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lunes, 6 de noviembre de 2017

Mi Señor y mi amigo: Humanidad de Jesús y amistad con Él [3 de 4] (José Martí)

De todos modos, un cristiano sabe, de antemano, que las puertas del infierno no prevalecerán sobre la Iglesia (cfr Mt 16, 18) porque así está profetizado por Jesucristo. Por lo tanto, ante todo este cúmulo de dificultades y de sufrimientos, nunca debe de ponerse triste ni, mucho menos, desanimarse. Así lo dijo Jesús y así nos lo recuerda también san Juan en su primera carta: "Ésta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?" (1 Jn 5, 4-5). 

Ante los poderes del mal, que son grandes, no debemos temer. Nuestra actitud ha de ser aquella que nuestro Maestro nos aconsejaba"No tengáis miedo a los que matan el cuerpo pero no pueden matar el alma; temed, ante todo, al que puede hacer perder alma y cuerpo en el infierno" (Mt 10, 28). Por eso necesitamos  "revestirnos de la armadura de Dios para poder resistir las insidias del diablo, porque no es nuestra lucha contra la sangre o la carne, sino contra los principados, las potestades, las dominaciones de este mundo de tinieblas y contra los espíritus malignos que están en los aires" (Ef 6, 11-12). San Pablo, en su carta a los efesios, les explica muy bien en qué consiste esta armadura de Dios, que es la única que hace posible vencer en todo, y permanecer firmes y resistir en el día malo. Y así les dice: 
"Estad firmes, ceñidos en la cintura con la verdad, revestidos con la coraza de la justicia y calzados los pies, prontos para proclamar el evangelio de la paz; tomando en todo momento el escudo de la fe, con el que podáis apagar los dardos encendidos del Maligno. Recibid también el yelmo de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios, mediante oraciones y súplicas, orando en todo tiempo, movidos por el Espíritu, vigilando, además, con toda constancia y súplica por todos los santos " (Ef 6, 14-18)
Hemos hecho hincapié, hasta ahora, en la divinidad de Jesucristo, lo cual es sumamente importante: "Me llamáis Maestro y Señor y decís bien, porque lo soy" (Jn 13, 13) . "Felipe, el que me ve a Mí ve al Padre" (Jn 14, 9). "Yo y el Padre somos uno" (Jn 10, 30), etc...

Conscientes, por lo tanto,  de que Jesucristo es nuestro Señor, nuestro Dios y nuestro Salvador, vamos a fijarnos ahora en su humanidad,  porque Jesucristo, que es verdadero Dios, el único Dios, es también verdadero hombre. Nuestro ideal como hombres es el de parecernos a Él y hacer realidad su Vida en nosotros. Esto es lo único que da sentido a la vida de un cristiano.
Si buscamos, con detenimiento,  en los Evangelios, nos vamos a encontrar con otras palabras, dichas igualmente por el Señor (y palabra de Dios, por lo tanto) en las que, posiblemente, aún no hemos profundizado lo suficiente.
Pero antes de eso, me hago la siguiente pregunta: ¿Por qué ha querido Jesús sufrir por nosotros, hasta el extremo de dar voluntariamente su Vida y nada menos que con una muerte de cruz? [dado que las puertas del cielo estaban cerradas, a consecuencia del pecado original]

Sólo hay una respuesta posible y nos la da san Juan cuando dice: "Dios es Amor" (1 Jn 4, 8) [lo es en sí mismo, y lo es también en relación a nosotros] ... un amor que es infinito y que nos lo manifestó tomando nuestra naturaleza humana y haciéndose realmente hombre, sin dejar de ser Dios; tomó sobre sí todos los pecados de todos los hombres de todos los tiempos y lugares, como si fueran suyos (que no lo eran) para ofrecérselos, como una ofrenda pura y grata,  a su Padre. Y de este modo, mediante su Pasión [máxima expresión de Amor ésta de dar la vida en rescate por muchos] nos dio la posibilidad, si hacíamos nuestra esa Pasión, de liberarnos del pecado original, lo que antes de su venida era imposible, como ya se ha dicho.

