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sábado, 20 de enero de 2018

A propósito de una homilía de Fray Nelson Medina, sobre el Bautismo de Jesús (por José Martí) [2 de 2]

Haga clic aquí para leer la parte [1 de 2]

Lo esencial del arrepentimiento no es tanto el sentimiento que yo pueda tener como persona, hacia mí mismo y por mi propia historia. Lo más importante del arrepentimiento es el amor que produce dolor de que Dios haya sido ofendido y esa esencia del arrepentimiento como dolor de amor eso es lo que Cristo manifiesta en el bautismo
Más de lo mismo. La esencia del arrepentimiento hace referencia a la persona que se arrepiente y que, en consecuencia, manifiesta ese dolor de amor a Dios, por haberlo ofendido. El arrepentimiento -se hace necesario recordarlo una vez más- es, exclusivamente, personal.  Podemos leer, a este respecto, el salmo 51, que es un reconocimiento de la propia culpa y una súplica esperanzada y confiada en la compasión y en la misericordia de Dios: "Contra Tí, contra Tí sólo he pecado, y he hecho lo que es malo a tus ojos" (Sal 51, 6), pero "un corazón contrito y humillado, Dios mío, Tú no lo desprecias" (Sal 51, 19)
eso es lo que nosotros también estamos llamados a vivir.¿De qué manera? Pues es importante que nosotros nos arrepintamos
Sí, pero arrepentirnos de "nuestros propios pecados personales"
y sintamos dolor porque Dios está siendo ofendido.
Claro que sí: eso en todos los casos.
No necesariamente ni solamente por los pecados que cada uno de nosotros comete en particular.
Si el pecado es personal, como lo es, yo no puedo arrepentirme del pecado que otro haya cometido, por más que lo sienta y por más que lo sufra en mi propia carne.
Pensemos en el caso del aborto. Si nos damos cuenta, el aborto es una vergüenza, es una desgracia de la humanidad. Pero hay muchas personas que no han abortado, sin embargo, aquéllos que no tienen nada que ver con el aborto, que nunca han recomendado el aborto, que pueden estar en contra del aborto también sienten dolor porque siguen cometiéndose abortos.
Por supuesto. Faltaría más. Pero una cosa es sentir dolor y otra muy distinta es ser culpable. Sólo el que es culpable de "algo" puede arrepentirse de ese "algo" que ha cometido.

Insistiendo en lo que dije más arriba, con relación a Jesús, vuelvo a repetir o a recalcar que sí, Dios se hizo pecado en Jesucristo, pero no se hizo pecadorSe sintió pecador delante de su Padre como si él hubiese cometido todo el pecado de la humanidad, que el asumió en su naturaleza. Pero una cosa es sentirse y otra muy distinta es ser.

Además -volvamos a repetirlo- el arrepentimiento es de la persona y la persona de Jesucristo es divina. Jesucristo es Dios ... Y Dios no conoce el pecado, ni puede conocerlo, pues éste supone un rechazo a Dios: ¡Dios no puede rechazarse a sí mismo! ...  Eso es una contradicción y un sinsentido. Y mucho menos arrepentirse de haberse rechazado, puesto que no lo ha hecho. Y siendo Él la Verdad, como lo es, no cabe mentira en Él. Comprobamos, una vez más, el enorme peligro del lenguaje, cuando se usa mal; o sea, cuando al hablar no se busca el diálogo verdadero y la verdad sino convencer a otro de las propias "ideas", si es que se pueden llamar "ideas" a las mentiras. Esto es muy propio de los modernistas, tanto en el terreno político (en donde está más claro que el agua) como también en el terreno de la Religión ... y concretamente, en el de la Religión católica, que es lo que ahora estamos considerando.

[Aprovecho esta entrada para dar alguna idea sobre una verdad fundamental de nuestra fe: la relativa a la Redención.

Dios, en la segunda Persona, que es el Hijo, haciéndose hombre (misterio de la Encarnación del Hijo de Dios) asume la naturaleza humana y toma sobre sí todo el pecado de la Humanidad, de todos los hombres de todos los tiempos y lugares. Y de este modo, presentándose como pecador ante su Padre, no siéndolo, la Humanidad entera queda justificada del pecado de adán, un pecado que impedía que el hombre pudiese entrar en el Cielo: los justos -como sabemos- iban al seno de Abrahán, el equivalente al limbo de los niños. A esto es a lo que se llama Redención objetiva.

Su Amor por nosotros le llevó a hacerse hombreDe este modo, las puertas del cielo quedaban abiertas a todos los que habían vivido conforme a su voluntad, antes de su venida a este mundo, los llamados justos, según el antiguo testamento, así como a todos aquellos que, posteriormente (¡ésos somos nosotros!) procedieran en conformidad con lo que Dios había revelado en su Hijo, es decir, en Jesucristo. 

Se salvará aquél que quiera ser salvado, haciendo uso de los medios que Dios ha dispuesto para ello. Antes de la venida de Jesús, tal salvación era imposible, aun cuando se pusieran los medios adecuados, como era el cumplimiento de la Ley. 


Ahorauna vez que Cristo ha venido, no estamos bajo la Ley sino bajo la graciaque es la que nos salva ... Pero sigue siendo cierta la necesidad del cumplimiento de los mandamientos de la Ley de Dios.  Es lo que se conoce con el nombre de Redención subjetivaTenemos la posibilidad de salvarnos, que antes no teníamos, pero tal Redención está condicionada a nuestra respuesta a su Amor. Jesús fue muy claro en este sentido:  "Yo no he venido a destruir la Ley sino a darle cumplimiento y llevarla a su plenitud" (Mt 5, 17). Y, en otro lugar: "Si me amáis, guardaréis mis mandamientos" (Jn 14, 15).]

