En el siguiente artículo (y vídeo), el Dr. Vernon Coleman, uno de los médicos más acertivos y atacados por cuestionar la versión oficial del Covid-19 (ver su biografía más abajo), explica cómo es que ha llegado a formular la hipótesis de que “las vacunas Covid-19 son armas de destrucción masiva y podrían acabar con la raza humana”. Lo que ocurre, dice, es que “el sistema inmunitario de la persona que ha sido vacunada se ceba para responder de forma muy dramática si ese individuo entra en contacto con el virus en el futuro. El resultado podría ser catastrófico y esto es lo que me temo que ocurrirá en otoño y durante el próximo invierno… Sus sistemas inmunitarios reaccionarán de forma exagerada y es probable que sea entonces cuando se produzcan muchas muertes… Los pacientes no han sido advertidos oficialmente de este problema, aunque las pruebas se publicaron en el International Journal of Clinical Practice de octubre de 2020… Además, al vacunar a millones de personas estamos enseñando al virus a mutar y a hacerse más fuerte y mortal… Por paradójico que parezca, el fin de los bloqueos será perfectamente oportuno para asegurar que las nuevas mutaciones del virus covid-19 se propaguen a lo largo y ancho… Creo que esta es la razón por la que están apareciendo nuevas variaciones del virus en zonas donde se ha administrado la vacuna a mucha gente… La conclusión es que la administración de las vacunas dará al virus la oportunidad de volverse infinitamente más peligroso. Y cada individuo vacunado tiene el potencial de convertirse en un asesino en masa porque sus cuerpos se están convirtiendo en laboratorios de fabricación de virus letales. Y lo que es peor, algunos de los individuos vacunados podrían convertirse en portadores asintomáticos, propagando virus letales a su alrededor.”
[DESDE LUEGO, NO DEJA DE SER UNA HIPÓTESIS Y MUY DISPARATADA, EN MI OPINIÓN, PERO SE NOTA QUE SABE LO QUE ESTÁ DICIENDO, PUES LO DEMUESTRA SU CURRICULUM (VER ABAJO). LO QUE ESTE SEÑOR ESTÁ DICIENDO, EN DEFINITIVA, ES QUE NO NOS VACUNEMOS, POR NUESTRO PROPIO BIEN; Y POR EL BIEN DE LOS QUE NOS RODEAN. REALMENTE, LAS PERSPECTIVAS, DE CUMPLIRSE, SON ATERRADORAS. ESPEREMOS QUE LO QUE DICE NO SEA MÁS QUE UNA MERA HIPÓTESIS, AUNQUE VÁLIDA, Y QUE NO SE VEA CONFIRMADA POR LA EXPERIENCIA. PERO BASTANTES COSAS DE LAS QUE HABLA SON COMO LAS DICE. DE MODO QUE, POR MÁS QUE LES PESE A LAS INDUSTRIAS FARMACEÚTICAS, HARÍAMOS BIEN EN NO VACUNARNOS, POR SI LAS MOSCAS]
Duración 21:57 minutos
Por Vernon Coleman
Si ya me has leído antes, sabrás que nunca exagero. También sabrás que durante el último año mis predicciones, valoraciones e interpretaciones han sido absolutamente acertadas.
Ahora, más que nunca, necesito tu ayuda. Si no trabajamos juntos, estamos condenados. Necesito tu ayuda porque tenemos que hacer llegar este artículo a millones de personas. Y con las grandes plataformas y los principales medios de comunicación que me han vetado no puedo llegar a esos millones sin ti.
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¿Recuerdas aquel vídeo en el que Bill y Melinda Gates se sentaban y sonreían mientras hablaban de cómo la próxima pandemia haría que la gente se sentara y a tomar nota?
Bueno, creo que sé lo que va a pasar. Todos sabemos que la élite del mal, los promotores de la Agenda 21 y del Gran Reseteo, han tenido todo el tiempo la intención de matar entre el 90% y el 95% de la población mundial.
Lamentablemente, me temo que probablemente sea demasiado tarde para salvar a muchos de los que se han vacunado. Millones están condenados y me temo que muchos morirán la próxima vez que entren en contacto con el coronavirus.
