BIENVENIDO A ESTE BLOG, QUIENQUIERA QUE SEAS



lunes, 12 de diciembre de 2016

"EL PAPA SOY YO" (Comentario sobre la figura del "papa emérito" y sobre el silencio del Papa ante las "Dubia")




Ya hemos hablado aquí sobre la figura del papa emérito que, como tal, es imposible. Ciertos comentarios, sin embargo, de algunos cardenales dan lugar a que algunas personas puedan pensar que tenemos dos papas. Benedicto y Francisco, al servicio de la Iglesia es el título de un libro del cardenal Müller, según el cual uno podría preguntarse si ambos ejercen juntos el mismo oficio (?)

Copio también un párrafo fe una entrevista que le hicieron al papa Francisco, cuando el secretario personal de Benedicto XVI, monseñor Gänswein, sugirió que había un ministerio petrino compartido


Conviene leer el artículo de The Remnant del 28 de mayo de Adelante la Fe, titulado el arzobispo Gänswein y el papa de dos cabezas. Aludo a él en una entrada de este blog, tomada del blog The Wanderer ("Tarde piaste"), con una consideraciones personales al final. 

Yo querría hacer aquí alguna reflexión más a este respecto, insistiendo en este punto, que considero muy importante para la clarificación de los fieles cristianos.


1. No tenemos dos sino un solo Papa, que es el papa Francisco. El anterior papa Benedicto XVI ya no es Papa, aunque vista de blanco, se llame Papa emérito y aparezca junto al papa Francisco en algunas ceremonias, para mayor confusión del pueblo cristiano. Dimitió libremente como Papa (así lo expresó personalmente) y, desde ese momento, dejó de ser Papa. Vuelve a ser, otra vez, el cardenal Ratzinger. El Papado es una institución, no es un sacramento. Un sacerdote o un obispo lo es para siempre, puesto que el sacerdocio imprime carácter en el alma del sacerdote. No así la condición de Papa. Esta idea es fundamental. De igual modo que se dice: "Madre no hay más que una", se puede también decir que "Papa no hay más que uno".

2. El papa Francisco es un Papa legítimo, incluso aun cuando hubiesen habido irregularidades en su nombramiento como Papa -tal y como algunos dicen-. De ser así, ese nombramiento tendría que haber sido impugnado en su momento, lo que no se hizo. La sede de Pedro, por lo tanto, no está vacante, como erróneamente piensan los llamados sedevacantistas.

3. No se puede demostrar que estemos ante un Papa hereje. Aunque así fuese -que eso sólo Dios puede saberlo- tal afirmación tendría que ser demostrada de modo inequívoco, puesto que nadie puede juzgar al Papa, al ser la máxima autoridad en la IglesiaY eso pese a la infinidad de expresiones "papales" que continuamente aparecen en los medios y que darían pie para pensar de ese modo. Dado el lenguaje usado y las circunstancias en que lo ha hecho, el Papa siempre podría argumentar que se ha interpretado mal lo que él dijo; no puede afirmarse, con rotundidad, que estemos en presencia de un papa hereje. Para ello, o bien tendría que ser el propio Papa quien reconociera formal y públicamente su herejía, o bien tendría que expresarse de tal manera que negase alguna verdad de fe, de modo explícito. Si tal evento se produjera  -lo que, evidentemente, no va a ocurrir- sólo entonces ipso facto quedaría depuesto como Papa


De manera que yerran los que piensan en una vuelta del cardenal Ratzinger al Papado; y piensan que Benedicto XVI es el verdadero Papa. Lo fue, pero dimitió libremente. Y así lo ha expresado por activa y por pasiva. Escribo a continuación una respuesta que di hará cosa de dos o tres meses (no recuerdo la fecha exacta) a un artículo de un determinado blog que abogaba por Benedicto XVI como el auténtico Papa. Estas fueron mis palabras:

En lo que ha dicho Francisco: "El papa soy yo" tiene toda la razón. Hay un único Papa en la Iglesia: "Tu es Petrus" y, en este caso, ese Papa es Francisco, nos guste más o nos guste menos.

Duración: 42 segundos

Benedicto XVI abdicó voluntariamente y así lo ha expresado luego, posteriormente, en infinidad de ocasiones. No hay dos Papas. De hecho, la figura de Papa emérito, como dijo Juan Pablo II, es algo imposible. Existen sólo los obispos eméritos. Aunque vista de blanco (un error, en mi opinión, que puede confundir a mucha gente) ahora ya no es Benedicto XVI, sino el cardenal Ratzinger.

Duración 7:07 minutos


Por otra parte, sin embargo, es un hecho que nos encontramos en la actualidad, ante una situación atípica en la Historia de la Iglesia. Y conviene tener presente estos puntos:

1. Respecto a si el papa Francisco dice -como así es- una serie de cosas que son claramente heréticas, hay que tener en cuenta algunos aspectos que se nos pueden pasar por alto. Y son, sin embargo, sumamente importantes.

(1º)  El Papa no es Dios ni es infalible, excepto cuando habla ex cathedra, lo que nunca ha hecho. Y tenemos la obligación, como cristianos, de actuar contra todo aquello que se oponga a la verdad aun cuando sea el Papa quien lo diga. Así les hablaba san Pablo a los corintios: "Obrad el bien, aun cuando nosotros fuéramos dignos de reprobación. Pues no podemos nada contra la verdad, sino en favor de la verdad" (2 Cor 13, 7-8).