Y en este punto, es de la mayor importancia que reflexionemos, con la ayuda de Dios, acerca de lo que hizo por nosotros ... y por qué lo hizo así y no de otra maneraNo quiso redimirnos sin más (¡podría haberlo hecho!) sino que, al igual que todo verdadero amor busca la reciprocidad del amado, su amor por nosotros, al ser un verdadero amor, necesitaba de nuestra reciprocidad. Y así, muriendo en la Cruz por amor a nosotros y para salvarnos, nos ha dado esa posibilidad de salvación, pero condicionándola a nuestra respuesta. No nos ha querido salvar, sin más, sino que, al igual que Él nos ha amado, "necesita" de nuestra intervención. Sólo si nosotros también lo amamos podremos tener parte con Él, y sólo así puede decirse que su Amor por nosotros es perfecto: si no hay reciprocidad en el Amor no es posible hablar de perfección en el Amor, pues éste es siempre cosa de dos: Dios y cada uno de nosotros. La reciprocidad y la libertad, así como la totalidad, son notas esenciales del verdadero amor, del amor perfecto ... y éste es el Amor que Dios ha querido tener con nosotros. De otro modo no podría hablarse de verdadero amor ni de perfección en el amor. Sería ... otra cosa; un regalo, tal vez. Pero Dios nos ha reservado algo incomparablemente mayor; y mucho más sublime que un mero regalo: su propio Amor y su propia Vida, que pasan a ser nuestros cuando nosotros le damos nuestro amor y nuestra vida.

Todo esto lo comprendió muy bien el Apóstol san Pablo. De ahí que escribiera a los colosenses: "Ahora completo en mi carne lo que falta a los sufrimientos de Cristo en beneficio de su Cuerpo, que es la Iglesia"  (Col 1, 24). San Pablo se sabía amado por Dios y quería amarlo de igual manera. A la luz de esta realidad se comprende mejor esa expresión que utiliza el Apóstol, en lo que se refiere a "completar lo que falta a los sufrimientos de Cristo en su Cuerpo, que es la Iglesia".Y es que el que ama desea compartir la vida y el destino de la persona amada (incluidos los sufrimientos) y ser uno con esta persona. En el amor humano esto es sólo un deseo. En el amor divino-humano es una realidad: "Para mí la vida es Cristo" (Fil 1, 21), decía san Pablo.

Nuestra respuesta amorosa hacia Él se tiene que manifestar en obras pues, como decía el Apóstol Santiago "la fe, si no va acompañada de obras, está realmente muerta" (St 2, 17). ¿A qué obras se refiere? 

Cuando los judíos le preguntaron a Jesús: "¿Qué haremos para realizar las obras de Dios?" (Jn 6, 28) Éste les respondió: "Ésta es la obra de Dios: que creáis en Aquél a quien Él ha enviado" (Jn 6, 29).  Pero la fe va unida siempre al amor: "Si me amáis guardaréis mis mandamientos" (Jn 14, 15). Esta idea se repite infinidad de veces:  "Quien acepta mis mandamientos y  los guarda, ése es el que me ama" (Jn 14, 21). "Si alguno me ama, guardará mi Palabra y mi Padre lo amará y vendremos a él y haremos morada en él" (Jn 14, 23). "Si guardáis mis mandamientos permaneceréis en mi amor, como Yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor" (Jn 15, 10). 

Es evidente que la fe a la que se refería Lutero no es la fe de la que aquí se habla. La herejía de Lutero apartaba de Diosporque su máxima era: "Peca mucho pero cree más", siendo así que el hombre no se salva por la sola fe, si ésta no va acompañada de obras de amor. 

El amor, manifestado en obras, es la esencia de la verdadera fe"Si me amáis, guardaréis mis mandamientos" (Jn 14, 15). ¿Y cuál es el mandamiento mayor? ¿Qué es lo que pide Jesús a sus discípulos?"Éste es mi mandamiento: que os améis unos a otros como Yo os he amado" (Jn 15, 12). Hay aquí una novedad con relación al Antiguo Testamento. Ya no se trata sólo de amar al prójimo como a nosotros mismos. Es mucho más: el salto es cualitativo porque para poder amar como Jesús ama tenemos que tener su Amor en nosotros, tenemos que tener su corazón. ¿Es esto posible? 

¿Cómo amaba Jesús? Podemos leerlo en el evangelio de san Juan:   "Habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin" (Jn 13, 1). O sea, los amó con la máxima intensidad posible y los amó hasta el extremo, dando su vida por ellos [más no se puede dar] conforme a lo que Él mismo dijo acerca del máximo amor posible:  "Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos" (Jn 15, 13). 