Pero algo ha salido muy mal en los planes de la élite.
Y el resultado es que ahora los que no nos hemos vacunado también parecemos estar en grave peligro. Tenemos que mantener nuestro sistema inmunológico en óptimas condiciones comiendo sabiamente y tomando suplementos de vitamina D. Y puede que en algún momento tengamos que mantenernos alejados de los que se han vacunado. Creo que ahora son un peligro muy real para la supervivencia de la especie humana.
Durante más tiempo del que me gusta pensar, he estado advirtiendo sobre los peligros de las vacunas contra el Covid-19. Sé que en realidad no deberían llamarse vacunas (aunque una de las definiciones oficiales se ha modificado para darles cabida), pero si las llamo terapia génica, las personas a las que intentamos llegar, a las que se les ha dicho que son vacunas, no sabrán de qué estoy hablando.
Hace casi exactamente un año advertí que la razón por la que se estaba exagerando el riesgo de coronavirus era en parte para establecer un programa de vacunación obligatoria.
La falsa pandemia de covid-19 se creó, en parte, para encontrar una excusa para las vacunas, en lugar de que la vacuna se creara como solución a la supuesta amenaza que suponía el covid-19.
Llevo meses advirtiendo que las vacunas experimentales son peligrosas y producen muchos efectos secundarios potencialmente mortales. Las celebridades, y muchos médicos, se equivocan al proporcionar tranquilidad. Tenía razón al sugerir que las vacunas podrían matar a más personas que el covid-19.
Pero ahora parece probable que las vacunas puedan ser responsables de la muerte de cientos de millones de personas que no han sido vacunadas.
Mi pensamiento a largo plazo siempre ha sido que el fraude del covid-19 se planificó con un propósito: matar al mayor número posible de ancianos y personas frágiles e introducir la vacunación obligatoria. Eso fue lo que dije en mi primer vídeo a mediados de marzo de 2020. También estaba, por supuesto, el plan de destruir y luego reinventar la economía para satisfacer los requisitos de la Agenda 21 y el Gran Reseteo.
Días después de la aparición de ese vídeo fui atacado furiosamente en Internet. Mi perfil en Wikipedia fue modificado drásticamente. Se eliminaron los detalles de todos mis libros, series de televisión y columnas. Se me describió como un teórico de la conspiración desacreditado. Hice un vídeo explicando cómo se modificó mi perfil de Wikipedia para demonizarme y desacreditarme. Muchos otros que han cuestionado la línea oficial sobre el covid-19 han sufrido lo mismo. Y, por supuesto, la BBC y la prensa nacional se han unido para atacar a aquellos que se atreven a cuestionar la narrativa oficial que difunde verdades inaceptables.
Pero ahora temo que los lunáticos genocidas, los jinetes del Apocalipsis que planearon este fraude, nos estén llevando al Armagedón.
Hace tiempo que creo que los arquitectos del fraude esperaban que murieran millones de personas.
Sin embargo, ahora creo que las mentes malvadas que crearon este fraude subestimaron dramáticamente el peligro de las vacunas experimentales que han estado promoviendo con tanto vigor. Millones de personas que han recibido alguna de las vacunas covid-19 podrían llegar a morir como resultado de las mismas. En un momento explicaré cómo y por qué.
El fraude comenzó, por supuesto, con las disparatadas predicciones de Ferguson, del Imperial College de Londres. Ferguson es un modelador matemático con un historial espantoso. La gente que planeó el fraude sabía que las predicciones de Ferguson eran absurdas. Debían saber que el historial de Ferguson era vergonzosamente malo. Pero, sin embargo, sus predicciones se utilizaron como excusa para los cierres, el distanciamiento social, las máscaras y el cierre de escuelas y departamentos hospitalarios. Todo esto era una auténtica locura. Lo lógico era aislar a los individuos que tenían la infección -de la misma manera que a los enfermos de gripe se les dice que se queden en casa- y proteger a las personas más vulnerables, sobre todo a los ancianos con trastornos cardíacos o torácicos. Pero los políticos y los asesores lo hicieron todo mal. Y los que cuestionaron lo que estaba ocurriendo fueron demonizados y silenciados.
