospedali che chiudere gli occhi”

Fase 2, accordo governo-Cei: «Via alle messe dal 18 maggio»

Papa Francesco insultato da Antonio Socci: “Aiuta il governo, traditore asservito”. Per la Chiesa “l’odio social è peccato”

Emanuela Orlandi… “Gli impostori. Inchiesta sul potere”

Cardinale Pell coprì casi di pedofilia dal 1973?/ Nuovi guai per il prelato assolto

Gli anti-Bergoglio usano Ratzinger in cerca di una visibilità che da soli non avrebbero

APPELLO PER LA CHIESA E PER IL MONDO. A TUTTI, IN SEI LINGUE.

«Nessun vescovo ha il diritto di vietare le Messe con il popolo»

Covid, dal 18 maggio via libera alle messe con i fedeli (ma con norme ferree). Pace fatta tra governo e vescovi

BXVI: SONO ANCORA PAPA, IN UNA DIMENSIONE SPIRITUALE.

MESSA CON FEDELI DAL 18 MAGGIO. OSTIA IN MANO, GUANTI MONOUSO.

Papa emerito Benedetto XVI: mi sono dimesso, ma ho mantenuto la “dimensione spirituale” del Papato

Papa Francesco: “Io già santo? Non lo dica due volte che forse ci troviamo all’inferno eh”. Ecco perché la frase del Pontefice non è stata una gaffe ma solo una battuta

Pedofilia: card. Pell sapeva da anni ’70 Emerge da un rapporto del 2017

Cuatro cardenales y siete obispos se ponen de pie



Los cuatro cardenales Robert Sarah, Gerhard Müller, Joseph Zen y Jānis Pujats y los siete obispos Carlo Maria Viganò, Luigi Negri, Tomash Peta, Athanasius Schneider, Jan Pawel Lenga, René Henry Gracida, y Andreas Laun lanzaron el 7 de mayo en el sitio web VeritasLiberabitVos.info un “Llamado para la Iglesia y el Mundo”.

Intelectuales, médicos, periodistas y abogados se unieron a ellos. Hay más de 5.000 obispos en la Iglesia Católica. El llamado denuncia que el coronavirus es utilizado para restringir derechos civiles, incluyendo las libertades de culto, de expresión y de movimiento.

Según los prelados, “los poderes” crearon un pánico con el coronavirus para imponer permanentemente restricciones a la libertad, controlando a las personas y rastreando sus movimientos. Para ellos, esto es “un preludio perturbador para la institucionalización de un gobierno mundial más allá de todo control”.

La crisis económica creada por el encierro masivo alienta la interferencia por parte de los poderes internacionales y para los obispos es una forma de ingeniería social. Advierten sobre “las intenciones ocultas de cuerpos supranacionales con intereses comerciales y políticos muy fuertes”.

Los obispos aclaran también que es censurable utilizar vacunas derivadas de los retos de niños abortados.
 ------
 
Nota: Parece ser que el cardenal Sarah, aunque está de acuerdo con mucho de lo que se dice en ese documento, sin embargo, él no lo ha firmado. Así se lee en Infovatica:

El cardenal Sarah niega haber firmado el documento sobre el coronavirus

jueves, 7 de mayo de 2020

NOTICIAS VARIAS 7 de mayo de 2020


 
SPECOLA 

Papa Francisco y Papa Benedicto: dos papas dos mundos, sacrificios humanos y marimonios, las vacas del Vaticano, los hospitales herejes.

 THE WANDERER

El resto y los singulares

INFOCATÓLICA

La Ideología de Género al servicio del Anticristo

El cardenal Zen apoya las críticas del cardenal Bo a la dictadura china por su gestión de la pandemia

Selección por José Martí

El padre Ángel a Pablo Iglesias: “Personas como tú ayudáis a hacer un mundo mejor” (Carlos Esteban)




 

El padre Ángel García Rodríguez, el popular fundador de la ONG Mensajeros por la Paz, alaba sin límites al vicepresidente del Gobierno, el comunista Pablo Iglesias, en una carta pública que ha dirigido a varias personalidades, pero que ha causado considerable perplejidad que, entre ellas, haya incluido al líder de Podemos.