( 2º) Es verdad, ciertamente, que un Papa hereje sería un contrasentido. Sin embargo, los fieles cristianos no tenemos potestad para hacer esa afirmación de modo apodíctico. No podemos fundar una Iglesia por nuestra cuenta. Y debemos fidelidad a la Iglesia de siempre. De ahí nuestro respeto hacia la figura de Francisco, en cuanto vicario de Cristo que es, mientras no se demuestre lo contrario

( 3º) Otra cosa diferente sería, sin embargo, que la Jerarquía eclesiástica (al menos un conjunto de cardenales), le hicieran frente, sin miedo a ser excomulgados por ello (¡y aun cuando lo fueran) y que le dijeran al Papa a la cara, con todo respeto, como digo,  que sus afirmaciones, en ciertos puntos, debe de cambiarlas y desdecirse de ellas, pues se oponen a la doctrina de Cristo. De no hacerlo así, podría ser declarado hereje. Y, como tal, tendría que abandonar  el cargo Papal.

Digamos que esto último sería lo deseable, en mi opinión, porque existe mucha confusión entre los cristianos.

Mientras tal cosa no ocurra, podremos disentir de lo que diga el Papa, si no se ajusta a la Doctrina de la Iglesia de toda la vida. Es más: tenemos la obligación de hacerlo, porque el error es el error y debe ser señalado y condenado como tal error.

Nuestro deber es el de permanecer fieles a la Doctrina Católica de dos mil años de historia. Si lo que Francisco dice está de acuerdo con esa doctrina, bienvenido sea. Si se aparta de ella en algún ápice, no le seguiremos, pues nuestra fidelidad es a Jesucristo y a su Iglesia. Y al Papa también, por supuesto, pero siempre y cuando no predique o propague pensamientos contrarios al sentir de la Iglesia. El Papa no tiene ese poder: él es, simplemente, nada más y nada menos, que un administrador de los misterios de Dios. Y su obligación es la de guardar el depósito recibido, siendo fiel a la Sagrada Escritura y a la Tradición.

Desde el momento en que no lo haga así, nuestra obligación, aparte de disentir por escrito o de razonar acerca del error contenido en sus palabras, consiste -sobre todo, y principalmente- en seguir siendo fieles a la Iglesia de siempre, por más difícil que esto sea. Nuestra fidelidad no es tanto al Papa (a tal o a cual Papa) cuanto al Papado, como Institución de origen divino que es. 

Todos estamos deseando (yo al menos lo deseo con toda mi alma) que surja un grupo de cardenales (no sólo el obispo Schnëider, que es el único que ha hablado claro hasta el momento) que saliendo de su silencio, actuasen en defensa de la fe y de los que desean seguir siendo fieles a la Palabra de Dios. Que dieran la cara. Que no tuvieran miedo de Bergoglio.

Si Francisco es acusado formalmente por ellos de herejía, entonces dejaría de ser Papa. Y, en todo caso, si es tan solo un grupo reducido de cardenales, pero ese grupo está en conformidad con lo que siempre ha sido la Iglesia, aun cuando la Iglesia "oficial" los rechazase, ya no tendría potestad sobre ellos. Se produciría una auténtica escisión en la Iglesia, pero tal escisión es necesaria, pues a los fieles cristianos no se les puede escamotear el verdadero mensaje de Jesucristo y sustituirlo por "doctrinas" "cristianas" que, de cristianas no tienen nada.

Un nuevo Papa podría surgir de entre esos cardenales y cambiar muchas cosas, desde el Concilio Vaticano II para acá; en particular, las que se refieren al ecumenismo, al diálogo interreligioso y a la libertad de conciencia, amén de otras muchas más: en particular, y de un modo especial, tendrían que revisar el Novus Ordo Misae (que es una misa que se confeccionó de tal manera que podría ser dicha perfectamente por los protestantes, lo cual no tiene razón de ser). Deberían hacer una revisión, en profundidad, de todos los documentos del Concilio Vaticano II, dando por válidos sólo aquellos que realmente lo fueran.

Sí, solo ellos podrían hacerlo ... pero cada vez son menos, en número; y los pocos que van quedando se les va apartando a lugares de menor influencia o se espera, simplemente, a que se jubilen, o se los jubila por adelantado, antes de que cumplan los 75 años. Es cuestión de tiempo. Y se dispone de poco tiempo.

Y esto último es, precisamente, lo que debiera de urgir a estos cardenales nuestros que, aunque pocos, sigue habiéndolos, para que se enfrentaran sin miedo al Papa, de un modo explícito y le obligaran a rectificar (prácticamente casi todas sus afirmaciones, por desgracia) o a dimitir.

Mientras eso no ocurra,  ni los sacerdotes, ni los obispos, ni mucho menos los seglares, podemos hacer nada ...  en el sentido de declarar hereje al Papa o de decir que el último Papa válido fue Pío XII (sedevacantismo), etc...