El hecho es que el sistema inmunitario de las personas sanas se refuerza a través de las interacciones con los demás. Los niños y adultos jóvenes sanos tienen sistemas inmunitarios muy potentes. En realidad, sólo los ancianos tienen más probabilidades de verse amenazados por un nuevo virus. Y sin embargo, los políticos del mundo y sus asesores nos llevaron deliberadamente a un programa de vacunación masiva.
En un principio, se aseguró a la población que sólo a través de un enorme programa de vacunación podrían recuperar algunas de sus libertades perdidas. Esto siempre fue una peligrosa tontería.
Sin embargo, las vacunas experimentales que se aprobaron tan rápidamente nunca iban a hacer lo que se dijo que harían. No estaban diseñadas para prevenir la infección o la transmisión. Las vacunas no evitan que la gente se contagie de covid-19 y no impiden que se transmita si se contagia. Las vacunas simplemente ayudan a limitar la gravedad de los síntomas para algunos de los que se inyectan. Eso no es lo que cree la mayoría de la gente, por supuesto. La gran mayoría de las personas que se han vacunado creen que están protegidas contra la infección. Se trata de otro fraude.
Aparte del hecho bastante importante de que no hacen lo que la gente cree que hacen, hay tres enormes problemas con las vacunas.
El primer problema, por supuesto, es que estas vacunas experimentales ya han demostrado ser desesperadamente peligrosas, matando ya a muchas personas y produciendo graves efectos adversos en muchas más. La magnitud de este problema en particular puede juzgarse por el hecho de que incluso las autoridades admiten que probablemente sólo se registrará una de cada 100 muertes y lesiones graves relacionadas con las vacunas. Es imposible calcular cuántos morirán por problemas de alergia, problemas cardíacos, derrames cerebrales, problemas neurológicos o cuántos quedarán ciegos o paralizados. En mi página web hay una lista de personas que se sabe que han resultado heridas o muertas por la vacuna y es una lista aterradora de leer. El número de muertes es aterrador, pero la mayoría de las autoridades siguen insistiendo en que todas son coincidencias. Cuando alguien muere entre los 60 ó 28 días siguientes a una prueba positiva de covid-19 -incluso si el resultado de la prueba es falso- se le trata automáticamente como una muerte por covid-19 para aumentar las cifras. Pero cuando los jóvenes sanos mueren a las pocas horas de haberse vacunado, las muertes se descartan como simples coincidencias. Qué cantidad de coincidencias trágicas ha habido.
El segundo problema es el del sistema inmunitario conocido como cebado patogénico o tormenta de citoquinas. Lo que ocurre es que el sistema inmunitario de la persona que ha sido vacunada se ceba para responder de forma muy dramática si ese individuo entra en contacto con el virus en el futuro. El resultado puede ser catastrófico y esto es lo que me temo que ocurrirá en otoño y durante el próximo invierno. Las personas que se vacunaron van a estar en verdaderos problemas cuando vuelvan a entrar en contacto con un coronavirus. Sus sistemas inmunitarios reaccionarán de forma exagerada y es probable que sea entonces cuando se produzcan muchas muertes.
Los pacientes no han sido advertidos oficialmente de este problema, aunque las pruebas se publicaron en el International Journal of Clinical Practice de octubre de 2020. El artículo se titula “Divulgación del consentimiento informado a los sujetos de los ensayos de vacunas sobre el riesgo de que las vacunas covid-19 empeoren la enfermedad clínica” [Informed consent disclosure to vaccine trial subjects of risk of COVID-19 vaccines worsening clinical disease].
Pero no se ha informado a los pacientes sobre el consentimiento informado y sospecho que la mayoría de los médicos siguen ignorando los riesgos.
Los ancianos y las personas con un sistema inmunitario deficiente son especialmente propensos a morir. ¿Y qué es lo que te hace tener un sistema inmunológico pobre? Usar mascarilla, aislarte de otras personas y no recibir suficiente sol son tres causas obvias. Tampoco ayuda beber demasiado alcohol y fumar demasiado tabaco durante el arresto domiciliario.
Las muertes adicionales se producirán probablemente en otoño, cuando las personas vacunadas tienen más probabilidades de estar expuestas al virus. El coronavirus se propaga más rápidamente en otoño e invierno.