-------

Uno pensaría que Pablo Iglesias, vicepresidente del gobierno y líder de Unidas Podemos, no ha hecho exactamente una gestión de la crisis de la pandemia como para que se le aplauda, destacando nuestro país, entre los de su entorno, por los indicadores más nefastos y criticado por ellos por los medios internacionales. Por otra parte, tampoco deja de ser desconcertante que un sacerdote católico halague hasta el hartazgo a quien se enorgullece de ser heredero ideológico de quienes desataron una furiosa persecución asesina contra la Iglesia en España, que se saldó con numerosos mártires, violaciones de monjas, incendios y profanaciones en abundancia.

Pero el fundador de Mensajeros por la Paz lo ha hecho, y públicamente. “Déjame decirte ¡qué Dios te bendiga! y pedirte también que tú me bendigas a mí”, se lee al comienzo de la carta que ha dirigido a varias personalidades, entre las que se encuentra Iglesias. A pesar del tono de predicador evangélico que adopta últimamente en sus intervenciones públicas, no nos atrevemos a precisar el valor canónico de una bendición de Iglesias.

En la carta, el padre Ángel da gracias a Dios “por tener a personas como tú (Pablo Iglesias), que con tu trabajo y esfuerzo, y el de tu equipo, ayudáis a conseguir que un mundo mejor sea posible”.

La pandemia ha provocado, oficialmente, 25.000 muertes -se calculan en más de 36.000- y 220.000 contagiados de los escasos testados hasta el momento, según los datos oficiales del Ministerio de Sanidad. No queremos imaginar qué carta tan ditirámbica habría redactado el padre si los resultados fueran similares a los países como Dinamarca o Portugal. Quizá estaría a estas horas pidiendo en vida la canonización de los responsables.

Carlos Esteban

miércoles, 6 de mayo de 2020

China aprovecha la pandemia mundial para acabar con el cristianismo(Carlos Esteban)


 
La tiranía comunista china está aprovechando que Occidente está distraído con la pandemia mundial -casualmente, también procedente de China- para dar los últimos toques a su campaña para desarraigar la fe cristiana del país, ante el silencio atronador de la Santa Sede.
-------
 
“Ahora, cuando se arranca una cruz, los cristianos deben permanecer todos tranquilos y sonrientes”, afirma el sacerdote de la Iglesia oficial Shanren Shenfu en su blog, según recoge AsiaNews. La noticia la ilustra con una foto que muestra el derribo de la cruz de una iglesia de Hunan, en el centro de China.

Pero los prelados de la Iglesia oficial, la favorecida tanto por los comunistas, en Pekín, como por la Santa Sede tras los acuerdos firmados con el gobierno chino, predican la pasividad ante esta provocación. Shanren cita un artículo del órgano oficial de los jesuitas dirigido por Antonio Spadaro, La Civiltà Cattolica, en el que se afirma, según el sacerdote chino, que “ver y aceptar la remoción de las cruces como algo cotidiano parece ser la única contribución importante que los fieles católicos chinos y todo el pueblo de Dios pueden dar para la prosecución del Acuerdo [sino-vaticano]”. Decimos “según afirma”, porque el artículo ha sido retirado de la versión online de la publicación.

Es desesperantemente triste. La única opción que se deja a los católicos chinos es aceptar con una sonrisa su propia persecución, y no ‘hacer olas’ para que no haya roces entre Pekín y Roma. Es fama que la obediencia jesuita es tan extrema que el miembro de la compañía debe creer que lo blanco es negro si lo dice el superior, y eso es lo que se está forzando a los fieles chinos, que deben ver como algo bueno el mal de la más rabiosa persecución contra su fe.
Carlos Esteban

martes, 5 de mayo de 2020

San Juan Bosco, la iglesia y la pandemia



Imágenes simbólicas vinculadas a una Iglesia cada vez más afectada por una crisis no sólo doctrinal sino resultante de la creciente insatisfacción de estratos cada vez más amplios de la opinión pública católica y, más aún, están impresas en la mente de todos: el rayo que golpeó la cúpula de San Pedro en la tarde del 11 de febrero de 2013, cuando Benedicto XVI anunció su renuncia; la catedral de Notre-Dame de París en llamas la noche del 15 de abril de 2019la oración solitaria del Papa Francisco en una desolada plaza de San Pedro, enmudecida por la pandemia, en la noche de Cuaresma del 27 de marzo, cuando dio su bendición en presencia del crucifijo milagroso de la iglesia romana de San Marcello al Corso, con la cara y el cuerpo mojados por una lluvia torrencial. 