Pero continuemos con nuestro análisis de lo dicho por Fray Nelson, quien afirma lo siguiente:
El dolor que sentimos por el daño irreparable que se comete a esos seres inocentes y, sobre todo, por la ofensa que se comete contra Dios, ese dolor de amor yo lo puedo tener, aunque no haya abortado ni recomendado el aborto. Yo puedo sentir ese dolor.
Sí pero yo no soy responsable de haber abortado ni de haber colaborado al aborto. Luego no puedo arrepentirme de un pecado que no he cometido. Una cosa es el dolor de amor y otra ser responsable del pecado cometido por otra persona. Esto es así en las personas humanas, luego también -con mayor razón- lo es en la persona divina que es Jesucristo.
La fiesta del bautismo del Señor es una invitación a la solidaridad en el dolor de amor. Eso fue lo que llevó a Cristo a orillas del Jordán y eso también tiene que obrar en nosotros; o sea que participamos de esta fiesta de un modo muy hermoso cuando nos damos cuenta que el dolor de amor que tuvo Cristo también lo podemos tener nosotros.
Por supuesto. Esto es algo que no se puede poner en duda. Y es más: este dolor es tanto más efectivo cuanto más unidos estemos a Jesucristo.
¿Cómo llama la Iglesia a ese dolor de amor? Ese dolor de amor con el que yo quisiera reparar el daño que se ha cometido a la gloria divina precisamente es amor de reparación.
Correcto
Reparar es eso. Es cubrir de amor, de un amor sobreabundante, de un amor excesivo, cubrir de amor el corazón herido del Señor. Es como sentir que si otros se han quedado cortos en su amor por la razón que sea, nosotros queremos ser excesivos en el amor. Y es ese exceso de amor el que lleva a Cristo a sentir dolor porque Dios está ofendido. Y la buena noticia es que ese mismo exceso de amor también lo puedes sentir tú. Tú también puedes unirte al exceso de amor de Cristo, pidiendo a Dios perdón y misericordia y cubriendo con tu corazón agradecido, con el amor de tu corazón agradecido, el corazón ofendido y lastimado del Señor.

Que de esta fiesta saquemos entonces exceso, sobreabundancia de amor y capacidad de ofrecer nuestros sufrimientos, nuestras persecuciones, nuestros insultos, lo que tengamos que sufrir, y también nuestras penitencias, en reparación al amor de Dios ofendido.
Bueno, lo cierto es que nuestros sufrimientos, persecuciones, etc..., es decir, nuestro amor ... en sí mismo ... no puede reparar nadaSólo en unión con Jesucristo, sólo formando parte de su Cuerpo Místico, que es la iglesia, y sólo si estamos en gracia de Dios (es decir, si su Espíritu está en nosotros) tenemos esa posibilidad de reparación ... Que para eso se encarnó el Hijo de Dios, entre otras cosas (antes de su venida, tal reparación era imposible, como sabemos)


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Lo que debería de quedar muy claro, tras este razonamiento, es que nosotros no somos responsables -de modo directo- de los pecados personales que otros cometen, sólo de los nuestrosCon relación a ellos, sólo nos queda sufrir y pedir a Dios por su salvación, puesto que queremos su bien y vemos que van mal encaminados; pero la responsabilidad de su propia vida es única y exclusivamente suya.

No obstante, puestos a matizar, se podría decir que, en cierto modo, tal vez (esto sólo Dios lo sabe) podríamos serlo de un modo indirecto en el sentido de haber contribuido, de alguna manera, con nuestros propios pecados personales (bien sean de acción u omisión) a dañar a los demás, incluso aun cuando no hayamos sido conscientes de ello.


Aunque dado que tal daño no ha sido buscado directamente [pues en ese caso estamos] se podría hablar, quizás, de una responsabilidad indirecta, aunque real. Claro está que esto nos lleva de lleno al terreno del Misterio del Cuerpo Místico de Cristo, conforme a lo que decía san Pablo: "Ahora me alegro en los padecimientos por vosotros y completo en mi carne lo que falta a la Pasión de Cristo por su Cuerpo, que es la Iglesia" (Col 1, 20), en cuyas profundidades no podemos ahora introducirnos. 


Pero supuesto que esto sea así -y tiene visos de serlo- podríamos orar a Jesús diciéndole: Señor, si yo, con mis acciones u omisiones, he contribuido, de alguna manera, aunque sea inconsciente, al pecado de otra persona, te pido perdón por ello. Y luego, comprometernos, delante del Señor, a serle fieles toda nuestra vida, en unión con Él, pues eso contribuirá, de igual modo a la salvación de muchos. Dicho de este modo, habría que darle algo la razón a Fray Nelsonen lo que se refiere a nosotros.

Sin embargo, hay algo que es cierto, de un modo absoluto, sin matices de ninguna clase ... y es que Jesucristo, que no cometió jamás pecado alguno, ni podía cometerlo, no es responsable, ni siquiera indirectamente, del pecado de otros. De manera que es completamente absurdo decir que Jesús se arrepintió de los pecados que nosotros hemos cometido, tal y como dice Fray Nelson, contra quien nada tengo, ni a quien conozco, ni tengo referencias suyas. Pero en esto, concretamente, está del todo equivocado. La verdad tiene que primar por encima de cualquier otro tipo de pensamiento, por muy bien intencionado que éste sea.

Y hay más. Pongamos como ejemplo el caso del aborto, al que alude Fray Nelson. Pues bien: No sólo Jesús no puede arrepentirse de ese pecado, que Él ni ha cometido ni puede cometer, por más que sienta dolor de amor. Es que tampoco puede responder ante su Padre en favor del asesino, si éste no colabora ... "colaborar" en el sentido de que se arrepiente de corazón del pecado grave que ha cometido. 

¡Dios no hace las cosas en lugar nuestro, sino que cuenta con nosotros! Tal es el amor que nos tiene. Nos ha hecho libres, de verdad, y esto llega hasta el extremo de que, por mucho que Él quiera y por mucho que nos quiera, como así es, aun cuando sea Dios, como lo es, no podrá perdonar nuestros pecados si nosotros no queremos ser perdonados. Y esto por una razón muy sencilla ... y es que no puede forzar nuestra libertad, obligándonos al arrepentimiento

Pero como nos quiere -hasta el extremo de haberse hecho hombre y de haber dado su Vida para salvarnos-tenemos la completa seguridad de que podemos contar -si le dejamoscon la gracia suficiente que nos haga capaces de arrepentirnos, y de dolernos de nuestros pecados, para podernos perdonar, que ninguna otra cosa desea con más fuerza. Y aquí nosotros sí que podemos ayudar, con nuestras penitencias y oraciones por estas personas que rechazan el arrepentimiento. Unidos a Jesús, a la Virgen María y a todos los santos, podemos colaborar a la salvación eterna de estas personas.


Si llegan a arrepentirse, aprovechando la gracia que Dios les concede, entonces la Redención objetivaconseguida para nosotros por Jesucristo, mediante su muerte en la cruz, por todos los hombresse transforma en una Redención subjetiva y real para aquellos que han optado finalmente por Dios y por su Amor.