Como consecuencia de la epidemia de enfermedades y muertes que se producirá, los gobiernos empezarán a promover la siguiente ronda de vacunaciones. Se hablará mucho de las mutaciones, por supuesto, y se producirán nuevas vacunas preparadas a toda prisa que serán promocionadas a bombo y platillo por celebridades que no saben nada de medicina ni de vacunas. Los médicos que entienden los peligros y que tienen dudas sobre las vacunas serán, como siempre, silenciados.
Sorprendentemente, creo que las personas que están detrás de este fraude eran conscientes de que esto iba a suceder. Era parte de su malvado plan.
Sabían que habría un aumento de las muertes en otoño y en el próximo invierno. Siempre planearon culpar de las muertes a una nueva versión del covid-19, una de las miles de mutaciones que habrá en otoño. Hace tiempo que sospechaba que acabarían promoviendo la vacunación cada dos meses, o incluso con más frecuencia; cada mes más o menos. Mi uso original de la palabra “bulo” pretendía criticar la respuesta a una infección vírica similar a la gripe. La respuesta fue muy exagerada.
Sospecho que ésta es la razón por la que que Bill y Melinda Gates sonreían mientras insinuaban que aunque no nos hayamos tomado en serio la primera pandemia, sí nos tomaríamos mucho más en serio la siguiente.
Y creo que ellos, y todos los demás implicados en este fraude, asumieron que estarían a salvo porque no recibieron las vacunas. Sospecho que muchos de la élite, y las celebridades más importantes, recibieron un placebo en lugar de una de las vacunas experimentales.
Ellos nunca corrieron el riesgo de morir por la vacuna, de quedar gravemente lesionados, de desarrollar un cebado patógeno, ni de quedar altamente vulnerables la próxima vez que entraran en contacto con la infección del virus.
Creo que la élite pensó que estaban a salvo. Creo que idearon un plan que provocaría millones de muertes pero que no les perjudicaría.
Pero creo que cometieron un error enorme y crucial.
Y esto nos lleva al tercer problema —un problema que no creo que esperaran.
Este problema acaba de ser esbozado por el Dr. Geert Vanden Bossche, un eminente especialista en vacunas. De hecho, al principio me mostré escéptico sobre lo que dijo porque el Dr. Bossche ha trabajado anteriormente con GAVI y la Fundación Gates. Es la última persona en el mundo que podría describirse como opuesta a la vacunación.
El Dr. Bossche ha señalado que las vacunas que se utilizan actualmente son las armas equivocadas para la guerra contra esta infección vírica.
De forma desastrosa, al vacunar a millones de personas estamos enseñando al virus a mutar y a hacerse más fuerte y mortal. Tratar de idear nuevas vacunas para nuevas mutaciones simplemente empeora las cosas porque los científicos no pueden adelantarse a los virus mutados. Y las personas que se han vacunado están compartiendo los virus mutados con los que les rodean. Las mutaciones son cada vez más fuertes y mortales.
El fin de los bloqueos será perfectamente oportuno para asegurar que las nuevas mutaciones del virus covid-19 se propaguen a lo largo y ancho.
También hay otro problema asociado.
Normalmente, nuestro cuerpo contiene glóbulos blancos que nos ayudan a vencer las infecciones. Las células denominadas NK -las siglas NK significan asesinos naturales- ayudan a eliminar las células malas invasoras. Una vez que las células NK han hecho su trabajo, aparecen nuestros anticuerpos y limpian el desorden.
Sin embargo, el Dr. Bossche explica que las vacunas contra el covid-19 desencadenan la producción de anticuerpos muy específicos que compiten con las defensas naturales de los individuos vacunados.
Los sistemas de defensa naturales de los vacunados se suprimen porque los anticuerpos específicos producidos por la vacuna toman el relevo.
Y estos anticuerpos específicos, los producidos por las vacunas, son permanentes. Están ahí para siempre dentro de los cuerpos de los vacunados.
El resultado desastroso es que los sistemas inmunológicos naturales de las decenas o cientos de millones de personas que se vacunan están siendo efectivamente destruidos.