Todo eso podría ser ... pero es algo que no nos corresponde a nosotros juzgar. Esa tarea hay que dejársela a Dios, que Él proveerá, con toda seguridad ... Sus caminos tendrá para que todo pueda volver a la normalidad, aunque para ello haga falta que pasen varias generaciones. Lo que sí que es absolutamente seguro es que las puertas del infierno no pueden prevalecer sobre la Iglesia, aunque de ésta quede tan solo "un resto"


¿Cuánto tardará eso en suceder? No podemos saberlo. Pero suceder, sucederá. Porque de Dios nadie se ríe. (Gal 6, 7)

-------

Hasta aquí el pasado ... ¡era cuestión de tiempo! ... Pero al final, ese grupo de cardenales (cuatro en concreto) ha surgido, como ya sabemos, haciendo públicas sus dudas al Papa. Tan solo eran cinco preguntas, las llamadas "Dubia" a las que el Papa tenía que responder sencillamente con un sí o con un no.

Lo que hizo salir a estos valientes cardenales de su silencio fueron las declaraciones de los obispos de Buenos Aires, con "su" interpretación de la Amoris Laetitia, según la cual, de facto, muchos divorciados vueltos a casar civilmente, podrían recibir la sagrada comunión. Esto ocurría el 5 de Septiembre  de este año. Al día siguiente tenían ya la contestación del Papa: "¡Esa es la interpretación correcta de la Amoris Laetitia! ¡No hay otra!"

Tal evento fue la chispa que urgió a estos cardenales a salir de su silencio y a plantearle sus "Dubia" al papa Francisco, en bien de la Iglesia, lo que tuvo lugar el 19 de septiembre en un escrito formal que le dirigieron en privado. Al pasar ya casi dos meses sin haber obtenido respuesta del Papa, estos cardenales hicieron públicas sus "Dubia" el 16 de noviembre, cuatro días antes de acabar el año santo de la misericordia, que fue el 20 de Noviembre, con la festividad de Cristo Rey.

El Papa siguió sin darse por enterado. Y no contestó. De esto he hablado en mi anterior entrada de título: "Un sueño cumplido ... ¡en parte!". Desde entonces hasta ahora ha habido un auténtico enfrentamiento entre cardenales contra cardenales, obispos contra obispos, sacerdotes contra sacerdotes, etc ... Vamos, que el cisma es inminente. Y, en cierto modo, ya ha comenzado.

Mientras tanto, el Papa sigue callando, como si lo que está sucediendo no fuera con él. Y, sin embargo, el cardenal Burke (uno de los cuatro de las "Dubia") habló de un "acto formal de corrección de un error grave". ... en caso de no haber respuesta.

¿A qué se dedica, entretanto, Francisco? ... Pues a hablar de los sacerdotes "rígidos", una cantinela a la que ya nos tiene acostumbrados.

José Martí

NOTA: Sobre los sacerdotes rígidos tenemos, por ejemplo, este corto vídeo:

Duración: 51 segundos

Véase el magnífico artículo de CATHOLICVS: "El papa Francisco, cinco "dubia", tres filósofos y el gravísimo problema del "saturno" en donde en una homilía del Papa en santa Marta (del 9 de diciembre) alude a los sacerdotes rígidos, tristes, insatisfechos,  funcionarios, etc. (yo llamo a esto piropos de misericordia)

Sobre la idea de "rigidez" puede escucharse el fragmento de una homilía del padre Alfonso Gálvez. de unos ocho minutos de duración. Aclara mucho las ideas y merece la pena escucharla.

sábado, 10 de diciembre de 2016

Doce videos sin piedad (Fray Gerundio)


El Verbo encarnado

Uno de mis novicios ha venido a mi celda esta semana. Quería pedirme consejo sobre un trabajo que debe hacer durante las próximas vacaciones navideñas. Había propuesto al profesor revisar en un breve estudio lo que dijeron los Santos Padres acerca del Verbo Encarnado. Pero el teólogo que los instruye, se lo ha prohibido tajantemente. Ya se sabe que ahora los estudios teológicos no son en absoluto acerca de doctrinas periclitadas y culturalmente superadas, ni sobre las dos naturalezas de Jesucristo y tonterías semejantes. Ahora más que estudiar, se trata de investigar, desarrollar y explanar temas actuales periféricos. Casualmente, los temas periféricos siempre se centran en Francisco, con lo cual la periferia se va a freír espárragos. Cuando no tienen que presentar un ensayo sobre la Amoris Laetitia, deben hacer un breve resumen sobre la Laetitia del Pontificado; cuando no es una redacción sobre el Papa de los Pobres, es un montaje sobre el Efecto Francisco o un vocabulario sobre las homilías en Santa Marta, que eso sí es teología de la buena.

Al final, viendo el profesor que mi novicio no se decidía por nada en concreto, le ha obligado a hacerle un trabajo audio-visual sobre los videos del Papa. Esa iniciativa, impulsada por el Espíritu Santo en diciembre de 2015, consistente en mostrar al mundo las intenciones del Papa (por las que hay que rezar siempre, según se nos enseñaba en la antigüedad), en forma de video-mensaje. Una corta grabación destinada a establecer química con el espectador y que transmitiera la necesidad de la oración por los temas que preocupan al sucesor de Pedro.