Jesús dio su Vida para la salvación del género humano, pero su mayor amor se manifestó, realmente, en dar la vida por los suyos, por sus discípulos, pues sólo a ellos les dijo: "Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que Yo os mando" (Jn 15, 14). E insiste: "Ya no os llamo siervos sino amigos, porque el siervo no sabe lo que hace su Señor; a vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que oí de mi Padre os lo he dado a conocer" (Jn 15, 15). 

Todo aquél que hace lo que Jesús manda se convierte en su amigo ... y entonces su Amor se hace efectivo en él. Y, por supuesto, también la salvación. Ésa es la razón por la que, en la Santa Misa, en el momento de la consagración, se escuchan estas palabras de labios del sacerdote, que actúa "in Persona Christi": "Éste es el cáliz de mi sangre, del nuevo y eterno testamento, misterio de fe, que será derramada por vosotros y por muchos para la remisión de los pecados", en donde se observa que Jesús dice "por vosotros"  (refiriéndose a los discípulos que tenía delante de sí; cfr Lc 22, 20) y "por muchos" (refiriéndose a todos aquéllos que habrían de creer más adelante en Jesús y convertirse también en sus amigos ... y entre los que [¡ojalá!] podríamos contarnos nosotros; cfr Mc 14, 24). 

Lo ideal sería que este "por muchos" abarcase a "todos los hombres", pero aunque su sacrificio es válido y sobreabundante para toda la humanidad, no obstante, la Redención (que es particular) sólo se hace efectiva para aquéllos a quienes les llega el Mensaje de Jesús y lo acogen con fe y con amor en su corazón.
Continuará

Selección de artículos de interés 5 Nov. 2017



5 de Noviembre de 2017


Adelante la Fe

La humanidad ha perdido el sentido del pecado (Javier Navascués)

Religión La voz libre

Metas bergoglianas empujadas por sus aliados
Blogosfera católica defiende a Weinandy después de su expulsión
Disney enseña Espiritismo a los niños
El caso Weinandy, un escarmiento para todos
Bergoglio: aplícate el cuento
Lutero dejó la Iglesia. Hoy, los disidentes se quedan.


IL TIMONE

IL CARD. SARAH: «NIENTE INTER-COMUNIONE TRA CATTOLICI E NON CATTOLICI. È NECESSARIO ESSERE CATTOLICI»


Catholic Herald


Una "misa ecuménica" es imposible, dice el cardenal alemán
Los sacerdotes casados ​​son la respuesta incorrecta a los problemas de Amazon
Pope Francis sides with Benedict by saying Christ shed blood ‘for many’

The Catholic World Report

En el 40 aniversario del primer diálogo evangélico-católico en misión (Inés Angeli Murzaku)


Gloria TV

Francis 'Church, "Cállate, ponte en línea o vete"
La "Misa Ecuménica" de Francisco está en marcha

Life Site News

Sacerdotes y laicos critican duramente a la Conferencia Episcopal de Estados Unidos por despedir al teólogo crítico del Papa (Lisa Bourne)

National Catholic Register

La cultura de la reprensión se ha mantenido en el discurso de la Iglesia  (Padre RAymond J. de Souza)

La Nuova Bussola Quotidiana

domingo, 5 de noviembre de 2017

Mi Señor y mi amigo: la soberbia del hombre [2 de 4] (José Martí)

La lectura del siguiente episodio, relatado en el libro de los Hechos de los Apóstoles, puede ayudarnos a entender que sólo el amor a  Jesucristo es lo que movió a sus discípulos a actuar del modo en que lo hicieron [y ésa es la prueba de fuego, válida siempre, especialmente en nuestros días, para distinguir entre los que son verdaderamente católicos y aquéllos que no lo son, por mucho que presuman de ello]:
"Entonces llamaron a los apóstoles, los azotaron, les ordenaron no hablar en el nombre de Jesús y los soltaron. Ellos salían gozosos de la presencia del Sanedrín, porque habían sido dignos de ser ultrajados a causa de su Nombre" (Hech 5, 40-41)
Todo esto viene a cuanto en el sentido de que no podemos exigir a Dios que actúe del modo en que a nosotros nos gustaría que actuaseSólo Dios es Dios y es su Palabra la que cuenta, la que dice verdad, pues Él mismo es la Verdad. Y el camino a seguir para un cristiano pasa siempre, necesariamente, por la cruz, por más que miremos hacia otra parte o escondamos los ojos, como el avestruz. 