Sus sistemas inmunitarios no podrán luchar contra ninguna variación mutada del virus que se desarrolle en sus cuerpos. Y esos virus mutados pueden extenderse a la comunidad. Creo que esta es la razón por la que están apareciendo nuevas variaciones del virus en zonas donde se ha administrado la vacuna a mucha gente.
La conclusión es que la administración de las vacunas dará al virus la oportunidad de volverse infinitamente más peligroso. Cada individuo vacunado tiene el potencial de convertirse en un asesino en masa porque sus cuerpos se están convirtiendo en laboratorios de fabricación de virus letales. Y lo que es peor, algunos de los individuos vacunados pueden convertirse en portadores asintomáticos, propagando virus letales a su alrededor.
Y las personas vacunadas no podrán responder a las mutaciones porque su sistema inmunológico habrá sido tomado por un sistema de defensa artificial, que les ha sido dado por la vacuna y que está diseñado para combatir la forma original del virus covid-19. Los individuos vacunados van a estar muy expuestos cuando las nuevas mutaciones comiencen a propagarse. Sus cuerpos están permanente y exclusivamente orientados a defenderse contra una forma del virus que se está quedando rápidamente obsoleta.
Poner nuevas vacunas no servirá de nada porque el virus mutado no será vulnerable. Los científicos que fabrican las vacunas no podrán adelantarse a la mutación del virus. Esto debería haberse previsto. Es la razón por la que las vacunas contra la gripe no suelen funcionar.
Los políticos y sus asesores mentirán y culparán a los que no se han vacunado del desarrollo de nuevas mutaciones y del aumento de muertes que se va a producir.
Pero si el Dr. Bossche tiene razón, y creo que la tiene, son los individuos vacunados los que van a amenazar a la humanidad. Serán una gran amenaza para cualquiera que haya sido vacunado. Pero también serán una gran amenaza para los no vacunados, porque los virus que están diseminando son más peligrosos que el original.
Nos encontramos en un territorio muy peligroso.
Si no detenemos este programa de vacunación ahora, no es exagerado decir que el futuro mismo de la humanidad está en riesgo.
¿Es esto lo que tenían en mente los que intentan imponernos el Gran Reseteo?
No lo sé.
Tal vez su objetivo siempre fue matarnos a todos.
O tal vez su malvado plan se les ha ido de las manos. En el Reino Unido, Ferguson, Hancock, Whitty y Vallance siempre me han parecido las personas equivocadas para dirigir la respuesta de la nación. En Estados Unidos, creo que el Dr. Fauci era la persona equivocada.
He temido todo el tiempo que fueran elegidos porque son las personas equivocadas. Todo lo que han hecho ha sido incorrecto para nosotros pero correcto para ellos y para el malvado Cabal que promueve la Agenda 21 y el Gran Reseteo.
La insistencia en suprimir el debate libre nos ha llevado directamente a este abismo. A ninguna de estas personas se le debería haber permitido tal control sobre nuestras vidas, pero al suprimir toda oposición cuestionadora de una manera nunca antes hecha y suprimiendo los hechos, los principales medios de comunicación y los gigantes de Internet han hecho las cosas infinitamente peores. ¿Creen que van a estar a salvo?
Existe un riesgo real de que, en lugar de limitarse a matar al 90%-95%, como deseaba originalmente la élite del mal, puedan matar a todo el mundo por error; podrían acabar con la humanidad.
Tenemos muy poco tiempo para salvarnos. Tenemos que reforzar nuestros sistemas inmunológicos e, irónicamente, es posible que tengamos que mantenernos alejados de las personas que han sido vacunadas. En la próxima semana escribiré un artículo sobre cómo puedes reforzar tu sistema inmunológico.
¿Ahora ves por qué este es el artículo más importante que he escrito sobre el covid-19 y el más importante que has leído?
No puedo llegar a los principales medios de comunicación que simplemente suprimen la verdad y rechazan cualquier debate o discusión. YouTube, por ejemplo, no acepta vídeos que cuestionen cualquier cosa promovida por el malvado establishment.