Para quienes tienen fe, leer las señales es algo normal, dado que el católico sabe que lo sobrenatural se relaciona con lo natural en unidad, sin divisiones; ha habido diferentes advertencias marianas, desde Nuestra Señora del Laus hasta La Salette y Fátima como también diversos avisos en nuestra época exhortando a un auténtico retorno, a través de la conversión al Cristo auténtico y a las leyes del Señor, leyes que son guías seguras para la existencia terrena y eterna de los hombres. La pandemia causada por el Coronavirus no es más que otra llamada de atención…

El hombre de fe cree en Dios y no en los hombres, por eso no vive de ilusiones, como, en cambio, desafortunadamente, les ha sucedido a muchos pastores de la Iglesia, desde hace cincuenta años, que creen en un diálogo fructífero con el mundo, el cual en su esencia desde siempre se ha opuesto a los principios divinos. 
 
Autocensurada, en las últimas décadas, la Iglesia se ha despojado de su identidad, como defensora de la Verdad traída por Jesucristo, para alinearse con los fuertes poderes e ideologías del sistema imperante. La Iglesia del Papa Bergoglio se sorprende, en estos días, de no haber sido tomada en cuenta por el Gobierno Conte a propósito de las nuevas directivas para la reapertura en Italia de la llamada fase dos. Como un ardid llegó a la alta jerarquía eclesiástica pro-gobierno, el anuncio del decreto del Poder Ejecutivo y entonces, con una comunicación ya no más servil, atacó las decisiones de la autoridad civil como puede verse en el comunicado de la Conferencia Episcopal italiana elaborada después de la conferencia del Presidente del Consejo el 26 de abril pasado.:
«Los obispos italianos no podemos aceptar ver comprometido el ejercicio de la libertad de culto […] Después de semanas de negociaciones en las que la CEI presentó las Directrices y Protocolos para enfrentar una fase transitoria en el pleno respeto de todas las normas sanitarias, el Decreto del Presidente del Consejo de Ministros publicado esta tarde excluye arbitrariamente la posibilidad de celebrar la Misa con el pueblo. Recordamos a la Presidencia del Consejo y al Comité Técnico Científico el deber de distinguir entre su responsabilidad, dando indicaciones precisas de carácter sanitario, y la de la Iglesia, llamada a organizar la vida de la comunidad cristiana, de conformidad con las medidas dispuestas, pero en la plenitud de su propia autonomía».
La autoridad y la credibilidad de la Iglesia, con connotaciones cada vez más relativistas y sociológicas, ha perdido consistencia, tanto respecto a los fieles como en las relaciones con el mundo mismo. Abandonando los derechos divinos por los supuestos derechos humanos, los hombres, autores de leyes contra el hombre y contra Dios, como el aborto, y de virus ideológicos contagiosos, miran hacia abajo y no hacia el Cielo, por lo que muchos pastores ya no pueden discernir entre lo que es malo y lo que es bueno. Desconcentrados y perdidos, gran parte de los ministros de cosas sagradas han perdido la sobrenaturalidad de la fe y, por lo tanto, se convierten en escrupulosos examinadores de la crónica terrenal, huyendo del admirable horizonte de lo sobrenatural, el único capaz de resolver problemas, contradicciones, falacias y desacuerdos terrenales. De esta manera es olvidado lo esencial de la Religión revelada por el Salvador para volver la mirada hacia el mismo pecado, el enemigo por excelencia de las almas.

La Iglesia tiene una gran necesidad de volver sobre sus pasos y de desintoxicarse; y las almas, cada vez más cansadas de las palabras de la vida terrenal, lo reclaman a grandes voces. Al respecto nos parece escuchar el mensaje profético que San Juan Bosco comunicó al Papa León XIII en 1878, transcripto en el texto «Exordio de las cosas más necesarias para la Iglesia»: 
 