La cruzque es "escándalo para los judíos y locura para los gentiles" (1 Cor 1, 23b) es, sin embargo, el único camino a seguir si queremos ser verdaderos discípulos de Jesucristo"Quien no toma su cruz y me sigue no es digno de Mí" (Mt 10, 38). La necesidad de la cruz, pues, no es algo opinable. Así lo entendió también el apóstol san Pablo: "Nosotros predicamos a Jesucristo, y éste crucificado" (1 Cor 1, 23a) ... reforzando lo que ya había dicho en infinidad de ocasiones, hasta el punto de exclamar, en una de ellas: "Y si alguien os anuncia un evangelio distinto del que recibisteis, ¡sea anatema!" (Gal 1, 9)

Todo lo dicho hasta aquí es absolutamente cierto, puesto que es palabra de Dios. De ello tenemos una completa seguridad, que no deja lugar a ningún género de duda ... y esto es debido a la fe que se nos ha dado, sin merecimiento alguno por nuestra parte ... pues sin esa fe, que es pura gracia de Dios, no podríamos tener tal seguridad. 

Que estamos en las manos de Dios es innegable ... pero no de cualquier "dios" inventado por el hombre, sino de Aquél que se reveló en Jesucristo, el Único por el que nuestra salvación es posible, pues "no hay otro Nombre bajo el cielo, dado a los hombres, por el que podamos salvarnos" (Hech 4, 12). Somos conscientes y sabemos que sólo Dios es DiosSi esta idea, que se corresponde con la realidad, la tuviésemos bien clara en nuestra mente, no nos dedicaríamos a jugar a ser "dioses" nosotros. 

La tentación inicial  del "seréis como Dios"  (Gen 3, 5), a la que cedieron nuestros primeros padres, es más actual que nunca. Y es la más peligrosa de todas: la soberbia. Al hombre se le han subido los humos y se ha vuelto majara, pues pretende cambiar la ley natural y decidir acerca de lo bueno y lo malo, en claro rechazo a la voluntad de Dios y a sus Leyes ... hasta el extremo de querer imponer ese "pensamiento" (que no es tal, pues va en contra de la verdad) al resto de la humanidad, cambiando así la religión de Dios por la religión del hombre, una religión que él mismo se ha fabricado, como los primitivos se fabricaban sus "dioses" ... y que pretende imponer a todos por la fuerza, sin respeto alguno por la libertad de los que no comulguen con esa falsa y perniciosa ideología

Y, sin embargo, se crea o no, lo cierto es que "todo se hizo por Él y sin Él no se hizo nada de cuanto ha sido hecho" (Jn 1, 3 ), como nos dice san Juan en el primer capítulo de su Evangelio, hablando del Verbo, es decir, del Hijo de Dios, segunda Persona de la Santísima Trinidad, que se hizo hombre ... y le pusieron por nombre Jesús.

Recordemos brevemente la parábola de los viñadores homicidas. En ella se cuenta que: 
El dueño de una propiedad plantó una viña, la arrendó a unos labradores y se marchó lejos de allí. Cuando se acercó el tiempo de los frutos envió a sus siervos a los labradores para recibir sus frutos. Pero éstos agarraron a los siervos, a uno lo golpearon, a otro lo mataron y a otro lo lapidaron. Y lo mismo les ocurrió a otros siervos que el amo envió. Finalmente, envió a su hijo, pensando que a él lo respetarían. Y, sin embargo, los labradores, al ver al hijo, se dijeron: "Éste es el heredero. Lo matamos y nos quedamos con su heredad". Y así lo hicieron: lo agarraron, lo sacaron fuera de la viña y lo mataron. (Cfr Mt 21, 23-39)
Leyendo esta parábola de Jesús, caemos enseguida en la cuenta que se está refiriendo también a nosotros, los hombres de nuestro tiempo [Al fin y al cabo sus palabras son Palabra de Dios y siempre son actuales e independientes de la época o el lugar en el que fueron dichas]. Y es lo cierto que, para nuestra desgracia, queremos apropiarnos de una viña que no es nuestra, sino de Dios, una viña que Él nos dejó para que la trabajáramos y la hiciéramos fecunda. Cuando Él regrese, nos pedirá cuentas sobre nuestro trabajo en su viña:  bien sobre  los frutos que hemos producido o bien sobre los que hemos dejado de producir, como ocurre en la parábola de los talentos o en la de las minas. Tenemos una misión que cumplir en esta vida"Negociad hasta mi vuelta" (Lc 19, 13) y hemos recibido unos talentos que tenemos que desarrollar para hacer fecunda, al máximo, la viña del Señor,  produciendo los frutos que Él espera.