José Martí

A propósito de unas palabras de Fray Nelson Medina, sobre el Bautismo de Jesús (por José Martí) [1 de 2]

Haga clic aquí para leer la parte [2 de 2]



Un amigo me envió un e-mail, hace diez o doce días, diciéndome:

"Te mando este documento porque cuando lo he leído me ha impactado"

Me adjuntó un documento en el que estaba transcrito lo que Fray Nelson Medina había predicado en una homilía del 7 de enero de este año, sobre el Bautismo de Jesús, la cual puede escucharse haciendo clic aquí  (Duración 7:02 minutos).


A los dos o tres días pude leerlo y, efectivamente, es como para quedar impactado ... aunque, tal vez, con un impacto diferente del que experimentó mi amigo. 

Yo no conozco a Fray Nelson Medina, de modo que me limitaré a poner por escrito lo que él dijo y, a continuación, explicar -lo mejor que sé- aquello que, en mi opinión, puede inducir a confusión o a error en el oyente: ¡No tendría por qué ser así, puesto que quien habla es un sacerdote y yo un simple laico! ..., pero aquí lo que importa y lo que está en juego no es la persona que habla (Fray Nelson, yo o Perico de los palotes). Lo decisivo, lo único que importa, en este momento -como en todos- es la verdad de las cosas, a la cual debe estar sometido nuestro entendimiento, pues, como dice san Pablo, "nada podemos contra la verdad sino en favor de la verdad" (2 Cor 13, 8). 

Entre esas verdades se encuentra todo lo que siempre se ha enseñado en la Iglesia a través de los siglos y que, en este caso concreto, es, además, de sentido común, cual es la responsabilidad de la propia vida y de los propios actos, ante Dios: "Cada uno recibirá la recompensa según su trabajo" (1 Cor 3, 8). "He aquí que vengo pronto y conmigo mi recompensa para dar a cada uno según sus obras" (Ap 22, 12) ... 

Hay un sinfín de citas en este sentido. ¡Y es lógico que así sea! ¿Cómo voy a responder  yo de unos pecados que no he cometido? Sería absurdo. Pues en Jesucristo, hombre como nosotros, excepto en el pecado, ocurre exactamente igual, como no podía ser de otro modo.

Voy escribiendo la Homilía de Fray Nelson en letra cursiva, tal como fue pronunciada, y debajo de algunas afirmaciones o de ciertos párrafos, escribo también -al mismo tiempo- lo que yo pienso, al respecto, con este mismo tipo de letra (aunque, a veces, use la negrita, el subrayado o el color) para que no haya confusión.

Lo que escribo aquí coincide, básicamente, con la respuesta que di a mi amigo, aunque me he explayado en algunos puntos, de tipo doctrinal, con vistas a hacerme entender mejor por un mayor número de personas. Tal es, al menos, mi deseo.


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En la fiesta del Bautismo del Señor hay una pregunta que con frecuencia nos hacemos: ¿por qué tenía que bautizarse Jesucristo? En efecto, sabemos que el bautismo de Juan era bautismo para pecadores y sabemos que en Cristo no hay pecado. Entonces ¿por qué tenía que bautizarse Jesucristo?

La respuesta la encontramos en el hecho de que la predicación de Juan aunque llamaba a conversión a cada uno era fundamentalmente un mensaje de exhortación para el pueblo como tal, porque antes de cruzar el río Jordán, camino de la tierra prometida, los israelitas con una sola voz dijeron: obedeceremos al Señor y, puesto que fue el pueblo el que dijo ese sí que luego no cumplió, también ha de ser el pueblo el que manifieste su arrepentimiento,
Esto es lo que suele llamarse pecado social: todos son culpables ... lo que, evidentemente, es falso. Desde luego, el grado de culpabilidad, en caso de haberlo, no puede ser el mismo para quien ha cometido un pecado que para aquél que no ha cometido ese pecado. Habrá cometido otros pecados, y de ésos sí que tendrá que dar cuenta ante Dios, pero de ésos y no de otros.
es decir, puesto que el pecado ha cubierto a todos, el arrepentimiento ha de cubrir a todos
En Adán todos pecamos (pecado de naturaleza) pero el pecado personal fue sólo de Adán y Eva, que -eso sí- tuvo consecuencias trágicas para toda su descendencia ... Todos nacemos en estado de pecado original (pensemos en los conocimientos de genética que hoy se tienen, en lo que se refiere a la transmisión de ciertos caracteres genéticos de padres a hijos). 

Pero los hijos no son responsables del pecado de sus padres. Esa es la razón por la que un niño no bautizado no puede ir al infierno, puesto que no ha cometido ningún pecado personal y, por lo tanto, no es culpable. Ciertamente, no puede ir al Cielo, puesto que no posee la gracia santificante, la cual es recibida en el sacramento del bautismo, y es necesaria para poder ir al Cielo. Su lugar en el otro mundo será así el de una situación de felicidad natural, puramente humana: es lo que llamamos Limbo. Dios no es injusto con él, puesto que lo sobrenatural -por definición- es gratuito, es un don, es pura gracia ... no es algo exigible a Dios por parte del hombre
y, aunque Cristo como persona no fuera solidario con sus hermanos en cuanto al pecado,
Decir que Cristo no tuvo pecado (como así fue, puesto que, siendo Dios, no puede conocer el pecado) no significa que no fuera "solidario" con nosotros [¡Y más que solidario! Esta palabra es un invento humano. ¡Lo suyo fue Amor en estado puro, muy superior a cualquier tipo de solidaridad!] Dice san Pablo en su carta a los corintios: "a Aquél que no conoció pecado, [Dios] le hizo pecado por nosotros [¡expresión misteriosa!] para que nos hiciéramos justicia de Dios en Él" (2 Cor 5, 21). ¿Cabe mayor solidaridad de Dios con nosotros que ésta?