Mi pobre novicio, que acaba de leerse -por recomendación mía-, el Tratado de Santo Tomás sobre el Verbo Encarnado -para compensar el colesterol malo que le inoculan en las clases modernistas-, no sabe cómo empezar su trabajo. Y teme por su mal aprovechamiento del periodo navideño, si no termina los deberes cuanto antes. La verdad es que una Navidad estudiando estos videos, puede acabar en tragedia. Al menos yo, daría remate a mi vida monástica colgado de la cogulla, antes de llegar al final del primer video.

Lo primero que se me ha ocurrido aconsejar es el título. Dicen que eso es lo último que hay que hacer cuando se escribe algo. Pero en este caso me ha venido la inspiración a la inversa. Porque una vez meditado el título, viene a colación -como si fuera una demostración matemática-, todo lo demás. Me he acordado de una película que pude ver allá por mi juventud, antes de entrar al monasterio, titulada Doce hombres sin piedad. No es que tenga que ver mucho una cosa con la otra. Pero ciertamente, lo primero que se me viene a las mientes es que estos videos del papa son doce videos sin piedad. Son doce videos humanos, excesivamente humanos. Exponiendo problemas puramente humanitarios, poco católicos en su planteamiento y de un sesgo nuevo-orden-mundialista que tira de espaldas.

Si convenimos con toda la doctrina vigente -por el momento-, la piedad es un don del Espíritu Santo. De esos dones de verdad. No de los que ahora aparecen como de saldo, de rebajas o de pacotilla. Es un don que se infunde en el alma con el Sacramento de la Confirmación y no en una reunión de neocatecúmenos, en la que alguno suelta algunas frases inconexas e incoherentes. El don de piedad católico (para concretar), nos lleva a rendir homenaje a Dios como a nuestro padre y -por extensión-, a todo lo que es suyo. Ya nos enseñaban en mis tiempos de noviciado que, según San Agustín, consistía también en no contradecir la Sagrada Escritura. No creo que entrara en el elenco de objetos propios de esta virtud cristiana, el cuidado por cuestiones expresadas en plan populista, tan amadas por la progresía. No me imagino a San Agustín proponiendo a sus fieles en Hipona que acogieran a los bárbaros sin papeles, o que dieran más oportunidades a las bárbaras para que pudieran trabajar fuera de casa.

Mi novicio ha hecho una lista de los temas tratados en los doce videos de marras. Hay que reconocer que no presentan el más mínimo resquicio de piedad. En boca de Bergoglio, suenan todavía más a mensajes de la onu o de la unesco, organizaciones bien conocidas por su catolicismo integral. Estos son los temas teológicos tratados en cada uno de los meses de este bendito año de 2016.
  1. Diálogo interreligioso.
  2. Respeto a la Creación.
  3. Niños y familias en dificultad.
  4. Pequeños agricultores.
  5. Mujeres en la sociedad.
  6. Solidaridad en las ciudades.
  7. Respeto a los pueblos indígenas.
  8. Deporte para la cultura del encuentro.
  9. Para una sociedad más humana.
  10. Labor de los periodistas.
  11. Países acogiendo a refugiados.
  12. Niños soldados.

No se puede pedir más creatividad destructiva a lo largo de todo un año. No sé si continuarán con el desfalco durante el 2017, aunque yo creo que no han tenido el exitazo esperado. Llevamos tres largos años con este sonsonete y con la misma cantinela. Ellos son del mundo, por eso hablan de las cosas del mundo y el mundo los oye… dijo una vez el Espíritu Santo, en la primera carta de San Juan. Claro que San Juan nunca vio estos apasionantes videos en los que claramente se esconde la cruz de Cristo.

Al final, he aconsejado a mi aturullado novicio que se niegue a hacer el dichoso trabajo. Porque tendría que concluir que en la película citada, los hombres sin piedad llegan a la Verdad gracias al empeño y la honestidad del actor principal. Por el contrario, en los doce videos de Francisco, el actor principal enreda a todos los oyentes en la ambigüedad y el desconcierto. En la superficialidad y el naturalismo. Por eso dice Fray Malaquías que a él le aprovecha mucho conocer las intenciones del Papa: para no pedir por ellas. Y yo estoy de acuerdo con él.
Fray Gerundio

viernes, 9 de diciembre de 2016

Un sueño cumplido ... ¡en parte! (por José Martí)



En una entrada de este blog, publicada el 12 de septiembre de este año de 2016, de título "anoche tuve un sueño" (5) , situado en el sueño, hablaba de la situación de gravísima crisis en la que se encontraba la Iglesia católica. Dentro del sueño aparecieron un pequeño grupo de cardenales, del colegio cardenalicio, que se reunieron en secreto en una fecha que yo situaba entre el 13 de septiembre y el 31 de octubre, y que acordaron hacerle frente a Francisco, a causa -sobre todo- de la correcta interpretación de la Amoris Laetitia, que tantos fieles le habían pedido al Papa, pero éste, sin embargo, ni siquiera se dio por enterado.