No debemos olvidar nunca que esta viña nos ha sido arrendada y no es de nuestra propiedad: es Su viña. Y esta viña se rige por sus leyes y sus preceptos, los cuales tenemos la obligación de cumplir.  Y haciéndolo así estaremos demostrándole nuestro agradecimiento y nuestro amor, en correspondencia al amor que Él nos ha mostrado.  

Sin embargo, la cizaña se ha introducido en su viña, hasta un punto tal  que hemos llegado a desterrar de ella incluso al propio Hijo del Dueño de la viña. ¿Por qué?  Para hacer de la viña nuestra propia heredad. La viña tiene que ser nuestra y no estamos dispuestos a aceptar reglas de nadie, si siquiera del dueño de la viña. Matando al hijo del dueño, la viña será nuestra y nadie podrá ya decirnos lo que tenemos que hacer o dejar de hacer, sino que seremos nosotros mismos quienes fabricaremos las leyes por las que queremos regirnos

La realidad tenemos que construirla nosotros y ha de estar en conformidad con lo que nosotros -y sólo nosotros- decidamos que sea. Y puesto que Dios se opone a ello, se hace necesario arrojar a Dios de "nuestra" viña y de nuestra vida, en definitiva.  Y así, lenta, pero inexorablemente, se está preparando -en todas partes- la muerte de Dios, de modo que sea el hombre -y no Dios- quien decida y quien dictamine lo que es real o no lo es, lo que es bueno y lo que es malo. 

Este perverso objetivo (conseguido ya en algunos lugares del tierra y en el corazón de muchas personas) se pretende conseguir mediante la sustitución del culto a Dios por el culto al hombre y la implantación  de una "nueva religión universal" de la que todos los seres humanos formarán parte (lo quieran o no), y para ello se constituirá un Nuevo Orden Mundial (NOM), caracterizado por el Pensamiento ÚnicoToda la humanidad tendrá que acatar este "orden".

Una vez estable el NOM en todo el mundo, habrá llegado, por fin, el momento de la "liberación"nadie podrá ya decirle al hombre lo que es malo o lo que es bueno, porque el bien o el mal será lo que cada uno quiera que sea.  Todo quedará relativizado. Y no se podrá hablar, bajo ningún concepto -so pena de ser multado o incluso eliminado- de la verdad absoluta. Tal concepto quedará eliminado. No existirán ya nunca más verdades absolutas.  La única afirmación absoluta  que se permitirá, la única "verdad", por así decirlo ...  [valga la contradicción]  será una  verdad que irá cambiando con el tiempo y con las vicisitudes históricas ... pero nunca una verdad absoluta, que no pueda ser modificada

Si aun así alguien siguiera pensando que la verdad existe y que esa Verdad es Jesucristo, ese tal sería considerado POR TODOS como un retrógrado, un rígido, un fundamentalista, un ser peligroso que se opone al progreso irreversible de la sociedad. [¿... es que existe un progreso así? Por supuesto que no. ¡Pero ése será el "dogma"  ... d¡indiscutible... del NOM!]  

Ese tal, es decir, aquel que siga pensando que la verdad existe, será una especie a extinguir ... bien sea "voluntariamente" o bien haciendo uso de medios coercitivos, pues en esta nueva sociedad "el fin justificará los medios". Tales medios, además, de ser usados, serían considerados como necesarios para la preservación de la democracia, única diosa "falsa" que será admitida en ese mundo extraño

Evidentemente estas afirmaciones son un tanto utópicas ...pero es cierto que el Diablo, que es padre de la mentira, no duerme. Y hará de su parte todo cuanto pueda para engañar al mayor número posible de personas
Continuará

sábado, 4 de noviembre de 2017

Selección de artículos de interés 4 Nov. 2017



4 de Noviembre de 2017

Adelante la Fe


One Peter Five

La USCCB y la armadura de "Diálogo" (Steve Skojec)