Se hizo uno de nosotros, semejante en todo a nosotros, menos en el pecado Se vio ante su Padre como pecador -¡no siéndolo!- para que la justicia de Dios, que exigía reparación por el pecado cometido por nuestros primeros padres, alcanzase en Él su satisfacción: Él satisfizo por nuestros pecados ante su Padre, lo cual fue posible porque se hizo uno de  nosotros, haciendo suya nuestra naturaleza humana. Y lo hizo porque al ser la ofensa infinita, en razón de la Persona ofendida, se requería de una reparación infinita. Tal reparación sólo Dios podía llevarla a cabo, porque sólo Dios es infinito. Jesucristo, al ser Dios, hizo posible que esto se hiciera realidad. Él es el nuevo Adán: "Donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia" (Rom 5, 20)

[No hay que olvidar que el pecado no es algo esencial a la naturaleza humana. Dios creó al hombre sin pecado alguno. El pecado sobrevino después, como consecuencia de la desobediencia y de la soberbia de nuestros primeros padres, que se dejaron engañar por el Diablo. El pecado es, pues, algo postizo, algo añadido, pero no es un constituyente de la naturaleza humana. Insisto. No debemos olvidarlo]
sí quiso ser solidario con sus hermanos en cuanto al arrepentimiento.
Pero, ¿de qué se iba a arrepentir Aquél que no conoció pecado?
Este es un aspecto muy bello. Yo puedo arrepentirme de los pecados que yo he cometido, pero pregunta: ¿puedo arrepentirme de los pecados que otras personas han cometido?
¡Por supuesto que no puedes!
Ese es el tipo de humildad y arrepentimiento que Cristo parece manifestar en su bautismo, y la respuesta es que sí es posible ese arrepentimiento.
En realidad ésta es la frase clave de toda la homilía, la frase que impacta ... a mi amigo, a mí y pienso que a cualquiera ... 

Pero ... :  ¡"Fray Nelson dixit"! 

Fray Nelson interpreta el hecho del bautismo de Jesús como que Jesús estaba arrepentido ... Así, sin más ... sin explicaciones ... porque a él le parece. Y la respuesta correcta no es lo que le parezca a Fray Nelson, sino la enseñanza constante de la Iglesia, tanto en este punto de la Doctrina como en todos los demás. Jesús se bautizó porque quiso ser semejante a todos nosotros en todo (menos en el pecado). Es así de simple. No hay que darle tantas vueltas a la cabeza, ni hacer tantos vericuetos mentales ... máxime cuando la conclusión a la que se llega es absurda.

Jesús era un personaje extraordinario, pero no era un bicho raro. Por eso nació bajo la ley, con san José como padre "legal", fue presentado en el templo como era costumbre hacer con los primogénitos, pagó sus tributos al César (aun cuando no estaba obligado a ello (Mt 22-27), etc... ¡Y por eso mismo también se bautizó, como hacían aquellos judíos que tenían a Juan Bautista como un profeta! Bautizándose, Jesús reconoció ante todos -y en contra de los fariseos- que Juan Bautista, "esa voz que grita en el desierto" (Jn 1, 23), era realmente un profeta auténtico ... Y además, su precursor, como bien sabemos.

Se hace preciso insistir en un hecho, que es dogma de fe, y que todo católico debiera conocer ... Y es la unión hipostática que se da en Jesucristo, que es una Persona Divina (el Hijo, el Verbo de Dios) con dos naturalezas, la Divina (que no pierde al hacerse hombre) y la humana (pues asumió realmente, sobre sí, la naturaleza humana, sin dejar de ser Dios). Jesucristo es verdaderamente Dios y es verdaderamente hombre. Eso sí: su "Yo", que hace referencia a su Persona, es divino: "Os lo aseguro: antes de que Abrahán naciera, Yo soy" (Jn 8, 58). Su naturaleza divina no se deja traslucir al exterior (salvo en contadas ocasiones, como en el caso de su Transfiguración en el monte Tabor), porque no era esa la misión que el Padre le había encomendado. Así, cuando quisieron hacerle rey (Jn 6, 14-15), se retiró a un monte a orar, Él solo

Siendo Jesucristo el Dios-hombre, tal como se ha dicho, tal "arrepentimiento" de Jesús es absolutamente imposible

El conocimiento teológico de Fray Nelson, al menos en este punto concreto, deja mucho que desear; en otras palabras: comete un grave error hablando de ese modo, puesto que está dando como un hecho -porque así le parece a él- algo que es metafísicamente imposible y, por lo tanto, mentira 

[¡No juzgo sus intenciones: esa prerrogativa es sólo de Dios! Pero sí el error en el que incurre y en el que puede hacer incurrir a muchos de los que lo leen o escuchan que, por lo que he podido ver, es muchísima gente. Tiene una gran responsabilidad, ante Dios, que lo ha de juzgar, de adquirir una formación teológica ortodoxa, que esté conforme con el sentir de la Iglesia de siempre ... y no con las corrientes de tipo modernista que tanto abundan hoy en esta Iglesia nuestra que, por desgracia, navega a la deriva]

Y continúa diciendo Fray Nelson:
¿Por qué es posible? Porque lo más importante del acto del arrepentimiento es el amor con el que reconocemos, dolorosamente, que Dios ha sido ofendido.
Otra falsedad: Yo puedo darme cuenta -y reconocer- que Dios está siendo ofendido y si quiero a Dios ¿cómo no voy a sufrir por ello? ... ¡Pero no puedo estar arrepentido, aunque quisiera, del mal que otra persona ha cometido! Lo único que puedo hacer es pedirle a Dios que le conceda a esa persona la gracia actual que necesita para que sea capaz de tomar conciencia de sus pecados y pueda así arrepentirse de ellos. Puedo -y debo- orar por él. Pero no puedo "arrepentirme" por él. El arrepentimiento de los pecados es personal. Y ni siquiera Dios puede arrepentirse por mí. Estaría usurpando mi personalidad y sustituyendo mi yo, lo que sería un atentado contra mi libertad y mi consiguiente responsabilidad como persona.
Continúa

viernes, 19 de enero de 2018

Según el cardenal Koch, los cristianos deberían de "convertirse" al ecumenismo. Otras noticias de Gloria TV


Noticias varias 16 a 18 de enero




Abuso sexual: el obispo de Osorno tiene un súper abogado: el papa Francisco (Katholisches)

FORNICANDO EN DEFENSA PROPIA, “La Alegría del Amor”. ¿Cuándo la fornicación no es realmente fornicación? (Dominus est)

El minimalismo, enfermedad del catolicismo contemporáneo (De Mattei, en Adelante la Fe)



Semana de oración por la unidad de los cristianos. Algunos textos tal vez incómodos (Padre Jorge)






La anticoncepción: intrínsecamente mala (The Catholic Things)

Obispo de Puerto Maldonado (Perú) afirma que los pobladores de la Amazonía tienen que ser sus propios evangelizadores (Secretum Meum Mihi)

Francisco respalda categóricamente a Obispo de Osorno: "No hay una sola prueba en contra, todo es calumnia" (Secretum Meum Mihi)

El obispo auxiliar de Kazajistán aprendió su amor por la verdad de la Iglesia mientras crecía bajo el régimen soviético ateo. (Edward Pentin)

ROMPIENDO: El administrador de Trump crea una oficina para 'proteger' las conciencias de los médicos que se niegan a hacer un aborto (Life Site News)