Esto escribía entonces (insisto en que este contexto está situado en el sueño):

En dicho acuerdo [el del grupo de cardenales] se llegó a la conclusión de que si Francisco seguía adelante con sus "propias" ideas, contrarias al Mensaje Evangélico, le rogarían que dimitiese como Papa, dada su condición de hereje (sea formal o material, eso es lo de menos cuando está en juego el porvenir de la Iglesia)Un Papa hereje es una contradicción. Y como tal se ha estado manifestando (con mayor o menor ambigüedad) a lo largo de los tres años y medio que lleva de Pontificado, siendo aplaudido por todo el sector anticatólico. La Amoris Laetitia fue la gota que colmó el vaso, máxime cuando ya no había, en realidad, otras interpretaciones que las que allí venían indicadas.

[En su viaje de Lesbos a Roma dijo que la interpretación correcta es la que daría el cardenal Schönborncomo si fuera la suya propia, una interpretación que ya conocemos y que se ha comentado extensamente en este blog. Pero por si cabía todavía alguna duda, el 5 de septiembre de 2016 escribió a Monseñor Sergio Alfredo Fenoy, delegado de la Región pastoral de Buenos Aires, una carta en respuesta a un escrito de éste titulado "Criterios básicos para la aplicación del capítulo VIII de Amoris Laetitia", dirigido a los sacerdotes de su Diócesis. Por cierto, el mismo día que apareció dicho escrito, apareció también la carta del Papa, diciendo: "El escrito es muy bueno y explicita cabalmente el sentido del capítulo ViII de Amoris Laetitia. No hay otras interpretaciones. Y estoy seguro de que hará mucho bien"En tal escrito se deja abierta la posibilidad, en algunos casos, de comulgar en estado de pecado mortal, a aquellos que, viviendo en situación de adulterio, siguen haciéndolo y no se arrepienten. Roberto de Mattei lo explica muy bien en un artículo que he colocado en este blog]

Tal enfrentamiento entre el Papa y los cardenales tuvo lugar de hecho[En el sueño, claro está]. No recuerdo el día exacto, pero sé que fue entre el 13 de septiembre y el 31 de octubre de 2016; y si no me falla mucho la memoria me viene a la mente que fue el mismo mes de septiembre, dado que  el 20 de ese mismo mes estaba ya previsto un viaje del Papa a Asís, de carácter interreligioso, con lo que eso supone. Por otra parte, estaba en estudio algo impensable en la Iglesia, como es el diaconado femenino; y, además, eran muchos -comenzando por los más altos Jerarcas de la Iglesia- los que consideraban que el celibato sacerdotal debería de ser voluntario, propuesta que se llevó también a estudio, así como la supresión de la guerra justa ... por decir tan solo alguno de los puntos que recuerdo. En los sueños se difumina la memoria. Pero sigamos.


-----

Escogí en mi sueño el 13 de septiembre de 2016 porque justo ese día se cumplían tres años y medio (cuarenta y dos meses) de la elección de Bergoglio como Papa (la cual ocurrió el 13 de marzo de 2013). Y me vinieron a la mente (aunque no sé exactamente por qué) unas palabras que había leído en el Apocalipsis, en donde se hablaba del poder que el Dragón (el Diablo) había concedido a la primera de las dos Bestias, aquella con diez cuernos y siete cabezas, sobre las cuales había nombres de blasfemia. Una de esas cabezas estaba herida de muerte, pero su llaga mortal se curó. Copio textualmente de la Biblia:

"Y corrió admirada la tierra entera tras la Bestia, y adoraron al dragón porque dio el poderío a la Bestia; y se postraron ante la Bestia, diciendo: '¿Quién hay semejante a la Bestia y quién puede luchar contra ella'?. Le fue dada una boca que profería palabras arrogantes y blasfemias; y se le dio poder para hacerlo durante cuarenta y dos meses" (Ap 13, 3-5).

Reconozco que (ya en la realidad y no en el sueño) cuando llegó  el 13 de Septiembre y, aparentemente, no había ocurrido nada, pensé aquello de que "los sueños sueños son, aunque me di de plazo hasta el 31 de octubre. Tampoco durante ese tiempo salió nada a la luz. Bueno, me dije, "Dios proveerá" ... aunque me rebelaba internamente: ¡Tiene que aparece ese grupo de cardenales ... y hablar, porque es cierto que Dios actúa, pero también lo es que se sirve de nosotros, la mayoría de las veces, para hacerlo! Por eso cuando salió a relucir la noticia de las "Dubia" de los cuatro cardenales al Papa Francisco, me dio un vuelco de alegría en el corazón: ¡Por fin!

Tal evento ocurrió el día 16 de noviembre de 2016 (cuatro días antes del día 20 de noviembre, festividad de Cristo Rey, que ponía fin al año de la "misericordia". Pude leer la noticia en Adelante la Fe (Rorate Caeli) y la inserté en este blog (aquí y aquí) incluyendo también las declaraciones del Cardenal Burke en una entrevista que le concedió a Edward Pentin, vaticanista del NCR, en donde el Burke advierte que si el Papa no aclara la confusión, "harán un acto formal de corrección de un error grave".

Lo que me ha llamado la atención es que dicha petición de aclaración de corrección de errores por parte de los cardenales, en realidad, había tenido lugar ya, en privado, el 19 de septiembre de 2016, fecha importante, que se sitúa tan solo seis días después de los 42 meses de pontificado de FranciscoEs curioso que, además, Francisco estuviese en Asís ese día, celebrando el 30 aniversario del encuentro interreligioso, comenzado por Juan Pablo II en 1986. Sabía, pues, ya lo de las Dubia pero, por lo visto, eso no parecía preocuparle demasiado.