Así que envía este artículo a los médicos y a los periodistas, a los amigos y a los familiares. Comparte, comparte, comparte. Tal vez podamos persuadir a las personas en el poder de que no son inmunes al desastre que se avecina. Puedes compartirlo fácilmente desde www.vernoncoleman.org
Espero que el Dr. Bossche se equivoque. Y yo mismo espero estar equivocado.
Pero hay que investigar todo lo que se dice en este artículo. Y si estos temores no se hacen públicos y no se investigan, entonces sabremos con absoluta seguridad que el plan es matar al mayor número posible de gente. No cabe otra conclusión.
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Sobre Vernon Coleman
Vernon Coleman se educó en el Queen Mary’s Grammar School de Walsall, en Staffs. Después pasó un año como voluntario de servicios comunitarios en Liverpool, donde fue el primero de los “catalizadores” de Alec Dickson. Estudió medicina en la Facultad de Medicina de Birmingham y se licenció como médico en 1970. Ha trabajado en hospitales y como médico de cabecera. Renunció a la sanidad por una cuestión de principios.
El Dr. Coleman ha trabajado como columnista en numerosos periódicos nacionales, como The Sun, The Daily Star, The Sunday Express, Sunday Correspondent y The People. En una ocasión escribió tres columnas al mismo tiempo para periódicos nacionales (las escribió con tres nombres diferentes, Dr. Duncan Scott en The Sunday People, Dr. James en The Sun y Dr. Vernon Coleman en el Daily Star). Al mismo tiempo, también escribía columnas semanales para el Evening Times de Glasgow y para el Sunday Scot. Sus columnas sindicadas han aparecido en más de 50 periódicos regionales del Reino Unido y sus columnas y artículos han aparecido en periódicos y revistas de todo el mundo. El Dr. Coleman dimitió de The People en 2003 cuando el director se negó a publicar una columna en la que criticaba la decisión del Gobierno de iniciar la guerra de Iraq. (Referencia 6)
Ha colaborado con artículos e historias en cientos de otras publicaciones, como The Sunday Times, Observer, Guardian, Daily Telegraph, Sunday Telegraph, Daily Express, Daily Mail, Mail on Sunday, Daily Mirror, Sunday Mirror, Punch, Woman, Woman’s Own, The Lady, Spectator y British Medical Journal. Fue el editor fundador del British Clinical Journal. Durante muchos años escribió un boletín mensual llamado Dr Vernon Coleman’s Health Letter. Ha colaborado con la Open University y ha dado conferencias a médicos y enfermeras sobre diversos temas médicos.
Vernon Coleman ha presentado numerosos programas en televisión y radio y fue el médico original de los desayunos televisivos en TV AM. Fue el primer tío agonizante de la televisión (en el programa The Afternoon Show de la BBC1) y presentó tres series de televisión basadas en su exitoso libro Bodypower.
En los años 80 escribió los algoritmos de los primeros programas de salud informatizados, que se vendieron en todo el mundo a los previsores que habían comprado los primeros ordenadores domésticos del mundo. (Referencias 4 y 5).
Sus libros han sido publicados en el Reino Unido por Arrow, Pan, Penguin, Corgi, Mandarin, Star, Piatkus, RKP, Thames and Hudson, Sidgwick and Jackson, Macmillan y muchas otras editoriales importantes, y traducidos a 25 idiomas. Las versiones en inglés se venden en Estados Unidos, Australia, Canadá y Sudáfrica, además del Reino Unido. Varios de sus libros han aparecido en las listas de bestsellers del Sunday Times y de Bookseller.
En total, ha escrito más de 100 libros que, en conjunto, han vendido más de dos millones de ejemplares sólo en el Reino Unido. Su novela autopublicada La guerra de los repollos de la señora Caldicot se ha convertido en una película premiada (protagonizada por Pauline Collins, John Alderton y Peter Capaldi) y el libro está, como muchas de sus otras novelas, disponible en versión de audio. Vernon Coleman ha coescrito cinco libros con su esposa, Donna Antoinette Coleman, y además ha escrito numerosos artículos (y libros) bajo una gran variedad de nombres (muchos de los cuales ya ha olvidado).
Fuente:
Vernon Coleman: Covid-19 Vaccines Are Weapons of Mass Destruction – and Could Wipe Out the Human Race; 13 de marzo de 2021.