Matrimonio celebrado en vuelo, el último del Papa (La Nuova Bussola Quotidiana)

Desde una playa chilena, el Papa aplaude saber cómo divertirse (Crux)

"SCANDALOSO: Andrea Grillo presenta el artículo de un sacerdote teólogo educador de un seminario. La Eucaristía reducida a un acto de "erotismo". Pedimos la intervención de la Santa Sede " ( Fra Cristoforo)

Pieronek responde a Chiodi: "Nunca recurso legal a los anticonceptivos artificiales" (La Fede Quotidiana)

Selección por José Martí

La Doctrina Católica no está sujeta a "cambios de paradigma" (Padre Gerald Murray). Otras noticias de Gloria TV

RING, RING (Capitán Ryder)




El pasado día 10 de enero nos enterábamos que el Papa Francisco había llamado al teólogo José María Castillo. La noticia se hacía pública a través del propio blog del interesado, alojado en el portal Religión Digital.

En la conversación, de 10 minutos de duración, Francisco le decía “Quiero agradecerle lo que Usted está haciendo por mí”.

Esta frase llamó mi atención pues si don José María estaba haciendo algo bueno por el Papa es de suponer que también lo haría por la Iglesia.

A pesar de las reticencias que inspira la página web pensé que el blog del teólogo sería distinto si había recibido semejante comentario del pontífice.

Así pude leer, por ejemplo:

Jesús y las mujeres, 29.12.2017

La desigualdad en derechos, dignidad y seguridad de las mujeres, respecto a los hombres, en España al menos, va en aumento. El dato aterrador de la cantidad creciente de mujeres, que son maltratadas, amenazadas y asesinadas por los hombres, en nuestro país, es elocuente y preocupante. Y conste que las religiones – y nuestra Iglesia en concreto – tienen una dosis importante de responsabilidad en este patético asunto. Y para terminar, ¿dónde está dicho que las mujeres no pueden ser sacerdotes o no pueden ejercer cargos de gobierno en la Iglesia? La respuesta a esta pregunta no pertenece a la fe. Es un asunto cultural. Jesús jamás prohibió a las mujeres actividad alguna en su comunidad.

La rehabilitación de Teilhard de Chardin 10.12.2017

En las últimas semanas, se viene destacando, en la prensa y en las redes, el proyecto de rehabilitar, desde el punto de vista de su ortodoxia doctrinal, las valiosas enseñanzas que nos dejó la enorme, original y excelente producción intelectual del jesuita Pierre Teilhard de Chardin. Sin duda alguna, uno de los más brillantes intelectuales católicos de la primera mitad del siglo pasado. Y uno de los testigos más audaces de la fe cristiana de los últimos tiempos.

Preparar el cambio más urgente en la Iglesia 1.12.217

En cualquier caso, el cambio más urgente – me parece a mí – se refiere a la renovación del clero. Cada día que pasa, hay menos sacerdotes. Y los pocos, que vamos quedando (yo no me he secularizado), somos lógicamente cada día más viejos. Los seminarios, los noviciados, están casi vacíos o se han cerrado. Son ya demasiadas las parroquias que no tienen párroco. O el que tienen, debe atender a varias parroquias más, que pueden estar distantes. A esto hay que darle – y pronto – alguna solución. ¿Se está preparando ese cambio? ¿En qué va a consistir? ¿No sería conveniente informar a la Iglesia de lo que se está haciendo para resolver este problema? Es un asunto que nos concierne a todos los creyentes en Jesús el Señor. Y a todos se nos debería dar la oportunidad de aportar nuestro punto de vista. ¿Por qué no se da ese paso? ¿Se está trabajando “bajo cuerda”? ¿Por qué se nos oculta lo que sería bueno darlo a conocer y ofrecer la oportunidad de saber lo que piensa, desea, necesita y espera quien necesita la solución?

Somos muchos los que nos hacemos estas preguntas. O quizá otras parecidas, pero relacionadas con el mismo problema de fondo. Un problema, que (en su ámbito) afecta al mundo entero, no puede depender de lo que piensan o les conviene a unos cuantos hombres en Roma y sus “cercanías”. ¿Tendremos pronto alguna respuesta? Y si es que parece indiscreto incluso preguntarse esto y decirlo a los demás, entonces habrá que pensar en soluciones que se me antojan mucho más graves.

Cómo apoyar al Papa Francisco 25.11.2017

Pedimos al Papa que informe a la Iglesia sobre las verdades que el Magisterio de la iglesia ha propuesto – y sigue exigiendo que se acepten – como “verdades de fe divina y católica” (Constitución dogmática “Dei Filius” [Conc. Vaticano I, cap. III): “Deben creerse con fe divina y católica todas aquellas cosas que se contienen en la palabra de Dios escrita o tradicional, y son propuestas por la Iglesia para ser creídas como divinamente reveladas, ora por solemne juicio, ora por su ordinario y universal magisterio” (Denz.-Hün, 3011). Todo lo que no es, con seguridad, una verdad de fe divina y católica, puede ser modificado, interpretado o aplicado según las necesidades de los fieles, y de la humanidad en general, cuando existen razones serias para ello. Por ejemplo, resulta inexplicable el conflicto, que hemos vivido recientemente, por causa de un asunto que no pertenece a la Fe divina y católica, la indisolubilidad del matrimonio y la casuística que ha suscitado.

Hay que aplicar la Hermenéutica (la gran scoperta del s. XX), no sólo a la Palabra de Dios (la Biblia), sino también a la palabra de la Iglesia, el Magisterio. Por poner un ejemplo, es evidente que la afirmación del “Credo” de Nicea: “Creo en Dios todopoderoso”, el Pantokrátor, un término que ni aparece en la Biblia, ya que, como es sabido, el “pantokrátor” fue, en la Antigüedad tardía, un título imperial que se entendía como “el amo del mundo”. Semejante Dios, no es el Dios que nos reveló Jesús en el Evangelio.

El Papa controvertido 4.11.2017

Si estos hechos se piensan despacio, la respuesta más razonable a este asunto da que pensar. Por una razón muy sencilla. Lo que da que pensar es que el papa Francisco (y su forma de vivir y de relacionarse con la gente) nos lleva a pensar o sospechar que la Iglesia está más lejos del Evangelio de lo que podíamos imaginar. O dicho con más precisión: en esta Iglesia nuestra da la impresión de que hay gente importante que se preocupa más por la fidelidad al Dogma, al Derecho y a la Liturgia que el Evangelio y al “seguimiento” de Jesús.