El motivo del título de este post:  "Un sueño cumplido ... ¡en parte!se debe a lo siguiente:

"Sueño cumplido", en tanto en cuanto ha habido, de hecho (no sólo en mi sueño) un grupo de cardenales que se ha enfrentado al Papa, pidiéndole de modo formal que se defina acerca de la Amoris Laetitia.

¡Eran ya muchas las peticiones por parte de los laicos y de grandes personalidades ... ¡pero faltaban los cardenales! ... ¡Era necesario que éstos aparecieran y dieran la cara ... aunque yo esperaba un mayor número de ellos!  No obstante, estoy convencido de que hay muchos más cardenales, que no se han definido públicamente todavía y que están de acuerdo con la postura de estos cuatro valientes ...

Téngase en cuenta que Francisco, en muy poco tiempo, se ha encargado de nombrar ya 44 nuevos cardenales de pensamiento "progre" (llamémosle así) parecido al suyo, con el fin, en mi opinión, de mantener esta "nueva Iglesia" cuando él falte. De modo que el transcurso del tiempo es de vital importancia, por el inmenso número de reformas que se están llevando a cabo, de manera acelerada.

[En mi sueño, se mantiene como Papa durante cinco años exactamente, hasta el 13 de marzo de 2018, en que pasa a la condición de papa emérito, con 81 años, uniéndose a Benedicto XVI, de 90 años en ese momento, que aún seguirá viviendo para entonces: habría dos papas eméritos, vestidos ambos de blanco ... Pero, bueno, esto no deja de ser un "sueño" La verdad es que Francisco va a cumplir ya 80 años, el 17 de diciembre, y que se mantiene con bastante energía todavía. Veo muy difícil que vaya a renunciar]

El grave problema con el que nos encontramos es que el Papa sigue sin darse por enterado. Y son otros los cardenales que están hablando en su nombre, algunos incluso echando pestes de estos cuatro cardenales, tildándolos de herejes y de muchas otras cosas más, no precisamente agradables. Bien es cierto que también han salido otros cardenales y obispos en defensa de los cuatro cardenales. Hay infinidad de escritos en los blogs, en este sentido, algunos realmente muy buenos y objetivos.

De ahí el título de esta entrada: "Sueño cumplido ... "¡en parte!". ¿Por qué Francisco no contesta?

Me parece a mí  que:
  1. Si contesta dando la razón a estos cardenales se pone en contra de la propia Amoris Laetitia, que él mismo ha firmado (aunque en su mayor parte la haya escrito Tucho Fernández) la cual tiene, además muchos cardenales que la apoyan, a los cuales pondría en su contra. Porque, además, teniendo en cuenta todos sus comentarios y afirmaciones en diversos lugares, está muy claro que él piensa conforme a lo que está escrito en la Amoris Laetitia, que viene a ser lo mismo que lo que dice Schönborn, el intérprete que él nombró para ello. Y viene a ser lo mismo que lo que dijo el 6 de noviembre, respondiendo al escrito de los cardenales de Buenos Aires del 5 de noviembre: "El escrito es muy bueno y explicita cabalmente el sentido del capítulo VIII de Amoris Laetitia. No hay otras interpretaciones. Y estoy seguro de que hará mucho bien".
  2. Pero si contesta no dándoles la razón entonces se estaría poniendo "formalmente" y "explícitamente" en contra de las enseñanzas de Jesucristo, lo que conllevaría una herejía formal. Y entonces podría ser depuesto como Papa. De ahí su "rabia" y su enfado

Por eso ni les ha contestado ni piensa hacerlo. ... Y por eso no convocó a todos los cardenales a la hora de la elección de los neocardenales el 19 de noviembre, como siempre se ha hecho en esas ocasones: para no tener que enfrentarse con ellos directamente, dado que podría llevarse una sorpresa "desagradable", al encontrarse que los cardenales que piensan de igual modo, es decir, contrario al de Francisco, no son cuatro, sino unos cuantos más. Posiblemente trece (por decir un número).

De manera que "el cisma está servido". De hecho, en una entrevista reciente con la estación de televisión francesa por internet TV Libertes el pasado 4 de diciembre, al obispo Schnëider,  le preguntaron sobre qué podría pasar si la dubia presentada por los cuatro cardenales permanece sin respuesta, si hay riesgo de cisma en caso de continuar el silencio por parte del Papa. Y ésta fue su respuesta:

“No solo hay riesgo de cisma sino que ya existe un cierto tipo de cisma en la Iglesia. En griego, cisma significa separarse de la totalidad del Cuerpo. Jesucristo es la totalidad del Cuerpo de la Verdad Divina, y la unidad en Su cuerpo sobrenatural es también visible. Pero hoy estamos viendo una extraña forma de cisma. Externamente, numerosos eclesiásticos salvaguardan la unidad formal con el Papa, a veces por el bien de sus carreras o por una especie de papolatría. Y al mismo tiempo quebraron su unión con Jesucristo, la Verdad, y con Jesucristo la verdadera Cabeza de la Iglesia.

