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domingo, 9 de noviembre de 2025

Mark Miravalle: «María Corredentora no oscurece a Cristo, lo glorifica»



El mariólogo estadounidense Mark Miravalle, presidente del movimiento Vox Populi Mariae Mediatrici, ha lamentado la confusión generada tras la publicación del documento Mater populi fidelis, emitido el 4 de noviembre por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF). En esta nota, el organismo vaticano desaconseja el uso del título de Corredentora para la Virgen María y recomienda evitar expresiones que “oscurezcan la única mediación salvífica de Cristo”.

En declaraciones a La Nuova Bussola Quotidiana, Miravalle —profesor de mariología en la Franciscan University of Steubenville— defendió la validez teológica y tradicional de los títulos de Corredentora, Mediadora y Abogada, y recordó que millones de fieles y cientos de obispos han pedido a la Santa Sede una definición dogmática sobre el papel maternal y redentor de María.

“El título no pone a María al nivel de Cristo”

Miravalle reconoce la intención del documento del DDF de reafirmar la primacía absoluta de Jesucristo como único Redentor, pero advierte que negar el uso del título de Corredentora ha generado confusión entre los fieles. “Nunca se ha utilizado en la tradición católica ni en el magisterio papal para situar a María al nivel de la divinidad de Jesús. Hacerlo sería herejía y blasfemia”, subrayó.

El teólogo recordó que san Juan Pablo II empleó el título de Corredentora en siete ocasiones, al igual que santos como san Pío de Pietrelcina, santa Teresa de Calcuta, san Maximiliano Kolbe, san John Henry Newman y santa Teresa Benedicta de la Cruz. “No se puede considerar ‘inoportuno’ un título que ha servido para expresar la colaboración única de María con y bajo Cristo en la obra redentora”, añadió.

Los dogmas también exigen explicación

El DDF argumenta que el término “Corredentora” resulta inconveniente porque requiere explicaciones constantes. Miravalle responde que otros dogmas fundamentales —como la Inmaculada Concepción o la Transubstanciación— también exigen aclaraciones teológicas, y sin embargo no por ello se han abandonado. “Que un título requiera explicación no significa que deba descartarse, especialmente si ha sido usado por papas, santos y doctores de la Iglesia”, señaló el profesor.

La “nueva Eva” y la doctrina de la corredención

El mariólogo recordó que desde los primeros siglos los Padres de la Iglesia vieron a María como la “nueva Eva”. Citó a san Ireneo de Lyon, quien enseñó que “así como Eva fue secundaria pero decisiva junto con Adán en la caída, María lo fue junto con Cristo en la redención”. El Concilio Vaticano II —añadió— reafirma esta enseñanza en Lumen Gentium 56, donde se dice que María “con su obediencia se convirtió en causa de salvación para sí misma y para todo el género humano”. “Ese papel subordinado y decisivo de María con el nuevo Adán es precisamente el sentido del título de Corredentora”, explicó.

Ecumenismo y verdad doctrinal

El documento del DDF también afirma que el uso de estos títulos podría dificultar el diálogo ecuménico. Miravalle recuerda que el borrador de 1962 del texto mariano del Vaticano II incluía el título de Corredentora, y que una subcomisión lo retiró por prudencia pastoral, no por error teológico. “El propio concilio reconoció que la expresión ‘Corredentora del género humano’ es en sí misma muy verdadera”, señaló. A su juicio, la unidad de los cristianos no debe buscarse a costa de minimizar la verdad plena sobre María, como enseñó san Juan Pablo II en Ut Unum Sint. “La Virgen es la Madre de la unidad, no un obstáculo para ella”, insistió.
María Mediadora de todas las gracias

El teólogo cuestiona también que el DDF haya puesto en duda el título de Mediadora de todas las gracias. Recuerda que durante cuatro siglos los papas han sostenido esta enseñanza, desde Benedicto XIV (1749) hasta León XIV, quien el 15 de agosto de 2025 usó expresamente el término Mediatrix gratiarum en una carta al cardenal Christoph Schönborn. “El magisterio ha enseñado que todas las gracias redentoras de Cristo llegan a la humanidad a través de la mediación maternal de María”, explicó, lamentando que el documento “no cite ni una sola vez esta enseñanza papal constante”.

Un llamado al quinto dogma mariano

Miravalle considera que la polémica surgida tras Mater populi fidelis ha reavivado el interés por una definición dogmática que proclame a María Corredentora, Mediadora y Abogada. “La confusión actual demuestra la necesidad de una definición solemne que aclare quién es María y qué significa su cooperación con Cristo”, afirmó.

El movimiento que preside, Vox Populi Mariae Mediatrici, ha recogido más de ocho millones de firmas en 150 países, respaldadas por unos 700 obispos y cardenales, en favor de este quinto dogma mariano. Miravalle concluye recordando al cardenal John Henry Newman, quien sostenía que “la autoridad eclesiástica debe escuchar a los fieles en el discernimiento del desarrollo doctrinal”. “Rezo para que la Santa Sede practique una auténtica sinodalidad, escuchando al pueblo de Dios que pide honrar a la Madre del Redentor”, dijo.