La religión contra el Evangelio 22.10.2017

Pero no es esto lo más fuerte. Lo más grave y más decisivo, en este asunto tan fundamental, es que, si leemos y analizamos los evangelios con detención y atención, lo que en ellos encontramos es algo que, no sólo nos sorprende, sino que sobre todo nos desconcierta. Se trata del desconcierto, que nos produce, el hecho de que el conjunto de relatos sobre la vida y enseñanza de Jesús, que nos transmiten los evangelios, deja patente que la religión, como conjunto de leyes y rituales, templos, altares y sacerdotes, no soporta al Evangelio y, por eso mismo, es incompatible con el Evangelio.

El infierno 12.08.17

Pero vamos al asunto que interesa. Ante todo, el “infierno”. En la enseñanza del Magisterio de la Iglesia, no está definida, como dogma de fe, la existencia del infierno.

Lo que el Magisterio papal ha enseñado es que “quienes se van de este mundo en pecado mortal” se condenan (Denz.-Hün., 1002, 1306). Pero lo que no está definido en ninguna parte es que alguien haya muerto en pecado mortal. Ni de Judas se puede afirmar tal cosa. Porque trasciende este mundo. Y jamás ha estado, ni podrá estar a nuestro alcance. Por tanto, aunque en algunos documentos eclesiásticos aparezca la palabra “infierno”, semejante término no pasa de ser una mera hipótesis, que nadie ha dicho que exista realmente.

Todo esto supuesto, no hay que calentarse mucho la cabeza para llegar a una conclusión: o creemos en Dios o creemos en el infierno. Armonizar ambas creencias, ocultando lo que interesa para “que cuelen”, y sobre todo para meter miedo a los indefensos oyentes de tantos apasionados sermones de iglesia, eso es usar (y abusar) de Dios, para conseguir lo que a nosotros nos conviene.

Es verdad que, al negar la existencia del infierno, dejamos al descubierto el problema de la justicia divina. La justicia de la que echamos mano para explicarnos la solución última que tendrá la incontable cantidad de maldades que vemos y sufrimos en este mundo. Pero lo que, en este caso, tenemos que preguntarnos es, si no ocurre, más bien, que le cargamos a Dios que sea él quien haga la justicia que nosotros no tenemos ni la libertad ni el coraje de hacer.

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Como pueden ver, el blog no tiene desperdicio:
mujeres sacerdote,
rehabilitación de herejes,
Iglesia asamblearia,
adelante con el divorcio,
la Iglesia contra el Evangelio
y el infierno no existe.
Todas las entradas son de este año. Este señor fue profesor de la facultad de teología de Granada. No es un caso aislado, lo que explica perfectamente los últimos 50 años, pero eso no evita una serie de preguntas en torno a la llamada:
¿Por qué llama Francisco a esta persona?
¿Realmente está haciendo algo bueno por Francisco?
Lo que hace este señor ¿es bueno para la Iglesia?
¿Hay escritos que pueden ser buenos para el pontífice y malos para la Iglesia?
¿No es la misión principal del pontífice reconfortar a las cristianos en la Fe?
¿Contribuye a eso esta llamada?
En enero de 2015 Francisco pronunció las siguientes palabras tras el atentado de París, “si alguien insulta a mi madre puede llevarse un puñetazo”. Las declaraciones, tristemente, no se referían a la Iglesia y las ofensas que constantemente recibe, ni correspondían a un arrebato viril contra quienes minan la labor de la Santa Madre Iglesia propagando enseñanzas ajenas a ella desde el interior de la misma. En esos casos nunca ha tenido ninguna palabra de indignación, más bien, como vemos en este caso, palabras de cercanía, cariño y respaldo a la labor que el ofensor realiza. La indignación sólo aflora cuando del Islam se trata.

Capitán Ryder

YA NADA SERA IGUAL (Capitán Ryder)




Es la sensación que tengo desde hace tiempo.

Después del pontificado de Francisco, y si la Iglesia le sobrevive, ya nada será igual.

Es justo afirmar que muchos de los problemas vienen de lejos, mañana desarrollaré el tema, pero también es cierto que desde que Francisco es Papa todos los días parecen 28 de diciembre. A cualquier católico de hace unas décadas así se lo parecería.

Viene esto a cuento de la noticia de hoy: el Papa ha casado en un avión a unos auxiliares de vuelo. Al parecer, estaban casados por lo civil, tenían 2 hijos y aunque quisieron casarse en el año 2010 no habían tenido tiempo.

En esas circunstancias el Papa ha tenido “la genial idea” de casarlos allí mismo, en el avión.

Hasta donde yo sé, el matrimonio sigue siendo un sacramento.

Hasta donde yo sé, hay que realizar unos cursillos prematrimoniales que sirvan para madurar el compromiso que vas a adquirir.

Hasta donde yo sé, hay que realizar una serie de “papeleos” que certifiquen que estas bautizado, que no te has casado previamente etc

Hasta donde yo sé, el vínculo obliga ante Dios por lo que cualquier cosa que lo frivolice, lo minusvalore, lo desacralice es asunto grave.

Hasta donde yo sé, esas personas estaban en pecado grave, aunque nada de ello haya dicho el Papa.

De ahí la gravedad de este pontificado, que eleva a categoría, que sacraliza cualquier capricho del hombre mientras queda reducido a anecdótico, o a mera chirigota, cualquier cosa que se refiera a Dios.

Es la inversión del Orden debido.

Capitán Ryder

jueves, 18 de enero de 2018

Falta de entusiasmo de los chilenos por Francisco


¿Lobby abortista en el Vaticano?


Francisco es acusado de haber promovido a altos cargos de la Jerarquía a ciertos obispos que silenciaron abusos homosexuales, cometidos en Chile, por parte de algunos clérigos.



Newspaper Thrown at Francis: Pope Francis was pelted with a newspaper on Monday before celebrating Mass in Santiago del Chile while driving in his Papa Mobile. Users commented on Gloria.tv that he would have been better served with the Catechism or the text of the Dubia.

Francis Attacked: The left-wing, anti-clerical Italian magazine L'Espresso accused Pope Francis of having promoted those who have hushed up homosexual abuses in Chile. One of them, Cardinal Errázuriz, was even promoted by Francis to the Council of Cardinals. The magazine points out that in Chile, for the first time, during one of his Apostolic journeys, Francis was booed by the crowd while simultaneously vandals attacked at least 10 churches in Chile. L’Espresso is partly owned by Pope Francis’ close friend, Eugenio Scalfari, a leading promoter of abortion and gender-ideology.