«Era una noche oscura, los hombres ya no podían discernir cuál era el camino […] cuando una luz espléndida apareció en el cielo iluminando los pasos de los viajeros como al mediodía. En ese momento, se vio una multitud de hombres, mujeres, ancianos, niños, monjes, monjas y sacerdotes, con el Pontífice a la cabeza, dejando al Vaticano como en una procesión. Pero he aquí que se desata un furioso temporal; oscureciendo un poco esa luz parecía desatar una batalla entre la luz y la tinieblas. Mientras tanto, se llegó a una pequeña plaza cubierta de muertos y heridos, muchos de los cuales muchos pedían consuelo en alta voz. […] todos se dieron cuenta que ya no estaban en Roma. […] fueron vistos dos ángeles llevando un estandarte e iban a presentarlo al Pontífice diciendo: ‘Recibe el estandarte de Aquella que lucha y disipa a los ejércitos más fuertes de la tierra. Tus enemigos han desaparecido, tus hijos con lágrimas y suspiros invocan tu regreso’. Luego, llevando la mirada al estandarte, vi escrito en un lado: Regina sine labe Concepta; y en el otro: Auxilium Christianorum. El Pontífice tomó la pancarta con alegría, pero contemplando el pequeño número de quienes permanecieron a su alrededor se puso afligidísimo. Los dos ángeles añadieron: “Ve pronto a consolar a tus hijos. Escribe a tus hermanos, dispersos en varias partes del mundo, que es necesaria una reforma en las costumbres de los hombres. Esto no puede lograrse sino partiendo el pan de la Palabra Divina para los pueblos. Catequiza a los niños, predica el desapego de las cosas de la tierra […] Los levitas [sacerdotes, n. d. r.] serán buscados entre la azada, la pala y el martillo, para que se cumplan las palabras de David: Dios levantó a los pobres de la tierra para colocarlos en el trono de los príncipes de su pueblo». La tierra «estaba pisoteada como por un huracán» y muchas personas habían perecido.

El Papa, dice Don Bosco, regresó a Roma con nuevas y fervientes palabras y se echó a llorar por la desolación en la que se encontraban los pocos ciudadanos restantes. 
 
Ya en San Pedro, entonó el Te Deum, al que un coro de ángeles que cantaban respondió: «Gloria in Excelsis Deo, et in terra pax hominibus bonæ voluntatis».
 
Corrispondenza Romana

NOTICIAS VARIAS 5 de mayo de 2020


INFOCATÓLICA

Noticias de Benedicto XVI: Temor del Anticristo es “demasiado natural”

GLORIA TV


Su renuncia no tuvo nada que ver con los escándalos como Vatileaks, dijo Benedicto XVI a Peter Seewald el 12 de noviembre de 2018. La declaración está contenida en la biografía de Benedicto escrita por Seewald (4 de mayo). Seewald trata a Ratzinger como “Papa Benedicto”.

Al comienzo de su pontificado, Benedicto firmó – al igual que Pablo VI y Juan Pablo II – su renuncia en caso de enfermedad que hace imposible el ejercicio del papado. Agrega “que se tornó claro para mí al final de mi servicio que hay también otras formas de insuficiente incapacidad para ejercer correctamente el cargo”.

“Emérito” significa que un obispo no mantiene activamente su sede episcopal, sino que está “en una relación especial con ella como ex obispo”.

Benedicto recuerda que todo obispo necesita una sede, aun si es, como sucede con los obispos auxiliares, sólo el titular de una diócesis que ya no existe más. Después que se introdujo la edad de jubilación episcopal, no hubo suficientes sedes titulares vacías. Por eso el obispo de Passau (Alemania), monseñor Simon Landersdorfer (+1971), comenzó a llamarse “emérito” [pero falleció siete meses después].
"La sede un obispo solo puede tener un titular", enfatiza Benedicto: “Al mismo tiempo se expresa un vínculo espiritual que no se puede dejar de lado bajo ninguna circunstancia”.

Él aplica esto a la sede romana. En ella,“él ya no tiene ninguna autoridad legal, sino una afiliación espiritual que permanece, aunque sea invisible”. Esta forma legal-espiritual, sin embargo, evita todo tipo de pensamiento respecto a una “coexistencia de dos Papas”, lo que es como querer trazar la cuadratura del círculo.

Benedicto describe las acusaciones de interferir con la administración de Francisco haciendo declaraciones como una “maliciosa distorsión de la realidad”. Como ejemplo de ello menciona su mensaje para el funeral del cardenal Meisner: “Mi frase sobre la barca de la Iglesia a punto de volcar a causa de las fuertes tempestades la había tomado literalmente de las homilías de San Gregorio Magno”.

Benedicto no quiere comentar Amoris Laetitia, “porque esto llevaría en exceso al aspecto concreto del gobierno de la Iglesia y, entonces, abandonaría la dimensión espiritual, que todavía es mi única misión”.