Por otro lado, hay eclesiásticos denunciados como cismáticos a pesar de que conservan la paz canónica con el Papa y siguen siendo fieles a Jesucristo, la Verdad, promoviendo Su Evangelio con diligencia.

Es evidente que los que de verdad son cismáticos interiormente, en relación a Jesucristo, utilizan la calumnia con el propósito de silenciar la voz de la verdad, proyectando absurdamente su propio estado de cisma interior en aquellos eclesiásticos que, indiferentes al halago o el vapuleo, defienden las verdades divinas.

De hecho, tal como dicen las escrituras, la palabra de la Verdad Divina no está encadenada. Incluso si un número de oficiales con altos cargos en la Iglesia de hoy oscurecen la verdad de la doctrina sobre el matrimonio y su disciplina inmutable, esta doctrina y disciplina se mantendrán siempre inalterables en la Iglesia dado que la Iglesia no es una fundación humana, sino divina.” [Palabras alentadoras]


Hay escritos muy buenos sobre este asunto. Dedicaré una entrada a realizar una selección de los que considero más valiosos.  Y continúo escribiendo:

-----

Es difícil de prever lo que va a ocurrir pero, desde luego, las consecuencias van a ser muy graves. Y, sin embargo, en mi opinión, es preferible que esto ocurra para que se pongan de manifiesto las verdaderas intenciones en los corazones de los hombres con relación a Dios, ante quien no tenemos más remedio que definirnos, necesariamente, bien en un sentido o bien en otro. Con Dios no valen las "medias tintas", o el "nadar y guardar la ropa".

En la respuesta que demos a Dios nos lo jugamos todo, tanto nuestra felicidad en esta vida como en la otra.  Dios quiere nuestra respuesta amorosa porque su amor por nosotros es verdadero. Y el amor siempre es recíproco. De ahí que esté tan interesado por nuestra respuesta, porque verdadero es el Amor que ha querido que se dé entre Él y cada uno de nosotros.

Para que nos vayamos definiendo y tomemos una opción con relación a Él, que tiene que ser libre, necesariamente (o no habría tal amor) tenemos toda nuestra vida por delante ... sin olvidar que, dado que no conocemos cuando nos llegará la hora, tenemos que estar continuamente vigilantes. Nuestra respuesta ha de ser para hoy: "Ojalá escuchéis hoy su voz. No endurezcáis vuestro corazón" (Salmo 95, 7-8)

Dios, manifestado en Jesucristo, nos da continuamente todas las gracias que necesitemos para permanecer fieles. Y esto independientemente de que seamos pecadores y de que tengamos muchos fallos, pues si los reconocemos como tales fallos y pecados estaremos en la verdad, estaremos en Él que dijo de Sí mismo: "Yo soy la Verdad" (Jn 14, 6) y "Todo el que es de la verdad escucha mi voz" (Jn 18, 37). Y no debemos olvidar también esto otro que dijo: "Si no hubiera venido y les hubiera hablado, no tendrían pecado. Pero ahora no tienen excusa de su pecado" (Jn 15, 22)

Para salir de nuestra situación de pecado no tenemos más que poner los medios que Él ha establecido para ello. Una vez bautizados y siendo, por lo tanto, miembros de la Iglesia, tenemos que hacer uso del sacramento de la confesión, con inmenso dolor por haberle ofendido y con el propósito firme de no volver a hacerlo. En la confesión recibimos la gracia suficiente para que esto sea posible. Y luego, estando ya en estado de gracia, podemos recibir la sagrada Comunión, esto es, a Él mismo, que es el autor de toda gracia. Sólo en Él podemos salvarnos.

Ésta es, pues, la confianza que tenemos, puesto que sin Él no podríamos salir de nuestra situación de pecado: "Sin Mí nada podéis hacer" (Jn 15, 5) En cambio, si Él está junto a nosotros y en nosotros, nada podrá separarnos de Él, absolutamente nada ni nadie y lo podremos todo, según el decir de san Pablo: "Todo lo puedo en Aquel que me conforta" (Fil 4, 13)

Así -y sólo así- estaremos actuando como nos conviene. No debemos albergar duda alguna sobre esto: Dios conoce nuestras verdaderas necesidades y sabe qué es lo mejor para nosotros mejor que nosotros mismos.  El someternos a su voluntad no nos esclaviza sino que es lo que nos hace auténticamente libres, dado que sólo "el que comete pecado es esclavo del pecado" (Jn 8, 34).

Todo esto, desde luego, no podemos entenderlo si no es desde la fe. De ahí la necesidad de la fe; y de ahí también la necesidad de pedírsela al Señor sin cesar y sin cansarnos, con la seguridad absoluta de que nos la concederá: "Pedid y se os dará" (Mt 7, 7), nos ha dicho Jesús. Por lo tanto, lo hará. Cierto que lo hará cuando Él así lo disponga, pero lo hará, pues nos quiere demasiado como para no oír nuestro clamor y la necesidad que tenemos de Él y de su Presencia: "¿Es que puede una mujer olvidarse de su niño de pecho, no compadecerse del hijo de sus entrañas? ¡Pues aunque ellas se olvidaran, Yo no te olvidaré" (Is 49, 15).