“Clericalism” in quotation-marks: Pope Francis explained on Tuesday to the Chilean Bishops that – quote – “clericalism” is the "enemy" of the mission. He identified – quote – “clericalism” as "one of the temptations that brings greater damage to the missionary dynamism" of the whole Church. According to Francis clericalism is lurking when bishops and priests "lose their perception" of belonging to the People of God as servants, and not as masters". Francis himself is often accused of governing the Vatican not like a servant but like a dictator showing little respect even for the Bible and Catholic doctrine.

Unusual move: In an unusual move, Pope Francis named Archbishop Luis Ladaria, the Prefect of the Congregation for the Doctrine of the Faith on January 11 a member of the Pontifical Council for Christian Unity. According to the blog Anonimi della Croce this is connected with Francis’ secret plans for an ecumenical mass, connected with the Pontifical Council for Christian Unity. According to the blog, Ladaria’s presence in the Council would lend to the ecumenical mass more authority.

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TRADUCCIÓN PERSONAL AL ESPAÑOL (incluye links)

Se lanza un periódico contra Francisco: El Papa Francisco fue "bombardeado" con un periódico el lunes, antes de celebrar la Misa en Santiago del Chile, mientras paseaba en su papamóvil. Los usuarios comentaron en Gloria.tv que habría sido mejor que hubieran utilizado un Catecismo o el texto de las Dubia.

Francis Attacked: La revista italiana de izquierdas y anticlerical L'Espresso acusó al Papa Francisco de haber promovido a aquellos que silenciaron los abusos homosexuales en Chile. Uno de ellos, el cardenal Errázuriz, incluso fue promovido por Francisco al Consejo de Cardenales. La revista señala que en Chile, por primera vez, durante uno de sus viajes apostólicos, Francisco fue abucheado por la multitud mientras que, simultáneamente, los vándalos atacaron, al menos, 10 iglesias en Chile. L'Espresso es, en parte, propiedad del amigo íntimo del Papa Francisco, Eugenio Scalfari, un destacado promotor del aborto y la ideología de género.

[Véase, a este respecto, las noticias de algunos periódicos, como Clarín, El comercio, The associated press, etc...]

"Clericalismo" entre comillas: el Papa Francisco explicó el martes a los obispos chilenos que -cita-: el "clericalismo" es el "enemigo" de la misión. Identificó -cita- el "clericalismo" como "una de las tentaciones que causa un mayor daño al dinamismo misionero" de toda la Iglesia. Según Francisco, el clericalismo acecha cuando los obispos y sacerdotes "pierden su percepción" de pertenecer al Pueblo de Dios como siervos, y no como amos ". Sin embargo, el propio Francisco es acusado, a menudo,  de gobernar el Vaticano no como un siervo, sino como un dictador, mostrando poco respeto incluso por la Biblia y la Doctrina Católica.

Movimiento inusual: en un movimiento inusual, el Papa Francisco nombró el 11 de enero de 2018como miembro del  Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos al Arzobispo Luis Ladaria, jesuita, actual Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, desde julio de 2017, en sustitución del cardenal Müller. Según el blog Anonimi della Croce, esto está relacionado con los planes secretos de Francisco para una misa ecuménica, conectada con el Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos. Según el blog, la presencia de Ladaria en el Consejo otorgaría a la misa ecuménica más autoridad.


Traducción libre (con algún añadido clarificador) por José Martí

El Imperio vuelve a exigir a los cristianos que apostaten (Luis Fernando)




Tras una persecución brutal en el primer siglo y medio del cristianismo, el Imperio romano decidió dejar a los cristianos en paz durante largos años. Pero eso cambió en el año 249, cuando el emperador Decio llegó al poder. En enero del año siguiente, 250, publicó el siguiente decreto:
Se requiere a todos los habitantes del imperio para que hagan sacrificios ante los magistrados de su comunidad «por la seguridad del imperio» en un día determinado (la fecha variaría en cada lugar y la orden pudo haber sido que el sacrificio tenía que estar consumado dentro de un específico período después de que la comunidad recibiera el edicto). Cuando hagan el sacrificio podrán obtener un certificado (libellus) documentando el hecho de que han cumplido la orden.
Ni que decir tiene que el sacrificio que se pedía era de naturaleza pagana. La reacción de los cristianos, a diferencia de en los dos siglos anteriores, donde prácticamente todos prefiriendo sufrir el martirio a renegar de Cristo, fue muy variada. Hubo muchos que se negaron a obedecer al emperador, lo que les llevó a entregar su sangre por el Señor. Entre ellos, el papa San Fabián. Pero otros apostataron de diversas maneras. Concretamente estas:

  • Los sacrificati, que fueron aquellos que consintieron en hacer sacrificios a los dioses romanos o a la imagen del emperador. Los thurificati, aquellos que quemaron incienso ante las imágenes de los ídolos,
  • Los libellaciti, aquellos que obtuvieron un certificado por parte de las autoridades donde constaba que habían abjurado del cristianismo y hecho ofrendas a los dioses. Muchos de estos certificados se obtuvieron también por soborno y compra.
  • Los acta facientes, que fueron aquellos que realizaron acciones directas para salvar su vida o admitieron falsedades bajo coerción.
  • Los traditori, que entregaron a las autoridades objetos sagrados o escrituras, o que delataron a otros cristianos.

No era la primera vez que el pueblo de Dios se enfrentaba a la elección entre la fidelidad al Señor o a los gobernantes de turno. Como bien relata el I Libro de los Macabeos, Antioco Epífanes…
… envió decretos a Jerusalén y a las ciudades de Judá para que vivieran conforme a tradiciones extrañas a las del país. que se prohibiera hacer holocaustos, sacrificios y libaciones en el Santuario; que profanaran los sábados y los días de fiesta; que el Santuario y los objetos sagrados fueran contaminados; que levantaran altares, templos e ídolos; que hicieran sacrificios de cerdos y animales impuros;  que no circuncidaran a sus hijos y que hicieran sus almas abominables con toda clase de inmundicia y profanación; así se olvidarían de la Ley y cambiarían todas sus buenas costumbres.
El que no cumpliera la orden del rey sería condenado a muerte. Redactó un decreto para todo su reino en estos términos y nombró inspectores para todo el pueblo. Además obligó a las ciudades de Judá, una por una, a que ofrecieran sacrificios.
1 Mac 1,44-51
Muchos judíos apostataron pero a su vez:
…muchos en Israel se mantuvieron firmes y se llenaron de valor para no comer alimentos impuros. Prefirieron morir antes que mancharse con la comida o profanar la alianza santa. Y, en efecto, murieron y fue muy grande la ira que se desencadenó sobre Israel.
1 Mac 1,62-64
Es una constante que cada cierto tiempo los hijos de Dios tienen que enfrentarse a elegir por gracia el martirio o caer en la apostasía, aceptando algo que va en contra de la fidelidad al Señor. Lo vimos el siglo pasado con la persecución a los cristeros en México y a los católicos españoles durante la II República y la Guerra Civil, y lo vemos hoy en China, la India, Oriente Medio, África, etc.