Religión La voz libre

Vaticano promueve misa ecuménica cerca de san Pedro
Muchos sacerdotes estamos preocupados por Francisco

Catholic Herald

Married priests are the wrong answer to the Amazon’s problems (Ed Condon)


The Catholic World Report

P. Weinandy fue claro y directo. El USCCB no. (Christopher R. Altieri)P. Weinandy: "La USCCB me animó fuertemente a renunciar". (Carl E. Olson)

Gloria TV

Última hermana del arzobispo Lefebvre falleció

Life Site News

El Comité de Derechos Humanos de la ONU excluye formalmente al niño no nacido del 'derecho a la vida'

National Catholic Register


La Nuova Bussola Quotidiana

La catástrofe ambiental contra el hombre, con la Iglesia (Riccardo Cascioli)

Muchos sacerdotes estamos preocupados por Francisco



Soy un sacerdote católico Tristemente, debo permanecer en el anonimato por miedo. Lo que el P. Weinandy (destituido tras escribir a Francisco críticamente) ha escrito es verdad (ver aquí, aquí y aquí). Estoy bastante seguro de que miles y miles de mis hermanos sacerdotes piensan de la misma manera y están muy preocupados con el Papa Francisco. Oramos por él, amamos su oficio y queremos lo mejor para él. Sin embargo, este pontificado es lo más desanimante que ha sucedido durante nuestra vida sacerdotal.

¿Cómo sé esto? Porque muchos de nosotros hablamos del tema el uno con el otro. Sin embargo, tememos represalias si compartimos esto con nuestros obispos, superiores religiosos o nuestro "papá". Sentimos que vivimos en una casa con un padre abusivo que necesita que intervengamos, pero tememos que nos golpee.

Estamos atrapados Amamos tanto a Jesús, a su Iglesia y al papado que dudamos en hablar públicamente sobre nuestras preocupaciones con el Papa Francisco. Estamos sufriendo mucho. ¡Oren por nosotros! Oramos por mejores días. Días de claridad, verdad y celo por la casa de Dios. Esos días vendrán de nuevo.


Un sacerdote

Mi Señor y mi amigo: Fe y confianza en Dios [1 de 4] (José Martí)

Siempre se ha dicho -y es verdad- que debemos dejarlo todo en las manos de Dios y no afligirnos en exceso por aquellos acontecimientos que están ocurriendo y que no está en nuestra mano el darles una solución. Aun sabiéndolo, nos rebelamos y nos preocupamos. Bueno: eso es señal de que amamos, de verdad, al Señor y de que estas cosas nos afligen y nos hacen sufrir: no nos dejan indiferentes. 

Esto es bueno y es agradable a Dios, puesto que nos une más a Él ... pero es de suma importancia tomar conciencia de que tales sufrimientos nunca deben de llevarnos a la desesperanza: eso sería falta de confianza en Dios y caeríamos, inevitablemente, en la tristeza y en el abatimiento, justamente lo que el Enemigo pretende y desea para nosotros. Tenemos que superar esa tentación, y lo haremos, con la ayuda de Dios, que no nos va a faltar

No debemos consentir que la desesperación o la tristeza nos embarguen. Eso no es propio de un cristiano. No tenemos más que abrir el Nuevo Testamento por cualquier página. Y casi siempre, por no decir siempre, nos encontraremos con mensajes de lucha y de alegría. Nunca de desánimo

Hago la prueba, a ver qué ocurre, para comprobar si mis elucubraciones son ciertas. Abro el Nuevo Testamento y leo: "Animaos mutuamente y edificaos unos a otros, como ya lo hacéis" (1 Tes 5, 11). Y leo, un poco más adelante: "Dad gracias por todo, porque eso es lo que Dios quiere de vosotros, en Cristo Jesús" (1 Tes 5, 18). Un mensaje de ánimo y otro de acción de gracias a Dios por todo