Es Él mismo quien más interesado está en que lo queramos, por nuestro propio bien. De ahí que debamos de insistirle, una y otra vez, manifestándole así nuestra confianza y nuestro amor. Éstas son sus palabras: "Si vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más el padre del cielo dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan?" (Lc 11, 13)

Entre las muchas cosas que dijo Jesús, todas importantes, por supuesto, me vienen ahora a la mente las siguientes, dirigidas a sus discípulos: "Sea, pues, vuestra palabra: 'Sí, sí', 'No, no'. Lo que pasa de esto del Maligno procede" (Mt 5, 37).

Y también: "El que no está conmigo está contra mí; y el que no recoge conmigo desparrama" (Mt 12, 30). "Ningún criado puede servir a dos señores, porque o tendrá odio a uno y amor al otro, o prestará su atención al primero y menospreciará al segundo: no podéis servir a Dios y a las riquezas" (Lc 16, 13).

De manera que, aunque es cierto que hay cosas opinables, en las que no se puede ser tajante, y que pueden admitir matices ... también es verdad que hay cosas que o son blanco o son negro (y no hay otra opción posible) en contra de lo que afirma Francisco. Y una de estas cosas, muy clara y que no deja lugar a dudas, relacionada con el tema que nos ocupa, pronunciada por el mismo Jesucristo, es la siguiente: "El que repudia a su mujer y se casa con otra, comete adulterio; y el que se casa con la repudiada por su marido, comete adulterio" (Lc 16, 18).

Es así de sencillo, como sencillo era el Señor. ¡Hay que ver cómo nos complicamos la existencia ... y nos hacemos así desgraciados, pudiendo ser felices! Esto es sólo una muestra de lo que ocurre cuando el hombre se separa de Dios, o expresándolo mejor, cuando se separa de Jesucristo.

José Martí
-->

sábado, 3 de diciembre de 2016

Este es el homosexualismo que Cifuentes enseña a nuestros hijos desde los cuatro años (Pablo Ferrer)

FUENTE: HISPANIDAD

Este es el homosexualismo que Cifuentes enseña a nuestros hijos desde los cuatro años

  • ¿Alguien ha visto “chicas con pene” y “chicos con vulva”? La presidenta de Madrid, sí.
  • Mensaje principal: las personas tenemos distintas orientaciones del deseo sexual, que nada tienen que ver con el sexo de cada uno.
  • Es decir, el nacimiento es un mero accidente y lo importante es el sentimiento de cada uno.
  • Y el que no esté de acuerdo será perseguido hasta que ceda o… hasta la cárcel.
  • Es donde Cifuentes quiere enviar al director del colegio Juan Pablo II.
  • Y varias asociaciones gays han demandado a Hazte Oir por difundir un libro en el que explican el adoctrinamiento sexual en los colegios.
Atención, pregunta: ¿Qué es Cristina Cifuentes, hombre o mujer? No se precipiten, que la pregunta tiene trampa y según lo que digan les pueden tachar de homófobos, intolerantes, intransigentes y un montón de cosas más. Incluso pueden acabar en la cárcel. Porque la única persona que puede responde a esa cuestión es la propia Cifuentes, que a estas alturas, imaginamos, ya habrá elegido qué quiere ser: si un chico con vulva o una chica con vulva. Eso siempre que no se opere y se dupliquen las posibilidades.
Todo esto, un auténtico disparate, es lo que la presidenta (o presidente, ya me entienden) de la Comunidad de Madrid, quiere enseñar a los niños de educación infantil, esto es, de tres y cuatro años. “Hay chicas con vulva… y chicas con pene” y “hay chicos con vulva… y chicos con pene”, se lee en una de las guías destinadas a los más pequeños.
Pero ojo, porque los alumnos de 10 y 11 años ya están sufriendo el adoctrinamiento homosexualista. Lo explica fenomenalmente bien Julián Lozano en su blog. Este sacerdote de Getafe asistió a una charla sobre “diversidad sexual y de género”, destinada a padres de alumnos de un colegio público de Madrid. No se lo pierdan. Merece la pena.
Lozano cuenta cómo esa misma mañana, los alumnos de quinto y sexto de primaria tuvieron una “dinámica” en la que les preguntaban si “lo normal es que a los chicos les guste las chicas y viceversa” y “si una chica lo es porque tiene cuerpo de chica”. Al final, los coordinadores les daban “la respuesta correcta”, según el guión. ¿Entienden ahora por qué les decía que no se precipitaran con Cifuentes?
El mensaje principal que se quiere implantar es tan claro como disparatado: las personas tenemos distintas orientaciones del deseo sexual, que nada tienen que ver con el sexo de cada uno. Es decir, el nacimiento es un mero accidente. El hecho de ser hombre, mujer, gay, lesbiana, todo a un tiempo o sólo los años bisiestos, depende únicamente de nuestro sentimiento interno.
Y el que no esté de acuerdo, a la cárcel. No es broma. Es lo que quiere hacer Cifuentes con el director del colegio Juan Pablo II. La persecución se ha disparado y varias asociaciones gays han demandado a la plataforma ciudadana Hazte Oir por difundir el libro ¿Sabes lo que quieren enseñarle a tu hijo en el colegio? (la imagen es del libro), en el que explican el adoctrinamiento sexual que sufren los más pequeños. Merece la pena leerlo.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com