Pues bien, esa persecución llega ahora a España en forma de imposición de leyes que atentan contra principios elementales de la fe católica y de su moral. Leyes, dicho sea de paso, que llevan el marchamo de democráticas. Es el caso de la «Ley para garantizar los derechos, la igualdad de trato y no discriminación de las personas LGTBI y sus familiares en Andalucía», que fue votada unánimemente en el parlamento andaluz. Es decir, todos los partidos con representación parlamentaria dieron el visto bueno. Dicha ley no es muy distinta a otras similares aprobadas en otras comunidades autónomas de España. Y sabemos que está en marcha un proyecto de ley en el parlamento nacional que va en la misma línea y que muy probablemente será aprobado en esta legislatura.

No es la primera vez que ocurre algo así. La imposición de la asignatura de Educación para la Ciudadanía por parte del gobierno socialista de Rodríguez Zapatero fue un adelanto de lo que llega ahora.

¿Qué ocurre con esa ley? Que impone la ideología de género a toda la sociedad y en todos los ámbitos. No hay actividad pública o privada que no se vea afectada. Cito del documento que han publicado hoy los obispos de Andalucía:
Esta ley obliga a personas e instituciones a asumir y colaborar con la ideología de género en los diversos ámbitos de lo social, en la sanidad, en la educación, en el ocio, en el deporte y en la familia, sin posibilidad de discrepar ni de plantear la objeción de conciencia.
Y luego añaden:
Por ello, invitamos a todos, y muy especialmente al pueblo cristiano, a no permanecer pasivos ante el peligro que suponen los postulados de la mencionada ley para la libertad religiosa, de educación y de pensamiento.
Habrá quien piense que la falta de amenaza de muerte cambia la naturaleza del desafío al que se enfrentan hoy los católicos que quiere permanecer fieles al Señor. Pues no. La esencia es la misma: “o aceptas y colaboras con esto que va contra tu fe, o te perseguimos". Da igual que la persecución sea con la muerte, la cárcel, el quedarse sin empleo, la multa económica que te lleva a la pobreza o incluso con el desprecio social. La alternativa a la que se enfrentan los fieles es la misma. o con Cristo o contra Él.

Dependiendo del lugar del planeta, el Imperio se llama ahora Islam, dictadura comunista, fundamentalismo hindú o democracia parlamentaria, pero pretende exactamente lo mismo. Que los cristianos dejen de serlo o, peor aún, se piensen que pueden serlo a la vez que aceptan lo inaceptable.

Sin embargo, creo que hay una diferencia esencial entre cómo abordan esta situación los cristianos en las diversas partes del mundo. En China, la India y países de mayoría islámica prefieren ser mártires o confesores (perseguidos sin ser asesinados). En Occidente la mayoría ya ha apostatado y los que todavía no lo han hecho, seguramente apostatarán ante estas leyes. Lo harán individual e institucionalmente.

Por ejemplo, ¿cuántos padres objetores contra la EpC hubo en España? Muy pocos.  Y colegios católicos, ni uno. ¿Cuántos padres, médicos, periodistas, colegios, etc, católicos se van a oponer a la imposición de la ideología de género? El lector sabe la respuesta.

No hemos llegado a esta situación por casualidad. La secularización de la Iglesia en el último medio siglo, fruto lógico del modernismo, es de tal entidad, que salvo declaraciones de principios que luego no se traducen en acciones reales, el catolicismo español, y no solo español, va a tragar con lo que le pongan por delante. Si hay que educar a los niños en la ideología de género, se les educa. Si nuestros hospitales tienen que practicar abortos y eutanasias, se practicarán. Si hay que introducir en el ideario de los colegios católicos principios contrarios a la moral de la Iglesia, se introducirán. Y quien ose oponerse será considerado un loco fundamentalista, un antisistema que debe ser perseguido y, llegado el caso, eliminado.

Como escribió Pedro Luis Llera en Disidencia contra el pensamiento único:
“Se ha llegado a una especie de consenso ideológico transversal. Se mantiene la ficción del pluralismo ideológico y la democracia: puedes votar a distintas opciones. El problema es que todos los partidos son en realidad el mismo partido (todos piensan en realidad lo mismo). Sólo se puede pensar de una manera y quienes se apartan de esa manera de pensar son automáticamente estigmatizados y señalados como peligrosos integristas radicales, lo que supone su muerte social".
No piense nadie que la apostasía no puede ser adornada de argumentos muy “convincentes". En la película “Silencio", de Scorsese, los personajes Rodíguez y Ferreria admiten un discurso parecido a este:
Apostata. Pisa a Jesús. No pasa nada. Es sólo una imagen. ¡Vamos: un poquito! Sé libre. ¡Písala ya!Y si pisar a Cristo no es suficiente prueba de apostasía, escupe al crucifijo y di que la Santísima Virgen María es una puta. ¿Qué tiene de malo pisar una imagen si a cambio salvas tu vida y la de otros inocentes? El fin justifica los medios.
Hoy veremos a colegios, hospitales e instituciones católicas pisotear a Jesús aceptando leyes inicuas bajo excusas tipo “si nos cierran, los niños se quedarán sin nuestros colegios", o “si nos cierran, no podremos atender con caridad a nuestros pacientes".

Hace 1800 años muchos cristianos traicionaron a Cristo ofreciendo sacrificios a ídolos paganos del Imperio romano. Hoy lo harán ante el paganismo de las leyes de la Democracia liberal. Distinto collar, mismo perro. Distinto nombre, mismo ídolo.

Quiera Dios concedernos la gracia de ser como los Macabeos, los Cristeros, los Mártires españoles del siglo pasado y los mártires y confesores de hoy en otros lugares del mundo. Y si ello nos lleva a ser tratados como escoria, recordemos que más sufrió Cristo, siendo inocente, al dar su vida por nosotros en la Cruz.

A Él sea la gloria por siempre.

Santidad o muerte,

Luis Fernando Pérez