Sería bueno que nos plantáramos en la Presencia de Jesús, a ser posible delante del Sagrario, y que le dijéramos todo aquello que nos ocurre o que nos preocupa, con una sinceridad que nos saliera del fondo del corazón. Un ejemplo podría ser éste: 
"Mira, Señor, lo que estoy haciendo y creo que no puedo hacer otra cosa. Ya sabes:  rezar mucho por tu Iglesia, sacrificarme, escribir en este blog, procurar ayudar y aclarar ideas a todo aquél que se encuentre en mi camino y esté abatido y hundido al ver que nuestra Santa Madre la Iglesia está siendo demolida ... ¡nada menos que por los mismos Jerarcas que la presiden!  Yo mismo estoy realmente confundido. La Iglesia que veo no es la Iglesia que siempre ha sido. Y eso me preocupa ... pero pongo en Tí mi confianza, con la seguridad de que las puertas del Infierno no prevalecerán contra ella ... aun cuando yo no llegue a verlo en esta vida terrena"
Ese diálogo -sincero- con el Señor nos producirá una gran paz interior, pues no es sino la consecuencia lógica que proviene de estar a su lado: "Venid a Mí todos los que estáis cargados y agobiados y Yo os aliviaré" (Mt 11, 28). 

En fin: podemos decirle al Señor eso o cualquier otra cosa que se nos ocurra y que salga, de verdad, de nuestro corazón. Cierto que Jesús dijo a sus discípulos [o sea, a nosotros, pues sus palabras son siempre actuales y van dirigidas al corazón de cada persona que las lea]:  "Bien sabe vuestro Padre de qué tenéis necesidad antes de que se lo pidáis" (Mt 6, 8) ... pero eso no nos priva de la necesidad que tenemos de pedirle cosas, pues tal es Su deseo: "Hasta ahora no habéis pedido nada en mi Nombre; pedid y recibiréis, para que vuestra alegría sea completa" (Jn 16, 24) ... y, sobre todo, de la necesidad que tenemos de hablar con Él y de expresarle nuestro amor"Mi amado es para mí y yo soy para Él" (Cantar 2, 16).

Sabemos, por la fe, que Él siempre nos escucha y atiende nuestras súplicas, aunque su respuesta no sea, posiblemente, la que nosotros esperamos o deseamos ... pero que no nos quepa la menor duda de que lo que nos ocurra [en tanto en cuanto es permitido por Él y sirve, en cierto modo, de respuesta a nuestras peticiones] será siempre para nuestro bien y será lo mejor... pues nos conoce mucho más que nosotros mismos (cfr salmo 138) y sabe lo que nos conviene; y lo más importante: porque nos quiere de una manera tal que ni siquiera somos capaces de imaginar, según el dicho del apóstol san Pablo: "Ni ojo vio ni oído oyó, ni pasó por el corazón del hombre, las cosas que preparó Dios para aquéllos que le aman" (1 Cor 2, 9). A nuestra mente acuden aquellas palabras que Jesús dirigió a su Padre en la noche de la última cena, con relación a nosotros: "Padre, quiero que donde Yo estoy también estén ellos conmigo, los que Tú me has confiado" (Jn 17, 24). ¡Si esto no es amor ... no sé qué es el amor! ... ¡Dios quiere estar con nosotros! : "Mi delicia es estar con los hijos de Adán" (Prov 8, 31) ... Incomprensible, tal vez, pero cierto.

Por eso, si tenemos fe, de verdad nunca podremos encontrar  motivos para estar tristes ... aunque suframos ... porque no los hay"¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿La tribulación o la angustia, la persecución o el hambre, la desnudez, el peligro o la espada? (...) Sobre todas estas cosas triunfamos por Aquél que nos amó. Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida (...) ni la altura ni la profundidad ni criatura alguna podrá separarnos del amor de Dios que está en Cristo Jesús, Señor nuestro" . Esto decía san Pablo a los romanos (Rom 8, 35. 37-39). Y así le hablaba a los colosenses: "Ahora me alegro en los padecimientos por vosotros y completo en mi carne lo que falta a la Pasión de Cristo por su cuerpo, que es la Iglesia" (Col 1, 24). Y es que san Pablo tenía una gran fe, que es, precisamente, lo que a nosotros nos falta y lo que tenemos que pedir con insistencia al Señor para que nos la conceda.

Nuestro sufrimiento, unido al suyo [puesto que formamos parte de su Cuerpo Místico, que es la Iglesia ...] es un sufrimiento purificador y redentor. Este sufrimiento tiene en Él un sentido, cual es el de la salvación del mundoNos convertimosporque así ha querido Él que seaen corredentores con Cristo, debido a nuestra unión con Él en su Cuerpo Místico, que es la Iglesia, por medio del Espíritu Santo, que habita en nuestros corazones, si es que estamos en gracia.  Así oraba Jesús a su Padre: "Que todos sean uno: como tú, Padre, en Mí y Yo en Tí: que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que Tú me has enviado" (Jn 17, 21). Jesús cuenta con nosotros.