Pero elogia a Francisco por su “atención amable y cordial”: “Como usted sabe, la amistad personal con el papa Francisco no solo siguió siendo la misma, sino que ha crecido”.

Benedicto refiere el actual predominio del matrimonio homosexual y del aborto al poder del Anticristo: “Hace un siglo todos pensaban que es absurdo hablar del matrimonio homosexual. Hoy cualquiera que se opone es socialmente excomulgado”. Agrega que lo mismo se aplica para el aborto.

La sociedad moderna ha formulado un Credo anticristiano: “El miedo de este poder espiritual del Anticristo es entonces demasiado natural, y necesita realmente la oración de toda una diócesis y de la Iglesia universal para resistirlo”.

Para Benedicto, la amenaza real a la Iglesia y al ministerio petrino se basa en la dictadura global de ideologías aparentemente humanísticas, a las que no se las puede contradecir sin el riesgo de ser excluidos del consenso social básico”.

Un ecumenismo de papel (Carlos Esteban)



Su Santidad ha convocado contra la pandemia una jornada de ayuno y oración sugerida por un Alto Comité de la Fraternidad Humana, dirigida a todas las religiones. Pero, ¿qué religiones le harán caso, y por qué?


-------

Antes de su conversión a la fe católica, el recientemente canonizado cardenal John Henry Newman tenía una natural aversión por la confesión romana y un gran amor por su iglesia nacional, la anglicana. A medida que profundizaba en la historia y en su fe, advertía que su iglesia se había alejado de la unidad y la apostolicidad, dos notas de la verdadera, así que se propuso la gigantesca tarea de ‘recatolificar’ la Iglesia Anglicana, que sería solo una ‘rama’ de la única Iglesia Católica. Sólo desistió cuando, al cabo, se dio cuenta de que la iglesia que había pergeñado sólo existía sobre el papel o en su cabeza; por muy perfecta que le pareciera, no existía en el mundo real.

No cabe duda de que el actual pontificado es especialmente ecuménico, rebosando incluso los límites del primer ecumenismo, que pretendía la reunión de las confesiones cristianas. Francisco va más allá, como dejó especialmente de manifiesto en el documento común firmado con el gran imán de Al Azhar en Abu Dabi, y quiere tender puentes y lazos con todas las religiones, a las que supone unas intenciones parejas y la adoración de un mismo Dios.

Si bien hay numerosos comentaristas católicos perplejos con el alcance de esos esfuerzos, o incluso recelosos de que éstos lleven a ‘aguar’ la fe y obliguen a oscurecer las verdades que nos separan de los hermanos de otras confesiones, se suele pasar por alto otro aspecto quizá menor, pero en absoluto insignificante: la representatividad de las adhesiones. Lo que es lo mismo, para volver al ejemplo anterior, si estamos ante un ecumenismo de papel. 

Los católicos debemos obediencia filial al Papa. Los musulmanes, evidentemente, no. Aún peor: los musulmanes ni siquiera deben obediencia al gran imán, a ningún imán concreto, por lo demás. La suya no es una religión jerárquica.

Por otra parte, conocemos la visión que tiene el Papa de las religiones en general y del Islam en particular porque la ha expresado en numerosas ocasiones. Ahora bien, el Papa es agente cualificado para definir la doctrina cristiana, ninguna otra. No tiene una especial capacidad, mucho menos sobrenatural, para dictar en qué creen los musulmanes y cómo conciben su fe. De hecho, son muy numerosos los expertos en la religión islámica, por estudios o por experiencia diaria prolongada, que han advertido que Su Santidad parte de una idea ingenua y seriamente distorsionada de la fe de Mahoma.

¿Cuántos de otras religiones van a sumarse a la oración convocada por el Papa? Es imposible saberlo con alguna precisión. Pero no dejaría de ser extraño que confesiones que se han enfrentado dialéctica y bélicamente con los cristianos durante toda la historia acepten la autoridad del padre de los católicos.
Carlos Esteban

domingo, 3 de mayo de 2020

¿Pretendo salvarme sin convertirme?… la gran mentira de hoy (Padre Santiago González)


Duración 23:31 minutos

En este tiempo de Pascua meditamos sobre Jesucristo resucitado camino de la Ascensión, y en esa reflexión debemos aprender a tener los pies en la tierra a la vez que los ojos del alma en el cielo. La tentación de hoy es caminar fuera de la realidad y a la vez mirar solo a la tierra. ¡Urge la conversión!