Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que procede de Dios (1 Cor 2, 12), el Espíritu de su Hijo, que Dios envió a nuestros corazones (Gal 4,6). Y por eso predicamos a Cristo crucificado, escándalo para los judíos y locura para los gentiles, pero para los llamados, tanto judíos como griegos, es Cristo fuerza de Dios y sabiduría de Dios (1 Cor 1,23-24). De modo que si alguien os anuncia un evangelio distinto del que recibisteis, ¡sea anatema! (Gal 1,9).
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viernes, 3 de julio de 2020
Caso del cardenal Pell
El caso de Pell sigue resonando y, después de meses en una prisión de máxima seguridad, lo tenemos inocente. La justicia australiana ha quedado muy mal en todo este caso pero, a fin de cuentas, ha contado con instrumentos que han permitido al cardenal defenderse. En otros sitios esta defensa es imposible.