La gente tiene que ver en nosotros a Jesucristo, lo cual ocurrirá cuando seamos uno en Él: ése es nuestro objetivo y eso es lo único que da sentido a nuestra vidaSabemos, de antemano, que no vamos a entender muchas de las cosas que ocurren, tanto en nuestro interior, como en nuestro entorno ... pero eso no sólo no nos lleva a perder la fe, sino a fortalecerla, pues tenemos presente y sabemos lo que nos dijo Dios, por boca del profeta Isaías: "Mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos" (Is 55, 8). Y en esa lucha estamos: en poner todo de nuestra parte para conformar nuestra mente y nuestra vida a la suya. Cuando Tomás le preguntó a Jesús: "Señor, no sabemos a dónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?", Jesús le respondió: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por Mí" (Jn 14, 5-6)

Ésa es una de las ventajas que tenemos sobre nuestros antepasados del Antiguo Testamento; y nunca daremos suficientes gracias al Señor por ello. Los judíos conocían Isaías 55, 8. Nosotros conocemos, además, Juan 14, 5-6. Antes de la venida de Jesucristo a este mundo, por muy grande que fuese el conocimiento que tuvieran de Dios algunos judíos, estudiosos de la Biblia, dicho conocimiento no se puede parangonar con el que nosotros tenemos si es que conocemos a Jesús, el Mesías que ellos esperaban y que vino ya a ellos, pero no supieron reconocerlo.   En Él se cumplieron todas las profecías predichas por los Profetas.


Continuará

viernes, 3 de noviembre de 2017

MONSEÑOR ATHANASIUS SCHNEIDER: El Papa no es propietario sino administrador del depósito de la Fe

Duración 26:45 minutos

Selección de artículos de interés 3 Nov. 2017


3 de noviembre 2017


ADELANTE LA FE

Lutero y el catolicismo contemporáneo (César Félix Sánchez)

CHRISTOPHER FERRARA
"Santidad, cuánta confusión". Y el teólogo es "purgado" (Lorenzo Bertocchi)

RORATE CAELI

Recuento imperdible de la vida y los errores de Lutero 

INFOVATICANA

San Martín de Porres 
Las consecuencias filosóficas y políticas del cisma Luterano (Julio Llorente)

GLORIA TV

El Vaticano declina negar planes secretos sobre "Misa ecuménica"

El cardenal quiere que los católicos renuncien a sus creencias
El cardenal Napier aclama Gay-Ideologue que criticó al padre Weinandy
El nuevo obispo quiere diáconos femeninos y sacerdotes casados

jueves, 2 de noviembre de 2017

Selección de artículos de interés 2 Nov. 2017



LITURGIA Y TRADICIÓN CATÓLICA

Conmemoración de todos los fieles difuntos 

GLORIA TV

Teólogo honrado por Francisco lo critica con dureza 
Un signo de Dios llevó al crítico de Francisco a actuar 
Italia: predicador bautista concelebra durante la Misa 

Francisco termina el celibato
El Papa Francisco preside una "Iglesia de Bully-Boy" 


ONE PETER FIVE

Pope Reported to Have Placed Married Priests on Amazonian Synod Agenda (Steve Skojec)
Tiempos de locura: Matricide y Martin Luther ( Aaron Seng)
Humanae Vitae at 50: Setting the Context. A Conference in Rome  (Alessandro Rico)

LIFE SITE NEWS

Catholics must let go of ‘cherished beliefs’ to ‘discern’ like Pope Francis: U.S. Cardinal (Pete Baklinski)
Los obispos de EE. UU. Enfatizan el "diálogo", prometen "lealtad" al Papa tras la renuncia del teólogo Weinandy (Claire Chretien)

CATHOLICVS

Teólogo capuchino obligado a dimitir como asesor de la Conferencia Episcopal de EE.UU. por escribir carta a Francisco sobre la confusión de su pontificado y la maldad de algunos obispos. Texto íntegro de la carta en español 

L'HOMME NOUVEAUX

Invoquer le repos éternel pour les défunts